jueves, 19 de diciembre de 2013

LO QUE DEBE HACER UN ACUERDO FINAL CON IRAN

LO QUE DEBE HACER UN ACUERDO FINAL CON IRAN Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba por Henry A. Kissinger y George P. Shultz 2/12/13 Como ex secretarios de estado, hemos enfrentado la cuestion existencial de las armas nucleares y negociado con adversarios en intentos por reducir los peligros nucleares. Nosotros simpatizamos con la actual busqueda del gobierno de resolver el punto muerto nuclear irani a traves de la diplomacia. Escribimos este articulo para esbozar las opciones como las vemos surgiendo del acuerdo provisional para una politica basada en el principio de "confia y verifica." Durante dos decadas, los presidentes americanos de ambos partidos han afirmado que Estados Unidos esta inalterablemente opuesto a una capacidad nuclear militar irani. Ellos generalmente han agregado una advertencia al efecto que "todas las opciones estan sobre la mesa" en seguimiento de esta politica. Un claro consenso trans-Atlantico, una decada de informes de la Agencia Internacional de Energia Atomica (AIEA) y seis resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas han reforzado esta posicion. El acuerdo nuclear provisional con Iran ha sido descripto como el primer paso hacia la eliminacion de la capacidad de Iran de construir un arma nuclear. Esa esperanza reside, si es que lo hace, en la perspectiva de la proxima ronda de negociaciones ideadas para producir un resultado final dentro de seis meses. En pie por si mismo, el acuerdo interino deja a Iran, esperemos que solo temporariamente, en la posicion de una potencia en el umbral nuclear—un pais que puede lograr una capacidad nuclear militar al cabo de meses de su eleccion para hacerlo. Un acuerdo final dejando esta capacidad de umbral intacta institucionalizaria la amenaza nuclear irani, con profundas consecuencias para la politica de no proliferacion global y la estabilidad del Medio Oriente. Por 35 años y continuando hoy, Iran ha estado defendiendo un concepto de orden mundial anti-occidental, librando guerras indirectas contra America y sus aliados en Libano, Siria, Irak y mas alla, y armando y entrenando a extremistas sectarios a traves del mundo musulman. Durante ese tiempo, Iran ha desafiado demandas inequivocas de la ONU y la AIEA y prosiguio con una importante campaña nuclear, incompatible con cualquier proposito exclusivamente civil, y en violacion de sus obligaciones conforme el Tratado de No Proliferacion en vigencia desde 1970. Si el grupo gobernante en Iran esta preparado genuinamente para entrar en relaciones cooperativas con Estados Unidos y el resto del mundo, Estados Unidos debe dar la bienvenida y alentar ese cambio. Pero el progreso debe ser juzgado a traves de un cambio de programa, no de tono. El corazon del problema es la construccion por parte de Iran de una infraestructura nuclear masiva y reserva de uranio enriquecido fuera de proporcion con cualquier posible logica de produccion de energia civil. Iran acumulo la mayoria de esta capacidad—incluyendo 19000 centrifugadoras, mas de siete toneladas de uranio enriquecido entre el 3,5% al 5%, una reserva mas pequeña (unos 196 kilogramos) de uranio enriquecido al 20%, y un reactor de aguas pesadas construido parcialmente que sera capaz de producir plutonio—en violacion directa de las resoluciones de la AIEA y el Consejo de Seguridad. Los esfuerzos para resolver este tema a traves de la negociacion tienen una larga tradicion. Ellos comenzaron en el 2003, despues de la revelacion que Iran habia estado construyendo en secreto una planta de enriquecimiento de uranio en Natanz y un reactor de aguas pesadas en Arak. Ellos han continuado en forma intermitente en diferentes permutaciones, siendo las negociaciones en Ginebra la mas reciente y completa expresion. El historial de esta campaña de negociacion de mas de una decada combina las capacidades nucleares iranies avanzando en forma constante con las demandas internacionales retrocediendo gradualmente. Una negociacion iniciada por los EU-3 (Inglaterra, Francia y Alemania, con el respaldo de Estados Unidos) comenzo desde la posicion que, en