EL COMANDANTE DE TANQUISTAS QUE AHORA DIRIGE EL EJERCITO DE ISRAEL VE UN AÑO DE GUERRA
Eyal Zamir, quien asume el mando tras una larga lista de paracaidistas, promete un enfoque nuevo y más agresivo hacia Gaza.
Por Rory Jones y Dov Lieber
Abril 4, 2025
traducida por Marcela Lubczanski
Eyal Zamir está liderando un impulso renovado hacia Gaza. © Ronen Zvulun/Reuters
Durante mucha de la guerra en Gaza, el ejército de Israel ha argumentado que el objetivo del Primer Ministro Benjamin Netanyahu de destruir a Hamas sólo puede ser logrado con una solución política.
Ahora, el ejército tiene un nuevo jefe, y él tiene una idea diferente.
Eyal Zamir, un ex comandante de tanquistas de 59 años de edad, está liderando el impulso renovado de Israel hacia Gaza para liberar a los rehenes y forzar a Hamas a rendirse. El se está preparando para desplegar decenas de miles de soldados a lo largo del enclave en una gran ofensiva terrestre para ocupar tierra y erradicar a los terroristas restantes de Hamas—un plan respaldado por el gobierno de Netanyahu.
Es un cambio arriesgado en la táctica en la guerra que ahora lleva 18 meses y refleja la nueva cultura que quiere promover Zamir dentro del ejército, de acuerdo con personas al tanto de sus planes.
En los últimos años, los jefes militares de Israel han llegado en gran medida de unidades de las fuerzas especiales y se han apoyado en la capacidad tecnológica del país para llevar a cabo operaciones selectivas, de acuerdo con ex funcionarios militares israelíes y personas que estudian al ejército israelí.
Esa cultura fue reflejada en el enfoque de Israel en los primeros 15 meses de la guerra. El ejército se movió sistemáticamente a través de la Franja de Gaza. Pero el ejército no retuvo territorio más allá de los dos corredores estratégicos y tuvo que regresar repetidamente a zonas donde los militantes se habían reagrupado. Una vez que entró en vigencia un cese del fuego de dos meses en enero, Hamas resurgió y escenificó espectáculos elaborados afirmando su control.
Zamir quiere sacar de juego decisivamente a Hamas con una ofensiva terrestre a gran escala y de meses de duración antes que sea decidida cualquier solución política para Gaza, de acuerdo con personas familiarizadas con su pensamiento.
En un cambio importante, él está preparado para desplegar suficientes tropas para ocupar el enclave indefinidamente y controlar la distribución de ayuda humanitaria, algo que Israel ha evitado hasta ahora.
“El nuevo jefe del estado mayor viene de una cultura militar diferente a la de nuestros jefes de estado mayor recientes,” dijo Ehud Yaari, miembro del Washington Institute for Near East Policy que trabajó con Zamir en un documento en la think tank. “Una cultura de despliegue masivo.”
Zamir es el primer jefe de estado mayor de Israel en ser forjado dentro de un tanque. Alto y musculoso, con una cabeza afeitada, él se ha quejado que Israel tiene demasiada fe en la tecnología y no suficientes tropas en el terreno.
En muchos sentidos, Zamir encapsula el debate global más general en torno a cómo son libradas y ganadas las guerras. La nueva tecnología ha sido central para la guerra en Ucrania, cuando Kiev ha usado exitosamente drones de fabricación económica para neutralizar el poderío militar de Rusia. Pero Ucrania también ha perdido finalmente grandes batallas porque Moscú ha desplegado miles de soldados en la guerra convencional, demostrando que las tropas en el terreno son todavía requeridas para tomar y retener territorio.
Algunos analistas militares israelíes han etiquetado a los recientes jefes de estado mayor de Israel como la “dinastía de paracaidistas” y argumentaron que la excesiva confianza de ellos por pertenecer a unidades de élite tanto como su enfoque en la ofensiva contribuyeron probablemente a la falla defensiva el 7 de octubre del 2023.
Gershon Hacohen, un ex general y comandante de la 7ª Brigada, la primera y posiblemente más prestigiosa formación blindada cree que el foco en los jefes paracaidistas ilustra un problema de clase más profundo en la sociedad israelí, la cual en su opinión se ha vuelto demasiado enfocada en los logros de relativamente pocas personas excepcionales, como los celebrados emprendedores tecnológicos.
“¿Qué hay del resto?” preguntó él. “¿Qué pueden hacer en la vida?”
Una de las primeras decisiones de Zamir cuando fue nombrado jefe del ejército el mes pasado fue formar una nueva brigada de tanques. Ha ascendido a funcionarios con experiencia comandando infantería a las posiciones de más alto rango del ejército.
Si bien el año empezó con un nuevo acuerdo de cese del fuego que detuvo el combate por dos meses y prometió conversaciones hacia un alto permanente, Zamir advirtió cuando empezó a principios de marzo que el 2025 sería un año de guerra.
Desde entonces, el ejército israelí ha empezado a desplegar tropas en Gaza para despejar zonas de combatientes de Hamas y retener territorio de forma indefinida. El viernes, el ejército dijo que los soldados se estaban involucrando en combate con Hamas alrededor de Ciudad Gaza, el centro más grande de la franja, después que Israel había lanzado ataques contra agentes de Hamas y ordenó a los civiles despejar las áreas cercanas.
