lunes, 11 de julio de 2011

LA TERCERA VIA PARA LA PAZ DE MEDIO ORIENTE

Permitan a los palestinos declarar el estado si ellos se comprometen con la paz y crean instituciones democraticas.

5/7/11

Por JONATHAN SCHANZER

El gobierno palestino no tiene intenciones de declarar la condición de estado hasta septiembre, pero las ramificaciones del movimiento ya son claras. El rey Abdullah de Jordania predice una "tercer intifada," Israel se prepara para nuevos brotes de violencia y Francia ha convocado a una conferencia para tratar de llegar a un compromiso. Afortunadamente, todavía puede haber una manera de salir de este lío que conserve la calma, pero también reconozca las aspiraciones palestinas.
En la actualidad, una resolución de la Asamblea General de Naciones Unidas no llega a ser una votación del Consejo de Seguridad concediendo la membresía palestina. Sin embargo, teóricamente, ofrece a los palestinos la base jurídica para demandar a Israel pors tierras y derechos en el sistema judicial internacional.
Israel, los EEUU, Canadá, México y otros países están tratando de obstaculizar este intento. Ellos temen con razón que una declaración respaldaría la peligrosa decisión palestina de cesar las negociaciones con Israel. A ellos también les preocupa que la condición de estado podría generar una política irredentista palestina, provocar violencia innecesaria por los territorios en disputa y debilitar a Israel en formas que podrían tentar a otros estados vecinos a un conflicto regional.
Estos estados se oponen a alrededor de 130 miembros de la ONU que apoyan la iniciativa palestina. Este bando incluye a un grupo de estados latinoamericanos, algunos países europeos (entre ellos Gran Bretaña y Francia) y, presuntamente, todos los países musulmanes. La mayoría de estas capitales abrazan un estado palestino incondicionalmente.
En vista del gran número de partidarios, los opositores a una declaración universal probablemente carecen de los votos para derrotar la iniciativa. Pero ellos pueden modificar la resolución de la ONU para asegurar que preserve incentivos para mantener la paz. En concreto, debe reconocer las tres principales preocupaciones de Israel: fronteras defendibles, un fin a las demandas de los refugiados palestinos y el reconocimiento de Israel como un estado judío. La resolución enmendada también debe exigir a los palestinos tomar medidas adicionales para la construcción del estado. Y ya existe un marco.
El Banco Mundial en abril publicó un informe que apoya un estado palestino, pero sólo si "la Autoridad Palestina mantiene su rendimiento en la creación de instituciones y la prestación de servicios públicos." El informe también señalaba que "la ayuda es lo que mantiene a muchos palestinos por encima de la línea de pobreza, particularmente en Gaza, donde el desempleo sigue siendo del 37,4% y un asombroso 71% de la población se benefició de algún tipo de asistencia social en 2009."
Una resolución enmendada de la ONU debe incluir un lenguaje similar, declarando que la comunidad internacional consideraría respaldar un estado en el exitoso final del proceso político que los palestinos lanzaron en mayo. Las condiciones serían una falta total de la violencia contra Israel, el continuo flujo de ayuda internacional en los niveles actuales, avances adicionales en la construcción del estado, una elección exitosa y la transferencia del poder y el fin de la violencia intestina.
No será fácil. El 3 de mayo, la facción gobernante Fatah de la Autoridad Palestina firmó un acuerdo de unidad improbable con su archirrival, Hamas, el cual es una organización terrorista. El acuerdo sigue siendo incompleto, pero ha causado que algunos gobiernos occidentales reconsideren la ayuda a los palestinos. El Congreso de EEUU ahora busca abrumadoramente poner fin a cerca de us$600 millones en pagos este año.
Para satisfacer a los donantes internacionales, los palestinos han indicado que su próximo gobierno excluirá tanto a miembros de Hamas como de Fatah. Si Hamas no se une oficialmente a la coalición de unidad que recién ayudó a formar, el nuevo gobierno palestino podría concebiblemente satisfacer a los donantes ya existentes.
Pero los palestinos no están fuera del bosque todavía. La inclusión de Hamas en el acuerdo de unidad es casi seguro que asegure que el actual Primer Ministro de la Autoridad Palestina, Salam Fayyad, tal vez la figura palestina más respetada en Occidente, no permanecerá en el cargo. Hamas ha indicado que se niega a permitirle quedarse en este puesto, a pesar de las súplicas del presidente palestino, Mahmuod Abbas. Esta es una mala noticia para la creación de estado palestina, ya que el Sr. Fayyad ha sido el único responsable de atraer fondos de donantes y crear instituciones para el proyecto nacional palestino.
Y las complicaciones no terminan ahí. Después de cuatro años de guerra civil, pueden Hamas y Fatah abstenerse de pelear en las próximas elecciones legislativas, las cuales de acuerdo con su nuevo contrato de matrimonio deben tener lugar para la primavera del 2012? Las dos facciones están todavía peleando por los términos de su unificación.
Enmendar la resolución de la ONU no rechazaría la premisa de un estado palestino, pero colocaría condiciones realistas sobre su reconocimiento. Daría una alternativa muy necesaria a los países que no desean arriesgarse a otra guerra entre Israel y los palestinos.
También podría ser una tercera vía avanzada de la comunidad internacional, la cual se ha polarizado innecesariamente.

El Sr. Schanzer es vicepresidente de investigación para la Fundación para la Defensa de las Democracias.
Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Luisa Kasvin especialmente para el blog de OSA Filial Córdoba

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