vista del historial de no divulgacion de cuestiones nucleares de Iran y su incumplimiento de las resoluciones de la ONU, cualquier enriquecimiento o capacidad de produccion de plutonio irani era inaceptable. Luego de la revelacion de las plantas de Natanz y Arak, la junta de directores de la AIEA adopto una resolucion en el año 2003 expresando "grave preocupacion" y pidiendo a Iran "suspender toda actividad de enriquecimiento de uranio adicional" y "cualquier actividad de reprocesamiento." La resolucion llamo "esencial y urgente" que Iran proporcionara acceso irrestricto a los inspectores de la AIEA, y solicitaba que Iran "prontamente firme, ratifique e implemente totalmente" un protocolo adicional a sus salvaguardas del Tratado de No Proliferacion. Casi todos los años desde entonces, las potencias occidentales—primero a traves de los EU-3 y luego a traves del P5+1 (los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, incluidos China y Rusia, mas Alemania)—ofrecieron a Iran incentivos diplomaticos y tecnicos para tener en cuenta la aspiracion anunciada de Iran de convertirse en un pais avanzado tecnologicamente. Estos paises propusieron programas de ayuda tecnica y combustible nuclear para un programa nuclear irani verificablemente civil. Iran rechazo las propuestas y acelero sus campañas nucleares. Se involucro periodicamente en conversaciones pero no desmantelo nunca algun aspecto de su infraestructura de enriquecimiento o creciente reserva de material fisionable. Seis resoluciones del Consejo de Seguridad aprobadas en los años 2006, 2007, 2008 y 2010 condenaron el desafio de Iran e impusieron sanciones, exigiendo un alto incondicional al enriquecimiento nuclear. El acuerdo provisional alcanzado el 24 de noviembre, aunque descripto por todas las partes como temporario, por lo tanto representa una prueba crucial de si el progreso aparentemente inexorable a una capacidad nuclear militar irani puede ser revertido. A cambio de un estimado de $8 millones de dolares en aflojamiento de las sanciones, Iran congelara durante seis meses su programa nuclear y reserva existentes, pero a traves de un mecanismo inusualmente tortuoso que refleja su determinacion a continuar enriqueciendo. A Iran se le ha permitido durante el acuerdo interino continuar sumando a su reserva existente de siete toneladas de uranio enriquecido entre el 3,5% al 5% con la condicion que su reserva debe ser reducida nuevamente a su nivel original para el fin de los seis meses. (Esto significa que Iran retiene el material adicional enriquecido durante la mayoria del acuerdo, agregando a su influencia en las negociaciones de seguimiento). Iran ha aceptado "neutralizar" su pequeña reserva de uranio enriquecido al 20% convirtiendolo en un oxido para fines del acuerdo, aunque Iran retiene la capacidad tecnica de enriquecer una reserva equivalente en una fecha posterior. El progreso en un reactor de aguas pesadas y planta de reprocesamiento de uranio en Arak ha sido suspendido, aunque parece que continuara el trabajo auxiliar en el sitio. Estan estipuladas inspecciones diarias para verificar el cumplimiento de Iran mientras este en vigencia el acuerdo provisional. Un modesto beneficio del acuerdo de Ginebra es que logra, aunque en forma temporal, una pequeña lentificacion del tiempo de "fuga" que Iran necesitaria para construir un arma nuclear en muchas semanas, como fue descripto por voceros de la administracion. La diplomacia americana en la proxima fase tendra que lidiar con el desafio que esta victoria ha llegado al precio de un cambio sutil pero fundamental en la base conceptual del punto muerto nuclear. Hasta ahora, las resoluciones de la ONU y directivas de la AIEA han exigido un alto inmediato a todas las actividades relativas al enriquecimiento de uranio y la produccion de plutonio, y cumplimiento incondicional con un regimen de inspecciones de la AIEA como un tema de derecho. Conforme el acuerdo provisional, la conducta irani que fue condenada anteriormente como ilegal e ilegitima ha sido reconocida efectivamente como una linea de base, incluyendo una aceptacion del enriquecimiento de uranio (al 5%) continuado por