Hamás ha estado inflando el número de palestinos que, según afirma, han muerto por desnutrición, y la mayoría de los fallecidos verificados tenían afecciones médicas preexistentes, afirmó el martes el Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT) de Israel.
COGAT afirmó que funcionarios de seguridad israelíes y expertos médicos habían revisado las afirmaciones de Hamás sobre la hambruna en Gaza y descubrieron que el grupo terrorista ha llevado a cabo "una campaña orquestada como parte de un esfuerzo más amplio para desacreditar al Estado de Israel y obtener réditos políticos". “La revisión exhaustiva reveló una brecha significativa entre el número de muertes atribuidas a la desnutrición, según lo informado por el Ministerio de Salud de Hamás, y los casos documentados y publicados con detalles completos de identificación”, declaró COGAT, incluso en medios de comunicación y redes sociales.
Desde el comienzo de la guerra hasta junio de 2025, el ministerio dirigido por Hamás reportó 66 muertes por presunta inanición. Posteriormente, en julio de 2025, reportó más de 133 muertes por este tipo de inanición.
“A pesar del supuesto alto número de muertes en julio, el Ministerio de Salud de Hamás no reveló la identidad de los fallecidos como había hecho en el pasado”, denunció COGAT.
El Ministerio de Defensa indicó que el 19 de julio, Hamás anunció 18 muertes por inanición y, el 22 de julio, otras 15. “Sin embargo, una revisión exhaustiva de varias plataformas identificó solo unos pocos casos reales. Esta discrepancia entre los informes numéricos y las publicaciones individuales genera dudas sobre su credibilidad”, añadió.
“El análisis caso por caso de las muertes publicadas muestra que la mayoría de quienes presuntamente fallecieron por desnutrición tenían afecciones médicas preexistentes que llevaron al deterioro de su salud, sin relación con su estado nutricional”, afirmó COGAT. “También se descubrió que algunos incluso habían recibido tratamiento médico en Israel antes de la guerra. Esto indica que los casos documentados no representan la condición general de la población en la Franja de Gaza, sino que presentan selectivamente casos extremos relacionados con enfermedades preexistentes”.
COGAT señaló que, en las últimas semanas, circularon en línea imágenes de un niño de cuatro años demacrado, Abdullah Hani Muhammad Abu Zarqa, quien, según se afirma, padecía inanición. Una revisión de COGAT determinó que padece una enfermedad genética que causa deficiencias de vitaminas y minerales, osteoporosis y debilitamiento óseo, una enfermedad hereditaria que también afectó a otros miembros de la familia. Además, se estableció que cuatro meses antes del estallido de la guerra, el niño viajó con su madre, con la aprobación israelí, para recibir tratamiento médico en el Hospital Al-Makassed de Jerusalén Este, según el comunicado.
Otro caso detectado por el COGAT fue el de Karam Khaled Mustafa al-Jamal, de 27 años, quien, según se informó, murió de inanición. "El sistema de defensa determinó que Karam padecía desde la infancia distrofia muscular y parálisis parcial, lo que le causaba dificultades para tragar. Se trataba de una afección médica de larga duración, no relacionada con la situación nutricional general de Gaza", declaró COGAT.
COGAT indicó que la revisión, "incluyendo el análisis de pruebas fotográficas más amplias y otra información disponible, concluyó que no existen indicios de un fenómeno generalizado de desnutrición entre la población de Gaza". “La organización terrorista Hamás explota cínicamente imágenes trágicas y las utiliza indebidamente para una campaña de propaganda falsa y oportuna destinada a generar presión y crear una opinión pública negativa contra el Estado de Israel”, declaró COGAT, añadiendo que “seguirá trabajando para mejorar la respuesta humanitaria en la Franja de Gaza, en cooperación con la comunidad internacional, al tiempo que rechaza las acusaciones de hambruna en la Franja de Gaza”, recogió The Times of Israel.
COGAT no publicó el informe completo.
Abdulla Abu Zarka (izquierda), un niño que, segun se informa, padece hambre en Gaza, con su madre y su hermano en una foto que circulo en linea en julio de 2025. (X; usada de acuerdo con la Clausula 27a de la Ley de Derechos de Autor)
Si bien las autoridades israelíes afirman que muchas de las personas que murieron desnutridas en Gaza padecían enfermedades preexistentes, los expertos en hambruna afirman que esto es típico en las primeras etapas de una crisis de hambre.
Israel niega las acusaciones de hambruna generalizada y ha afirmado que realiza esfuerzos para permitir la entrada de suficiente ayuda humanitaria a Gaza. Pero ante la fuerte presión internacional, el gobierno recientemente incrementó considerablemente el flujo de suministros, después de haber prohibido por completo la ayuda durante 11 semanas entre marzo y mayo.
Israel ha respaldado el controvertido nuevo mecanismo de la Fundación Humanitaria de Gaza (FGH) para su distribución, ha culpado a Hamás de interrumpir la distribución de alimentos y ha señalado la presencia de cientos de camiones cargados con ayuda humanitaria esperando en Gaza para ser distribuidos. La ONU ha afirmado repetidamente que la FGH ha rechazado las solicitudes de autorización de recolección y distribución, y que las peligrosas y complejas condiciones dentro de Gaza, incluyendo multitudes hambrientas y bandas delictivas, dificultaban enormemente la distribución de la ayuda.
La ONU, que se ha negado a colaborar con la FGH, alegando que viola los principios humanitarios, ha declarado que más de 1.000 personas han muerto cerca de los centros de distribución de ayuda desde mayo, muchas de ellas en instalaciones de la FGH. Israel afirma que estas cifras están infladas, aunque ha reconocido haber lanzado "disparos de advertencia" contra personas que se acercaron a las tropas de una manera que, según afirma, las puso en peligro. No ha proporcionado cifras alternativas.
La guerra en Gaza comenzó el 7 de octubre de 2023, cuando miles de terroristas liderados por Hamás invadieron el sur de Israel, asesinando a unas 1200 personas y tomando 251 rehenes, de los cuales 49 siguen retenidos, y se cree que 20 siguen con vida. Hamás también retiene el cuerpo de un soldado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) muerto en Gaza en 2014.
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