AMIGOS DE ISRAEL - CORDOBA (ARGENTINA)

 Y comparto otro escrito de la excelente narradora, poeta y creativa judía, Reina Benarroch.

La Luz de Jánuca.

En una ciudad llena de colores y aromas deliciosos, vivía una pequeña niña llamada Sara. Sara era parte de una familia que celebraba con alegría la festividad de Jánuca, un momento especial para recordar los milagros y la luz que trae la esperanza.

Cada año, cuando llegaba Jánuca, Sara esperaba con emoción la llegada de su abuela, quien venía a compartir historias y tradiciones. Una noche, mientras se sentaban juntas, la abuela le dijo:

—Hoy es un día especial, Sara. Vamos a encender la janukilla.( candelabro de 9 brazos). Cada vela representa un milagro, y cada luz nos recuerda la fuerza de nuestro pueblo.

Sara sonrió mientras su abuela encendía la primera vela, explicándole que el aceite milagroso había durado ocho días, lo que permitió a los Macabeos rededicar el Templo.

—Pero también celebramos con comida deliciosa —agregó la abuela—. ¿Recuerdas los buñuelos morunos y las sufganiyot que preparamos?

Sara asintió, recordando cómo su casa se llenaba de risas y aromas en Jánuca.

—Abuela, ¿cómo podemos mantener viva nuestra tradición? —preguntó Sara.

La abuela sonrió y respondió:

—Cada vez que encendemos una vela, contamos historias, y compartimos nuestras comidas, mantenemos nuestra herencia viva.

Esa noche, después de encender las velas, disfrutaron de una cena festiva llena de sabores: burekas, buñuelos y sufganiyot.

—Prometo que siempre compartiré nuestras tradiciones —dijo Sara, llena de determinación.

Al final de la noche, mientras la luz de las velas parpadeaba, Sara sintió el calor de su familia y la riqueza de su cultura.

Y así, cada año, Sara aprendió a llevar adelante las tradiciones de Jánuca, convirtiéndose en una luz en su comunidad, iluminando el camino de la historia y la unidad.

Mensaje final: Jánuca es un momento para recordar los milagros, compartir la luz de nuestras tradiciones y disfrutar de la compañía de nuestros seres queridos.

Escrito e ilustración creada por Reina Benarroch Garzon