domingo, 21 de mayo de 2017

¡Feliz Día Jerusalén!
Jerusalén, cuna de las tres religiones monoteístas más importantes del universo, ilumina la Tierra de Israel y al mundo entero a través de su permanente y mágico resplandor.
Jerusalén, ciudad bendecida desde su creación, cumple en estos días 50 años desde su reunificación, un matrimonio espiritual indivisible compuesto de la unión de la bendecida tierra con su alma judía.
Su significado en idioma hebreo simboliza “la ciudad de paz” y en idioma árabe “la santa”; sus significados combinados la convierten en “Ciudad de la Santa Paz”; que hermosa bendición y profundo mensaje… ojalá en un futuro cercano el extremismo musulmán comprenda que, haciendo la paz con Israel, juntos lograremos convertir nuestro sueño en realidad.
Más de 900.000 habitantes conviven hoy en día en esta ciudad mágica; judíos, cristianos, musulmanes, hombres, mujeres, niños y ancianos estudian, trabajan, oran y disfrutan el sentir la bendición de D-s en sus vidas, en sus hogares, en sus almas… una combinación espiritual que sólo Jerusalén les puede ofrecer.
Por primera desde la creación del estado de Israel en 1948, Jerusalén abre sus puertas oficialmente al judaísmo, al cristianismo y al islam, convirtiéndola en un destino turístico y religioso visitado por millones de personas que, año tras año, peregrinan a la Tierra de D-s, la ciudad de los reyes David y Salomón.
El gran templo judío, Beit Hamikdash fue creado en esta Tierra para ofrecer al pueblo hebreo un enlace espiritual y así arrimar sus almas lo más cercano a su creador.
Jerusalén con sus ocho puertas, Puerta de Jaffa, también llamada Puerta de la Torre de David, Puerta de los Leones, Puerta de Damasco, Puerta de Sión, Puerta de Dung, Puerta de Herodes, Puerta Nueva y Puerta Dorada abren el corazón de la vieja ciudad amurallada hacia el resto de Israel y al mundo entero. Una de ellas, la Puerta Dorada, permanece aún sellada y será nuevamente abierta con la llegada del ansiado Mesías.
Hoy, representando a Israel en mi misión como diplomático en Miami y hermano del pueblo judío, les hago llegar mis mejores deseos de paz a mis hermanos cristianos, judíos y musulmanes deseándoles las mejores bendiciones en este año y en muchas más por venir.
Salmo 137:5
Si me olvidara de ti, Jerusalén, que se paralice mi mano derecha…
Olvidemos nuestras diferencias y recordemos que Jerusalén fue creada para bendecir y para unir a los pueblos del mundo entero.
Los espero en nuestra Tierra Jerusalén, capital indivisible e indiscutible del Estado de Israel, para que juntos recorramos los caminos en donde nuestros antepasados dedicaron sus vidas por crear, cuidar y bendecir la Tierra de D-s.
Que le Eloim bendiga a Israel, a sus países vecinos y al mundo entero.
Amén!
Sr. Lior Haiat
Consul General de Israel en Miami

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