Los drusos del Golán se unen a las FDI: un giro histórico en su integración en Israel
Por primera vez desde 1967, jóvenes drusos de las alturas del Golán eligen alistarse en el ejército israelí, símbolo de un deseo más firme de pertenencia a la sociedad israelí.
Es un giro discreto pero profundo en las relaciones entre el Estado de Israel y la comunidad drusa del Golán.
Según datos revelados por Israel Hayom, aproximadamente 150 drusos originarios de las alturas del Golán han decidido alistarse en las FDI desde el inicio de la guerra “Espadas de Hierro”.
De ellos, 120 se unieron a la reserva y unos treinta iniciaron un servicio regular.
Antes de la guerra, solo se habían registrado cuatro inscripciones.
Estas cifras representan un cambio de mentalidad significativo dentro de una población que durante mucho tiempo había permanecido al margen del servicio militar obligatorio israelí.
Los drusos del Golán, cuya mayoría posee un estatus de «residente permanente» sin ciudadanía israelí, habían elegido tradicionalmente no servir en el ejército, por lealtad a sus raíces sirias o por neutralidad política.
Pero desde el 7 de octubre y la guerra contra Ham@s, un nuevo aire sopla sobre la comunidad.
La proximidad geográfica con Siria, la amenaza regional persistente y la creciente solidaridad con sus compatriotas israelíes han reavivado un sentimiento de pertenencia.
“Vivimos aquí, compartimos el mismo destino que el resto del país”, confiesa un joven comprometido citado de manera anónima.
Las autoridades israelíes saludan esta evolución como un signo de integración y confianza mutua.
Para muchos israelíes, este compromiso refleja un deseo de unidad nacional en un momento en que el país se reconstruye, tanto moral como socialmente, después de las pruebas de la guerra.
Si la tendencia continúa, podría redefinir el lugar de los drusos del Golán en el tejido israelí, convirtiéndolos en actores plenos de la defensa y de la sociedad del país.
Delphine Miller
Traducido por Lilian Rotter para Amando Nuestra Cultura Judía.
Israj
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