La mañana del 7 de octubre, tras las primeras sirenas, Shaked Habani, de 22 años, llamó a su madre y le prometió que se iría en cuanto la situación se calmara un poco.
Cuando su madre se enteró del ataque terrorista, volvió a llamar a Shaked. Shaked le respondió en un mensaje: "Mamá, espera, te estoy grabando una nota de voz".
Nunca más volvió a responder.
Su cuerpo fue identificado cinco días después. En su teléfono encontraron un video que había grabado en tiempo real, describiendo a los terroristas irrumpiendo. En él, dice: «No sé si sobreviviremos, pero Dios me ama».
La mayoría de sus amigos que la acompañaban en el festival también fueron asesinados.
Hamas es un mal enorme como el peor de los demonios. Hamas no tiene derecho a existir. Todos debemos apoyar a Israel en esta lucha por nuestra subsistencia.
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