**No Conocerás A Mis Lágrimas**
Si hay algo que nunca verás: es verme llorar por un amor
venenoso y maldito,
que tu supiste crear. Que le diste vida, con tus besos y
carisias, con tus mentiras
y falsedades y como una ponzoña me lo trasmitiste a mi.
Lloraré en la soledad de mi vida, en compañía de mi dolor y
con mis puños, en
la boca, impediré que mis gritos salgan a la luz.
Nadie me verá llorar y al verte en la calle o en el café,
daré vuelta la cara y con
mucho dolor te ignoraré. Tu no te mereces las lágrimas de
nadie; eres poca cosa,
ya te enterarás y al correr los años y te alcance la
madurez, con sorpresa verás,
que así como perderás tu figura, tu encanto naufragará en el
olvido que es el
castigo que la vida nos propone.
Ni una lágrima verás de mis ojos; mis ojos que tanto te
amaron, que vigilaban
tus actos y gozaban a la vez. Y así como mis manos olvidaron
tu piel, de la misma
manera mis ojos cubrirán su dolor, con una sonrisa, forzada,
que tu tendrás que
ignorar.
Muchos hombres pasarán por tu vida y a muchos otros los
harás penar; tu hermoso
cuerpo, tu mirada mansa, tus labios jugosos y tus brazos que
al abrazar transmitían
el calor, que había en ti.
Todo eso, bella e insensible mujer, el tiempo te lo quitará
y en su lugar dejará años,
sólo años, que de nada te servirá.
¡ Entonces, sí, te acordarás de mi !
Mario Beer-Sheva
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.