AMIGOS DE ISRAEL - CORDOBA (ARGENTINA)

EDITORIALES

Inédita admonición de la ONU a La Autoridad Palestina

by Ruben Kaplan • 21 agosto 2019 • en Inédita admonición de la ONU a La Autoridad Palestina

Al fin, luego de  muchos años de oprobiosa omisión, el diario israelí Jerusalem Post publicó el 13 de agosto  pasado que  la  ONU -el cuestionado organismo internacional-  que invariablemente  condena  el accionar de Israel, llamó severamente la atención a La Autoridad Palestina (AP) por el discurso de odio y antisemitismo contenido en sus declaraciones, medios oficiales y libros de texto escolares.

La ONU no reconoce a Palestina como un Estado miembro, pero en virtud  que designó en 2012  a la AP como un Estado no miembro, la facultó a ésta para firmar tratados y convenciones, entre ellos la discriminación racial. Haciendo uso de esa  prerrogativa la Autoridad Palestina firmó siete de los nueve tratados de derechos humanos de la ONU, pero esa potestad que le fue conferida, la obliga a una revisión de su historial de derechos humanos, como si fuera un Estado miembro.

La miembro del Comité de Derechos Humanos, la profesora  Chinsung Chung de Corea del Sur, durante una sesión del Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de la ONU en Ginebra, dirigiéndose a los representantes palestinos les dijo: “Varios informes de ONG señalaron prejuicios antisemitas y antiisraelíes e incitación al odio, especialmente en los medios [palestinos] y los discursos de funcionarios estatales. ¿Puede el Estado parte [la Autoridad Palestina] dar alguna explicación al respecto?”, interrogó.  Asimismo,  el Embajador brasileño Silvio José Albuquerque e Silva, miembro del comité antirracismo de la ONU, durante la primera revisión del cuerpo de la delegación palestina., expresó entre otras consideraciones. “Sr. Presidente, estimado Jefe de la Delegación del Estado de Palestina, colegas.

Este comité ha recibido, y no solo en papel, sino durante esta reunión a la que me referí hace unos minutos, información perturbadora sobre la presencia de antisemitismo y contenidos discriminatorios en los libros de texto utilizados por niños y adolescentes en las escuelas palestinas. Cuando digo eso, reconozco lo que expresó el Jefe de Delegación sobre la revisión de muchos libros de texto con contenidos discriminatorios. Pero de todos modos, se proporcionaron a nuestro comité varios ejemplos de lenguaje supuestamente racista y antisemitismo contenidos en los libros de texto hasta 2018, al menos.

“Nuestra convención obliga a los Estados partes a adoptar medidas inmediatas y efectivas, particularmente en educación, para combatir la discriminación racial y los prejuicios entre diferentes grupos raciales y étnicos, sobre la jurisprudencia”.

Bien, permítanme referirme a un tema relacionado con la educación y la lucha contra la discriminación racial que algunos de mis colegas ya plantearon bajo algunas perspectivas diferentes, y especialmente el relator. A principios de este año, en enero de este año, el Secretario General de la ONU asistió a la ceremonia de conmemoración del Holocausto en la histórica sinagoga Park East de la ciudad de Nueva York.

En su discurso, advirtió que el antisemitismo, al que llamó, y cito, «el prejuicio más antiguo del mundo», está atormentando nuevamente a las nuevas generaciones en todo el mundo. Prometió que la ONU, y cito nuevamente, «siempre estará a la vanguardia de la lucha contra todas las formas de odio y trabajará para fortalecer los esfuerzos para defender la dignidad humana para todos».

 En agosto de este año, el  ingeniero físico, político y profesor portugués, Antonio Guterres , Secretario General de la ONU, recordó que la situación en el Medio Oriente a veces se usa como pretexto para expresar el antisemitismo. En palabras del Secretario General, y cito nuevamente: «Expresar el deseo de destruir el Estado de Israel es una forma inaceptable de antisemitismo moderno».

Esta plausible y tardía alocución, remedia sólo mínimamente en parte el historial de la ONU en lo concerniente a la posición del organismo en lo referido a la vulneración de los derechos humanos por parte de los palestinos  sobre la trata de personas y la discriminación contra la mujer, incluso con respecto al matrimonio, la violencia doméstica y las leyes sobre propiedad.

Cabe recordar  que desde la suscripción del convenio palestino-israelí rubricado en 1994 en el marco de “Los Acuerdos de Oslo”, La Autoridad Nacional Palestina, tiene soberanía sobre todo aquello que concierne a los programas de enseñanza y edición de libros y cuadernos escolares. Estos se basan fundamentalmente en los manuales publicados en Egipto y Jordania, pero el Ministerio de Educación de la AP, asume por sí solo, la responsabilidad del contenido pedagógico, diagramación e impresión de dichos materiales para uso de los niños palestinos. Hace unos años, The Center for Monitoring the Impact of Peace, (CMIP) examinó 160 manuales  y libros escolares publicados por la ANP. Los resultados de esta evaluación, espantan. Muestran que esos textos apuntan a inculcar en la niñez y juventud, el odio a los judíos en general y a Israel en particular, instándolos a ser futuros mártires. También la televisión de los palestinos, exacerba ese sentimiento, con programas que instilan ponzoña antijudía, apelando a recetas nazis y libelos medievales o a los desacreditados “Protocolos de Los Sabios de Sión”.

A pesar de las abrumadoras pruebas y evidencias sobre la incitación al odio y la instigación a asesinar israelíes y judíos que contiene la educación desde temprana edad para los niños palestinos, el representante del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Autoridad Palestina, Ammar Hijazi, habló brevemente al final de la audiencia.

Acusó a los miembros del comité de aceptar los reportes de ONG que fueron “fundadas y financiadas para negar a los palestinos sus derechos, su narrativa y difundir falsedades sobre ellos”, y agregó que esta actividad solo daña la integridad de la ONU.

Hijazi tildó de “lamentables” a las acusaciones sobre discurso de odio sobre la Autoridad Palestina. “No discriminamos a ninguno de nuestros ciudadanos por motivos étnicos, religiosos o sexuales. Somos un Estado que está tratando de encontrar su camino y aun formulando sus leyes”, dijo Hijazi sin ruborizarse.