Binyamin HaTzadik administraba el fondo caritativo de la comunidad.
Una vez, una mujer le pidió ayuda durante una sequía.
El Rabino le dijo que todo el dinero del fondo ya había sido distribuido.
Ella le respondió:
"Rabino, si no me ayuda, mis siete hijos y yo moriremos".
Posteriormente, el Rabí Binyamin se enfermó gravemente.
Los ángeles se acercaron a HaShem, diciendo:
"Dice en la Torá: 'Si una persona salva una vida, es como si salvara al mundo entero'.
Mucho más, cuando un hombre ha salvado ocho almas".
HaShem inmediatamente rescindió el decreto, y concedió a Binyamin HaTzadik otros veintidós años de vida.
El objetivo final de la Torá es el arrepentimiento y las buenas obras.
La compasión y bondad de Binyamin HaTzadik llenó la esencia de la Torá.
Por lo tanto, HaShem le concedió veintidós años adicionales, correspondientes a las veintidós letras del alfabeto hebreo, del cual se compone la Torá.
Ezra Landau
F: Noticias de Guisheft vía dailymussar
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