Las tropas israelíes "están profundizando la operación, y esto continuará a un ritmo deliberado y determinado," dijo Zamir en una visita a Gaza esta semana.
Zamir ha pasado casi su vida entera en el ejército. A los 14 años, él dejó su casa en la ciudad portuaria sureña israelí de Eilat para unirse a una escuela internado del ejército en Tel Aviv.
En las mañanas, los estudiantes tomaban un autobús a una escuela normal para las lecciones académicas antes de regresar a la academia para estudiar historia militar y las tácticas de guerra, de acuerdo con Sharon Govrin, un amigo de la infancia de Eilat que asistió a la academia con Zamir.
Los estudiantes aprendieron navegación, dispararon munición viva y se tiraron en paracaídas desde aviones. En las vacaciones, se unieron a las unidades de infantería regulares para simulacros.
Los amigos dijeron que Zamir tomó tan seriamente el entrenamiento como un soldado veterano. Cuando se graduó en 1984, un docente predijo que en el anuario de los estudiantes que él sería "como mínimo, un jefe de estado mayor," de acuerdo con una página de ex alumnos de la academia.
En ese entonces, la mayoría de los cadetes de la academia querían convertirse en paracaidistas y entrar a las unidades de fuerzas especiales, dijo Govrin. Netanyahu se desempeñó como un comando, y su hermano había sido inmortalizado cuando murió liderando el rescate de rehenes en 1976 en Entebbe, Uganda.
Zamir, sin embargo, había crecido admirando a los tenaces comandantes de tanquistas que contra todos los pronósticos repelieron a los ejércitos sirio y egipcio en la guerra árabe-israelí de 1973, dijo Govrin.
“Eyal pensaba que si quieres ser un buen oficial en el gran ejército, tienes que empezar en los regimientos y no en algún tipo de unidad comando," dijo Govrin.
Zamir pasó tiempo como comandante de tanquistas en Líbano, donde Israel utilizó a sus cuerpos blindados para ocupar la parte sureña del país luego de su invasión en 1982.
Durante el levantamiento palestino de principios de la década del 2000, conocido como segunda intifada," Zamir lideró una brigada de 90 tanques durante una operación para sitiar la ciudad cisjordana de Jenín, luchando contra terroristas palestinos.
“No estamos viniendo de visita, arrojar una bomba y regresar," dijo Ronen Itzik, un ex comandante de tanquistas israelí que sirvió bajo el mando de Zamir. "Estamos aquí en el campo todo el tiempo."
Para el año 2012, Zamir había ascendido a través de las filas para convertirse en secretario militar del primer ministro, un rol que actúa como un enlace con el nivel de alto rango del gobierno y un trampolín para el alto liderazgo. Netanyahu era primer ministro, y los dos desarrollaron una relación profesional sólida aunque no un vínculo personal estrecho, dijeron personas cercanas a Zamir.
En el 2015, Zamir se convirtió en responsable para Gaza como jefe del comando sur de Israel. Su primera gran prueba llegó en el 2018, cuando Hamas alentó a los palestinos a protestar en el cerco fronterizo entre Israel y Gaza. Durante nueve meses de manifestaciones, los soldados israelíes dispararon e hirieron a miles de palestinos, algunos de quienes Israel dijo que se apresuraron hacia el cerco. La respuesta israelí atrajo una protesta de la comunidad internacional, y de acuerdo con las Naciones Unidas, dejó 183 palestinos muertos.
Más tarde ese año, Zamir fue considerado para la tarea principal en el ejército, pero perdió ante Aviv Kochavi, un ex paracaidista. El volvió a perder el puesto principal nuevamente en el 2022, cuando el Ministro de Defensa Benny Gantz, un ex paracaidista, recomendó a Herzi Halevi, otro comando de las fuerzas especiales.
Al dejar el ejército, Zamir hizo una advertencia en un discurso de despedida que la institución se había vuelto demasiado dependiente de la tecnología y no tenía suficientes soldados para librar una guerra prolongada y de múltiples frentes.
Muchos analistas militares israelíes argumentan que el plan de Zamir de usar miles de soldados para ocupar Gaza corre el riesgo de atrapar a Israel en una insurgencia prolongada que cause devastación aun mayor, mate a más civiles palestinos y ponga en riesgo las vidas de más soldados israelíes.
Los reservistas del país, que conforman la mayoría de sus fuerzas terrestres, están agotados, y la economía ha sufrido. El público israelí está más enfocado en regresar a los rehenes todavía retenidos en Gaza y teme que ellos resulten asesinados si continúan las operaciones militares.
Zamir tiene el respaldo de Netanyahu para una nueva ofensiva terrestre. Netanyahu ha pedido constantemente la destrucción total de Hamas como un ejército y fuerza civil.
El también tiene el apoyo de Estados Unidos. Aunque impredecible, la Casa Blanca de Trump ha puesto fin a la presión de la administración Biden sobre Israel para moderar sus ataques y ha mantenido las municiones fluyendo. El Presidente Trump ha dicho repetidamente que Israel no será restringida si Hamas no devuelve a los rehenes y dimite.
El pensamiento de Zamir ya parece estar calando hondo. Al inicio de la guerra, Netanyahu visitó a su propia antigua unidad de fuerzas especiales, conocida como Sayeret Matkal, para una foto. Cuando se renovó el combate entre Israel y Hamas, el primer ministro israelí recientemente dio la bienvenida a nuevos reclutas del ejército en una visita al cuerpo de blindados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.