Un médico de origen saudí, radicado en Alemania, perpetró un ataque mortal contra un mercadillo navideño, dejando cinco muertos y 200 heridos. Este acto, supuestamente motivado por su rechazo a la política de asilo alemana, pone de manifiesto cómo los extremistas racionalizan sus actos violentos como una respuesta legítima a sus frustraciones.
Las autoridades sauditas habían advertido reiteradamente a sus contrapartes alemanas sobre el peligro que representaba el atacante, pero dichas advertencias fueron desestimadas. Esto plantea interrogantes sobre los protocolos de cooperación internacional y la necesidad de que los gobiernos democráticos adopten una postura de cero tolerancia frente al extremismo.
Documentación en redes sociales según el artículo 27 A de la Ley de Derechos Creativos
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