**Carta Sin Destino**
Temprano, a la mañana, al despertarme,
decidí mandarte unas líneas para que sepas de mi. De como vivo, de mi estado de ánimo,
contarte que tengo amigos, que vamos al cine, al teatro o a un café, que
conversamos sobre distintos temas y entre todos buscamos una solución. También te cuento, que leo mucho y pienso
poco...Así, soy feliz. Fíjate que pienso tan poco, que cuando
termine esta carta, no sabré donde enviarla. No tengo tu dirección, tampoco quiero
tenerla... Si, soy feliz. Esta misiva que ya he escrito, es para que
yo pueda leerla. No me hacen falta noticias tuyas, no las quiero, no quiero saber de ti,
de tu vida, de tus cosas. Quiero leer para mi, sin compartir con nadie, lo que escribo, y
medir mi fortaleza de olvido en bien de mi salud y tranquilidad. Créeme, soy feliz. Me siento libre y algunas veces hasta
contento. ! Ya la duda, la sospecha y el engaño, ya no es parte de mi vida...! ¿ Será por eso
que soy feliz ? Vivo sin cadenas, y sin temores y en la
calle, con la frente alta, no necesito hablar de mis pesares, ya no tengo pesares. ! Sólo tengo
realidades...! Que me hacen tan feliz Eso es todo, mi querida, eso es todo lo que
quería decirte. ¿ Puedes tu creer, que lo escrito lo he leído varias veces, y por
primera vez, siento mi corazón libre y falta de dolor ? ! Y es así, mujer, como me despido de ti ! Te dejo debo reunirme con mis amigos Y eso me hace muy feliz. Mario
Beer-Sheva
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