martes, 8 de mayo de 2012

Israel cancela las elecciones anticipadas tras el acuerdo de Netanyahu con la oposición de centro

INTERNACIONAL
Israel se acostó la noche del lunes esperando elecciones el próximo 4 de septiembre, y se ha levantado con la noticia de que tendrá el mismo gobierno hasta octubre de 2013 y con un acuerdo de coalición entre el partido opositor Kadima y Benjamín Netanyahu. Netanyahu, que anunció a bombo y platillo este domingo la convocatoria de elecciones anticipadas y la disolución del Parlamento, lanza ahora esta bomba política que ha sacudido a todo el país. Ha sido un acuerdo relámpago que se ha producido durante la madrugada, tan sólo un día después de que comenzaran las reuniones para disolver el Parlamento, como estaba esperado. En una rueda de prensa conjunta, Netanyahu y el nuevo líder del Kadima, Shaul Mofaz, han explicado que la decisión se tomó para preservar la estabilidad del país. “El estado de Israel necesita estabilidad. Los grandes logros del gobierno hasta ahora han sido el resultado de una estrecha cooperación entre las distintas partes de la coalición, pero sobre todo debido a la estabilidad política,” comentó Netanyahu durante la rueda de prensa. También resaltó que ante la posibilidad de formar un gobierno de unidad nacional y formar así la coalición gubernamental más amplia de la historia de Israel, no dudó en añadir al Kadima antes que celebrar elecciones anticipadas, en aras de la estabilidad política. Una de las razones para este acuerdo, que la líder del partido laborista, Shelly Yehimovich ha calificado hoy de “repugnante y sucio,” es que de esta manera Netanyahu adquiere más capacidad de maniobra dentro de la coalición, que cuenta con muchos parlamentarios de derechas y ultra religiosos, mientras que Mofaz consigue convertirse en viceprimer ministro. Lamento en la oposición Netanyahu, tal y como ha anunciado durante la rueda de prensa, podrá ahora retirar ahora la controvertida ley conocida como Ley Tal, por la que los ultraortodoxos podían evitar hacer el servicio militar, obligatorio en Israel para todo el mundo, los hombres tres años y las mujeres dos. Hasta ahora, el partido religioso Shas había amenazado con bajarse de la coalición y desestabilizar al gobierno si la Ley Tal pasaba en el Parlamento, pero con la incorporación del Kadima, Netanyahu tiene ahora manga ancha para aprobar una nueva ley. Otra de las razones por las que el nuevo acuerdo beneficiará ampliamente a Netanyahu es que el gobierno adquiere más estabilidad política que nunca, dando así más credibilidad al ejecutivo ante la posibilidad de atacar Irán, algo con lo que Netanyahu lleva amenazando desde hace meses. El resto de políticos fuera de la coalición se lamentaban sobre la cancelación de las elecciones anticipadas, que muchos veían como una oportunidad para subir escaños. Una Shelly Yehimovich lívida y furiosa ante las cámaras tras anunciarse el acuerdo, acusó a Mofaz de defraudar a su electorado. “Mofaz prometió que trabajaría por la justicia social, !¿pero desde dónde?! !¿Con Netanyahu?! Después de este acuerdo es imposible que el público pueda confiar en sus políticos.” Yehimovich se convierte a partir de ahora en la líder de la oposición, con uno de los partidos políticos más pequeños que ha tenido jamás el Parlamento israelí.