Un bello cuento con contenido.
El Rab que viajó de Europa a Israel por un botón.
Un Rab vivía en Europa y tenía muchos alumnos. Uno de ellos se fue a trabajar a los Estados Unidos.
Dicho alumno dedicó su vida a fabricar botones y olvidó por completo el estudio de la Torá y el cumplimiento de las Mitzvot (preceptos).
—Vengo desde Europa donde ti para que me vendas un botón para mi saco.
El alumno, sorprendido, no entendía lo que su Rab deseaba.
Resultaba ilógico que hubiera viajado desde Europa por un simple botón.
El Rab insistía en que realmente habia viajado desde allá para que él le vendiera un botón.
El alumno, aunque perplejo, le entregó el botón y el Rab salió agradecido, diciendo que al otro día regresaría a Europa, ya que había conseguido el botón, lo cual habia sido su finalidad para viajar a los Estados Unidos.
El alumno, asombrado, no entendía nada, y entonces persiguió a su Rab para que le diera una explicación.
El Rab le dijo:
—Así como es ilógico que una persona viaje desde Europa hasta América por un simple botón, es ilógico que el alma de la persona,que es tan elevada y que viene desde el Trono Celestial, venga a este mundo solo para fabricar botones.
¡El alumno entendió el mensaje…!
Linda Michan
Obra: Ezequiel El Profeta
Un Cuento Para Cada Día
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