EL LUGAR DE CADA UNO DE NOSOTROS
Los relatos bíblicos más conocidos suelen ser los que, normalmente, menos comprendemos.
Los leemos de memoria.
Y hay uno en particular que cumple estas condiciones:
Tras comer del árbol prohibido, el Hombre se esconde de El Eterno entre los árboles del Jardín.
Entonces Dios llama al Hombre y le dice:
“¿Dónde estás?”
Pregunto:
¿Acaso realmente Dios no sabía dónde estaba el Hombre?
No creo que así deba entenderse la pregunta divina.
El Creador le pregunta al Hombre: “¿Dónde estás? Porque te fui a buscar a donde realmente deberías estar, y no te hallé”.
Significa:
¿Por qué te apartaste de “tu” sitio?
¿Qué haces en un lugar que no es el tuyo?
No sé por qué, pero me parece que esta pregunta jamás se interrumpió, y que desde aquellos días resuena en el alma de cada uno de nosotros.
Reflexiono:
¡Ay del hombre que vive fuera de “su” sitio!
Ocultándose entre los árboles del jardín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.