jueves, 18 de mayo de 2017

¡SHABAT SHALOM!
SOBRE SORPESAS, MANDATOS, ESPONJAS, Y UN ÁRBOL SECO...
Resulta sorprendente la cantidad de jóvenes que no tienen la más mínima intención de contraer matrimonio.
Y también, cada vez son más los jóvenes que tampoco quieren tener hijos.
Y como la vida es de cada persona, cada persona puede hacer con su vida lo que considere lo correcto.
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Es una especie de mandato silencioso, que normalmente se comparte con amigos muy cercanos, que los matrimonio que no funcionan “del todo bien”, deben ser mantenidos “cueste lo que cueste”.
Por supuesto, se aclara, “si no tuviéramos hijos”, ya nos hubiéramos separado. “Pero la estructura familiar y el vivir con un padre y una madre, es fundamental para los hijos”.
Y Como la vida es de cada persona, cada persona puede hacer con su vida lo que considere lo correcto.
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Una de las bases de la educación, es que los niños aprenden mucho más de los actos, que de las palabras.
Dos mandamientos educativos: “hay que enseñar con el ejemplo”, y: “los niños son como esponjas, y lo captan todo, desde muy pequeños”.
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Pregunto:
¿No será que los jóvenes no quieren contraer matrimonio, porque, al ser como esponjas, que lo captan todo, también “captaron” que el matrimonio de sus padres estaba seco y reseco?
¿Qué lo único que sucedía en sus casas era un total y absoluto desamor?
¿Qué joven elegiría eso para su vida?
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Para pensarlo…

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