AMIGOS DE ISRAEL - CORDOBA (ARGENTINA)

 El nazismo real: texto por alejo Schapire

Si hay algo que caracterizó el nazismo, el real, histórico, y no la metáfora caprichosa que se arroja al adversario para callarlo, es su proyecto de exterminación del pueblo judío. La “Solución Final” fue la determinación de borrar de la Tierra sistemáticamente al judío, más allá de donde viviese, más allá de sus convicciones políticas (podía ser comunista, liberal, un bebé), más allá de si era practicante o ateo. Hasta tal punto fue así que ingenuamente muchos judíos creyeron hasta el final que el nazismo no los mataría porque creyeron que servía más como esclavos que muertos, lo que fue un error. Los nazis mataron también gitanos, homosexuales, discapacitados mentales por considerarlos una degeneración. Al judío se lo persiguió por ser una “raza” no sólo “inferior”, sino peligrosa, incluyendo sus obras artísticas y producciones intelectuales que había que purgar con fuego, y hasta último momento fue el corazón del proyecto nazi.

Hoy, como con tantas otras palabras, el progresismo ha secuestrado el término nazi. Lo vacía de su realidad histórica. Así, lo separa de su objetivo y va más allá. Vacía su sentido: el judío real desaparece como blanco del nazismo y es reemplazado por la abstracción de “la diversidad”, idealmente el palestino. Esta manipulación conceptual coloca al judío como nuevo nazi, perpetrando un “genocidio”, concepto jurídico salido del exterminio nazi, y que ninguna jurisdicción internacional ha determinado concluyentemente como tal en Gaza. De todos modos, ya dos días después del 7 de octubre, hablaban de “genocidio en Gaza”. En esta manipulación progresista, todo es nazi… menos matar judíos. Lo llaman “antisionismo”, lo que entienden como la legítima exterminación de “los nuevos nazis”.

En cuanto a la relación real del nazismo con los palestinos en particular y el mundo musulmán en general, no es necesario imaginarla, existió y está ampliamente documentada. Hitler y el Gran Muftí de Jerusalén, Mohammed Amin al-Husseini (en la foto), mayor autoridad islámica en el lugar, sellaron una alianza, que entre otras cosas dio lugar a la formación de unidades musulmanas dentro de las SS. Esa es la realidad histórica comprobable, no el obsceno revisionismo que vemos en estos días.