lunes, 6 de junio de 2011

Esperando la solución. Preparándose para el control de la flota


A un año del asalto a la flota humanitaria a Gaza, que finalizara con un grave suceso y la muerte de nueve activistas turcos en un enfrentamiento con las FDI, Israel se encuentra ocupada en los preparativos por frenar la próxima. El Ministro de Seguridad, el jefe del ejército y el comandante de las Fuerzas Navales destinaron decenas de horas de deliberaciones y preparativos para la próxima flota, a fines de junio y presentaron, al primer Ministro, Biniamin Netanyahu, un programa de acción. La declarada posición de Israel, tal como lo describiera Netanyahu, es que prefiere una iniciativa diplomática destinada a frustrar la flota pero, si fuese necesario, activará - también en esta oportunidad- la fuerza contra quien viole las órdenes de las fuerzas navales y se proponga penetrar en las costas de Gaza. En la marina ya se ejercitaron en programas de asalto a la flota y a los entrenamientos. Fueron convocados combatientes para la reserva ante la hipótesis que, un gran número de barcos, participará de la flota (alrededor de 15, aunque no se sabe si todos tomarán parte) y exigirá un dispositivo adicional. Se realiza un seguimiento de inteligencia tras la organización, en especial por la pantalla y los sitios de Internet. En esta oportunidad se pondrá especial acento en el uso de medios de dispersión de manifestaciones. La puesta en práctica de la fuerza es considerada como última alternativa aunque, las FDI, destacan que es posible que, las cosas, lleguen hasta ese punto.Fuentes de seguridad israelíes reconocieron, hace poco, que si bien los preparativos se ocupan de corregir deficiencias, descubiertas en la flota de hace un año, no ven alternativa al asalto, por la fuerza, de los barcos y los manifestantes si no se alcanza un acuerdo. El ex jefe del las FDI, Gaby Ashkenazi, dijo en su testimonio ante la Comisión Turkel que investigó los sucesos, que en caso de necesidad es probable que se abra fuego para detener a los violentos y evitar un enfrentamiento, cara a cara, en donde puede ocurrir un mayor peligro de vida para los soldados.La Comisión Turkel publicó la primera parte de su informe que expresa, en general, una justificación a la posición y conducta israelí en el tema, en febrero de éste año. El informe cuestionó al gobierno israelí por ser el primero en imponer el bloqueo marítimo a Gaza y la fuerza para evitar, sin acuerdo, la entrada de los barcos. En la redacción del informe participaron dos observadores extranjeros. La Comisión aún escuchó testimonios sobre la segunda parte de su mandato, que se ocupa, en particular, en la forma en que Israel investiga los acontecimientos... Parece que transcurrirán varios meses hasta su publicación. Por su parte, el Procurador de la Nación, Micha Lindestrauss, publicará próximamente - en julio quizás- un borrador de un informe propio sobre la flota. El Procurador revisó distintos aspectos, desde la toma de decisiones (en el mando político y militar), los preparativos para la flota y hasta el funcionamiento del sistema de esclarecimiento. Según la experiencia del pasado cabe suponer que, Lindestrauss, no dudará en hacer una fuerte crítica sobre las deficiencias reveladas en su investigación.En cierto aspecto ha ocurrido un cambio extremo e inmediato en la posición de Israel a partir de la flota. En junio pasado, el gobierno modificó su política y amplió, de modo significativo, la magnitud y el tipo de mercancías posibles de ingreso a la Franja de Gaza. La decisión de Egipto, concretada a fin de la semana anterior, de reabrir el Cruce Rafiah para el tránsito palestino, constituye una medida que completa la medida israelí y abre, en la práctica, las puertas del bloqueo impuesto, por ambos países sobre Gaza.En los servicios de seguridad no expresaron su preocupación especial por la apertura del Cruce, con el argumento que, también, así los terroristas y las armas encontraban su vía hacia el interior de la Franja y, desde ella, por medio de los túneles de Rafiah. Hay quien, incluso, plantea el lado positivo de la medida argumentando que así queda reforzada la relación entre Egipto y Gaza.Un tema estratégico más, y de importante significación, es la situación de la relación con Turquía. No hay buenas noticias para Israel. A pesar que, ambas partes, bajaron en los últimos meses la llama de su enemistad y redujeron los intercambios mutuos de acusaciones, no se encontró un acuerdo que deje la crisis de la flota atrás. En Israel están preocupados por el conocido acercamiento que tuvo lugar entre Turquía e Irán en los últimos años, expresado públicamente tras el suceso con la flota anterior.

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