parte de Iran durante el periodo del acuerdo. Y ese programa de linea de base es de importancia estrategica. Porque la reserva de uranio enriquecido bajo de Iran es emparejada con una infraestructura suficiente para enriquecerlo en unos pocos meses al grado de armas, tanto como una ruta posible para producir plutonio en grado de armas en la instalacion que esta siendo construida ahora en Arak. No es sorprendente que el negociador irani, a su retorno a Teheran, describiera el acuerdo como dando a Iran su derecho largamente reclamado a enriquecer y, en efecto, eliminando la amenaza americana de usar la fuerza como un ultimo recurso. En estas circunstancias, la principal influencia negociadora americana—la amenazada reimposicion y fortalecimiento de las sanciones—corre el riesgo de perder su ventaja. Para los individuos, empresas y paises (incluidos algunos paises aliados), la perdida de negocios con Iran ha sido economicamente significativa. La mayoria sera menos vigilante acerca de aplicar o atenerse a las sanciones que son el tema de las negociaciones y que parecen estar "en el camino de salida." Este riesgo sera realzado si se asienta la impresion que Estados Unidos ya ha decidido reorientar su politica meso-oriental hacia una reaproximacion con Iran. La tentacion sera moverse primero, para evitar ser la ultima parte en restablecer o crear vinculos comerciales, de inversion y politicos. Por lo tanto, tambien, la proposicion que una serie de acuerdos interinos equilibrando las restricciones nucleares contra tramos de alivio de sanciones es casi ciertamente impractica. Otro tramo significaria el fin del regimen de sanciones. Tendra que ser parte de un acuerdo final. El peligro de la dinamica actual es que amenaza al resultado de Iran como un estado en el umbral de las armas nucleares. Si el periodo de "congelamiento" de seis meses asegurado en Ginebra va a ser otra cosa distinta a una pausa tactica en la marcha de Iran hacia una capacidad nuclear militar, debe ser recortada significativamente la capacidad tecnica de Iran de construir un arma nuclear en la proxima negociacion estipulada a traves de una reduccion estrategicamente importante en la cantidad de centrifugadoras, restricciones sobre su instalacion de centrifugadoras avanzadas, y un cierre de su ruta hacia una capacidad de produccion de plutonio. La actividad debe ser limitada a un programa civil posible sometido a monitoreo comprensivo como es requerido por el Tratado de No Proliferacion. Cualquier acuerdo final debe asegurar la capacidad del mundo de detectar un movimiento hacia una fuga nuclear, prolongar el tiempo del mundo para reaccionar, y poner de relieve su determinacion a hacerlo. La preservacion del regimen global de no proliferacion nuclear y evitar una carrera de armas meso-oriental penden de la balanza. La diplomacia americana tiene ahora tres importantes tareas: definir un nivel de capacidad nuclear irani limitado a posibles usos civiles y conseguir salvaguardas para asegurar que este nivel no sea excedido; dejar abierta la posibilidad de una relacion genuinamente constructiva con Iran; y diseñar una politica meso-oriental ajustada a nuevas circunstancias. Algunos ajustes son inherentes en el proceso inevitable de la evolucion historica. Pero debemos evitar un resultado en el cual Iran, liberado de un oneroso regimen de sanciones, surja como una potencia nuclear de facto liderando un bando islamista, mientras los aliados tradicionales pierden la confianza en la credibilidad de los compromisos americanos y siguen el modelo irani hacia una capacidad de armas nucleares, aunque sea solo para equilibrarlo. Los proximos seis meses de diplomacia seran decisivos en determinar si el acuerdo de Ginebra abre la puerta a un potencial avance diplomatico o a ratificar un importante reves estrategico. Debemos estar abiertos a la posibilidad de seguir una agenda de cooperacion a largo plazo. Pero no sin que Iran desmantele o congele una parte estrategicamente importante de su infraestructura nuclear. El Sr. Kissinger es un ex secretario de estado americano (1973-77); el Sr. Shultz es un ex secretario de estado americano (1982-89).