El primer festejo de la Independencia de Israel, en 1949, fue austero.
Sin certezas y con esperanza .
Celebraba una bisagra en la historia humana.
El Estado judío, renacido de las cenizas, era entonces atacado desde siete frentes.
Notablemente, el múltiple ataque se ha reiterado en el último año, pero nuestra fragilidad extrema de aquellos días se ha disipado. Hoy a la noche, la tristeza de Yom Ha’Zikarón cederá a la algarabía por el 77º cumpleaños del Estado de Israel.
Cuando nacía el joven país, el poeta judeoargentino César Tiempo cantaba que “los macabeos de hoy, lograron que lo que fue, volviera a ser…. forjado en coraje, se yergue Medinat Israel, por los siglos de los siglos…”.
En cumplimiento de la milenaria visión profética, prorrumpió una nación resiliente, creativa, feliz.
Gustavo Perednik
Bajo la Lupa
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.