AMIGOS DE ISRAEL - CORDOBA (ARGENTINA)

 

LA VERDADERA RAZÓN POR LA CUAL IRÁN ODIA A ISRAEL

El régimen antisemita en Teherán cree que los judíos guían y controlan la política estadounidense en el Medio Oriente.

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Por 

Reuel Marc Gerecht

 y 

Ray Takeyh

Nov. 27, 2023 

TRADUCIDO POR Marcela Lubczanski

La Guerra de Gaza ha llevado a otro debate acerca de lo que motiva a la élite gobernante de Irán. Washington ha ofrecido principalmente un tema realista: Los mulas querían interrumpir la diplomacia destinada a la normalización israelí-saudita, así que ayudaron a Hamas a desatar una guerra para despertar a la calle árabe. Confrontados con el enojo popular, los potentados árabes, pensaban ellos, se retirarían.

Pero esto ignora una motivación fundamental de la teocracia de Irán: el antisemitismo. Al menos tres generaciones de clérigos iranies radicales han visto a Israel como ilegítima, usurpando tierras islámicas sagradas en el nombre de una ideología perniciosa promovida por el pueblo mas diabólico y obstinado de la historia. Usando el lenguaje del marxismo francés, ellos llaman a Israel un "estado colonizador colonial" occidental, y creen que los judíos guían al imperialismo estadounidense en el Medio Oriente. En esta lucha entre el bien y el mal, los musulmanes tienen una obligación religiosa de resistir a Israel y a la judería mundial.

El fundador de la revolución, ayatollah Ruhollah Khomeini, estableció la norma para la República Islámica de Irán. En su libro “Gobierno Islámico,” el escribió, “Desde el mismo inicio, el movimiento histórico del Islam tuvo que contender con los judíos, porque fueron ellos quienes establecieron por primera vez la propaganda anti islámica y se involucraron en variadas estratagemas, y como ustedes pueden ver, esta actividad continúa hasta el presente.” El describió a los judíos como distorsionadores del Corán, acaparadores financieros, y agentes del Occidente.

Los temas antisemitas de Khomeini fueron recogidos por sus dos discípulos más importantes, el ex presidente Akbar Hashemi Rafsanjani, el clérigo “pragmático” por excelencia, y el actual líder supremo, Ali Khamenei. Rafsanjani publicó un libro, “Israel y la Amada Jerusalén,” afirmando que la resistencia al estado judío era el deber sagrado de “todo musulmán y cualquiera que cree en Dios.” El Judaísmo para Rafsanjani estaba irrecuperablemente “inmerso en el colonialismo” y el “Sionismo es el socio esencial de la arrogancia mundial [Estados Unidos de América].” Los Sres. Rafsanjani y Khamenei dieron luz verde al bombardeo de un centro comunitario judío en Buenos Aires en 1994, el cual dejó 85 muertos y 300 heridos. 

La negación del Holocausto es una consecuencia natural de esta mentalidad. El Sr. Khamenei ha sido el inventor más imaginativo de tales cuentos odiosos en el régimen. “Hay documentos mostrando colaboración estrecha de los sionistas con la Alemania nazi, y números exagerados relativos al Holocausto judío fueron inventados para solicitar la simpatía de la opinión pública mundial, para preparar el terreno para la ocupación de Palestina, y justificar las atrocidades de los sionistas,” dijo el Sr. Khamenei en un discurso en el año 2001, informó la televisión estatal de Irán. El incluso ha convertido la negación del Holocausto en una cuestión de libre expresión, diciendo en un discurso en el 2002: “Todos los políticos, todos los periodistas, todos los intelectuales, todos los funcionarios, todos los expertos en el Occidente deberían inclinar sus cabezas para conmemorar las cámaras de gas. O sea, ellos deberían todos apoyar un cuento cuya autenticidad no está clara."

Durante cuatro décadas, la República Islámica ha creado una maquinaria de propaganda de odio. Las agencias del estado iraní han publicado rutinariamente un folleto infame—“Los Protocolos de los Sabios de Sion”—y otros tratados antisemitas. La Transmisora de la República Islámica de Irán pone al aire documentales y series de televisión antisemitas. Los líderes del régimen, incluido el Sr. Khamenei, se han reunido como cosa de rutina con negadores occidentales del Holocausto en conferencias estatales en Teherán. El Concurso Internacional de Caricaturas del Holocausto, el cual comenzó el Sr. Khamenei en el 2006, otorga un premio al arte antisemita.

La posición de Irán en el proceso de paz del Medio Oriente siempre a sido más extremista que la de la mayoría de los estados árabes anti sionistas. Irán ha alimentado y armado a grupos rechazadores, tales como Hamas, la Yihad Islámica Palestina, y Hezbollah. El régimen clerical ha enviado repetidamente a Hezbollah al exterior para atacar a judíos no israelíes.

El Sr. Khamenei, quien a menudo habla de Israel como un tumor canceroso en el cuerpo político del islam que debe ser extirpado, ha insistido, refiriéndose al ataque del 7 de octubre, que “el régimen sionista ha sufrido una derrota irreparable tanto en términos de ejercito como de servicios de inteligencia. Todos admitieron la derrota pero yo hago hincapié en lo irreparable." El negociador nuclear principal de Irán, Ali Bagheri Kani, agregó, “Si la guerra se expande no podemos decir que Israel perdería, porque nada quedará de Israel para ser descripta como perdedora o ganadora."

El ataque contínuo de Irán contra el estado judío se propone desmoralizar a su pueblo, golpear la reputación de sus fuerzas armadas, dividir su política, y, lo más importante, provocar un éxodo de sus mejores y más brillantes.

Los estadistas y periodistas occidentales a menudo han visto el antisemitismo de la teocracia iraní como anti sionismo, algo encendido y apagado para los públicos árabes por los mas sofisticados persas. Muchos han tratado constantemente de aislar el antisemitismo del régimen a un grupo de "intransigentes" iranies—aun cuando estos mismos hombres siempre han detentado poder. Obviamente, es más fácil para Barack Obama y Joe Biden visualizar su diplomacia nuclear con Teherán como estabilizadora y posiblemente transformadora cuando los gobernantes de Irán no son vistos como antisemitas intransigentes y letales. ¿Imaginan, sin embargo, si el antisemitismo de la República Islámica fuera transmutado en un credo asesino atacando a estadounidenses no judíos? ¿Estos presidentes habrían estado tan interesados en dar miles de millones en alivio de las sanciones y a buscar un nuevo modus vivendi con Estados Unidos?

La política occidental hacia la teocracia de Irán debería ver al régimen como lo hace el Sr. Khamenei. El antisemitismo no es adventicio, una pasión que puede ser compartimentada como requiere el pragmatismo. El expansionismo iraní—su apoyo a las milicias radicales a lo largo del Medio Oriente—es imposible de entender apropiadamente sin ver el mundo como lo ven los líderes iraníes. Ellos creen que están combatiendo a una conspiración judía que controla el Occidente y tiene intención de humillar a los musulmanes en todas partes. La guerra de Hamas contra Israel es parte de esa lucha.

El Sr. Gerecht, un ex oficial de objetivos iraníes en la CIA, es un académico residente en la Fundación para la Defensa de las Democracias. El Sr. Takeyh es un miembro principal en el Consejo en Relaciones Exteriores.