SOÑAR EN GRANDE!
Uno de los secuestrados fue rescatado ayer en Gaza, sano y salvo, a mitad del día, de forma inesperada.
Ayer recibimos cierto fortalecimiento en esperanza y fe.
Un refuerzo para todos aquellos que tienen fe y rezan por lo mejor.
¿Viste el video de los hermanos de Kaid Farjan Alkadi corriendo hacia él rápidamente por los pasillos del Hospital Soroka, para encontrarse con él?
¿Acaso podrían haberse ellos imaginado algo así ayer en la mañana?
Y de repente los llamaron, en medio del día y les dijeron:
‘Vengan, ahora! Está ocurriendo!’
Y así como lo malo sucede de manera inesperada, lo bueno también se hace realidad, aunque no necesariamente como lo pensábamos.
En un escenario del cual quizás nunca conozcamos los detalles.
Con héroes anónimos en el sistema de seguridad a los que nunca podremos agradecer personalmente. Bienvenido, Kaid!!
Hemos recibido un recordatorio acerca de rezar no solo por el regreso a casa de cada uno de los queridos secuestrados, sino también por el cumplimiento de grandes sueños, que podrían parecer imaginarios.
Los Shabats, entre Tishá Be'Av y Rosh Hashaná, se llaman “Shabat de consolación”.
En cada uno de estos Shabatot se leen en todas las sinagogas del mundo, profecías que durante miles de años parecían muy alejadas de la realidad.
He aquí, por ejemplo, las antiguas y famosas palabras de consuelo que leímos el último Shabat:
“Porque consuela el Eterno a Tzion, consuela a todas sus ruinas.
Convertirá su desierto en Eden y su estepa como el jardín del Eterno.
Regocijo y alegría se hallarán en ella, agradecimiento y voz de canto.”*
Todas las ruinas serán reedificadas, y todos los lugares desolados se llenarán de alegría y felicidad.
Que sea pronto, en nuestros días.
Que tengamos buenas noticias.
Sivan Rahav Meir
La Porción Diaria.
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