del WSJ

 HAMAS CONVIERTE LA ENTREGA DE REHENES MUERTOS EN UN ESPECTACULO

Cuatro ataúdes, incluidos los que Hamas dice que contenían a una madre y sus dos hijos, fueron exhibidos en un escenario con burlas y consignas.

Por Anat Peled y Feliz Solomon

Febrero 20, 2025

traducida por 

Marcela Lubczanski

Militantes transportan un ataúd que lleva una foto de la rehén israelí Shiri Bibas durante la entrega en Khan Younis, Gaza.© Abdel Kareem Hana/Associated Press

TEL AVIV—Hamas exhibió ataúdes que dijo contenían los cuerpos de cuatro rehenes israelíes ante una multitud de terroristas antes de entregarlos a Israel el jueves, en un espectáculo que incluyó burlas y consignas contra Israel.

Cada ataúd tenía una foto de un rehén arriba, incluidos dos pequeños niños pelirrojos, tanto como una foto del primer ministro israelí encima sobre la cual estaba escrito "El Asesino."

Los ataúdes fueron colocados sobre un escenario ante espectadores que vivaban y cámaras que transmitían las escenas en canales de televisión árabes. El Comité Internacional de la Cruz Roja, que recibió los restos y los trasladó hasta la custodia israelí, intentó inicialmente protegerlos de la vista con grandes pantallas blancas.

Las transmisoras israelíes no pusieron al aire las imágenes.

En medio de las multitudes había algunos palestinos liberados recientemente por Israel en el acuerdo de cese del fuego que se suponía estarían exiliados de Gaza, de acuerdo con los términos del acuerdo. Los marcados en las multitudes incluyeron a Mohammed Abu Warda, quien fue sentenciado por planificar un bombardeo a un autobús en 1996 que mató a más de 40 israelíes.

Por primera vez desde el inicio de un cese del fuego frágil entre Israel y Hamas, en virtud de cual el grupo terrorista aceptó liberar rehenes a cambio de presos palestinos, los que retornan a Israel están muertos. Hamas dijo que incluyen a tres miembros de una familia cuya captura se volvió simbólica de los horrores del ataque liderado por Hamas el 7 de octubre del 2023, que desencadenó la guerra en Gaza.h

Los israelíes se apegaron durante más de un año a a esperanza que Shiri Bibas y sus dos hijos, Ariel y Kfir, quienes tenían apenas cuatro años de edad y nueve meses de edad cuando fueron raptados por Hamas, podrían estar de alguna manera todavía vivos. El jueves, esas esperanzas fueron destrozadas.

Detrás de un escenario montado en la ciudad sureña gazatí de Khan Younis, un cartel mostraba a Netanyahu comparado con un vampiro, con sangres goteando de su barbilla, culpándolo por sus muertes. En los primeros días de la guerra, Hamas dijo que Shiri y los hijos habían resultado muertos por un ataque aéreo israelí. Israel nunca confirmó oficialmente sus muertes o abordó la posibilidad que resultaran muertos por un ataque aéreo. 

Empleados de la Cruz Roja recogiendo los ataúdes sostienen pantallas blancas para protegerlos de la vista.© Abdel Kareem Hana/Associated Press

“Nunca perdonamos ni olvidamos,” decía otro cartel, una referencia evidente a una frase escrita en las ropas puestas a los presos palestinos que fueron liberados en el intercambio de la semana pasada.

Hamas dijo que el cuerpo de Oded Lifshitz, quien tenía 83 años de edad al momento de su captura, estaba entre los devueltos. No está claro cuándo o cómo murió Lifshitz. El y su esposa, Yocheved, ambos activistas por la paz, fueron raptados del kibutz Nir Oz cerca de la frontera con Gaza. Su esposa, quien tenía 85 años de edad cuando fue raptada, fue liberada con vida por Hamas en octubre del 2023 después de 17 días como rehén junto con otras dos mujeres. Su familia dice que ella fue liberada porque estaba enferma y a los terroristas les preocupaba que la enfermedad se extendería a otros en los túneles.

“No termina hoy,” dijo Izhar Lifshitz, hijo de Oded Lifshitz a Radio Ejército el jueves poco antes de la entrega. "Terminará cuando todos estén de regreso."

Los restos de los cuatro rehenes serán examinados en un laboratorio forense en Tel Aviv para confirmar sus identidades. A cambio de los cuerpos, Israel liberará a un grupo de presos palestinos. Hamas ha acordado liberar a otros seis rehenes vivos el sábado mientras la primera fase del cese del fuego se acerca a su fin.

Un rabino del ejército israelí tenía previsto llevar a cabo una ceremonia corta después que los cuerpos fueran entregados, leyendo el Kadish, un rezo judío tradicional que se dice por los muertos y capítulos de los Salmos, por pedidos de las familias. Las tropas dispararán tiros ceremoniales al aire, y una caravana llevará los cuerpos a través de la frontera.

La improvisada Plaza de los Rehenes en Tel Aviv, donde la gente se ha reunido cada semana para observar a los cautivos siendo liberados, estaba llena de banderas israelíes el jueves que ondeaban en la lluvia de la mañana temprano. Una vez que se despejó el clima, una pequeña multitud de familias, amigos y partidarios lloró y se abrazó mientras observaba un video tributo a los rehenes en una gran pantalla montada en el centro de la plaza.

“Estoy feliz de poder levantar una bandera y mostrar a las familias aquí que estamos con ellas, y que no están siendo olvidadas," dijo Gili Marcovich, estudiante de 23 años de edad, quien fue de forma voluntaria a una reunión el jueves.

Adi Koren, de 18 años de edad, llegó con una amiga cuyo tío, un soldado israelí, murió en el conflicto. "Sólo siento tristeza y frustración," dijo Koren. 

El retorno de la familia Bibas es especialmente sensible para los israelíes, muchos de quienes han sido reticentes a aceptar que ellos habían muerto. Su suerte se volvió difícil de negar en las últimas semanas, cuando Shiri no fue liberada junto a otras mujeres en las primeras etapas del acuerdo. 

La familia Bibas vivía a apenas una milla de distancia de la frontera de Gaza en un kibutz llamado Nir Oz. Fue una de las comunidades más duramente golpeadas durante el ataque, con los locales diciendo que un cuarto de sus 400 residentes fueron asesinados o secuestrados por terroristas de Hamas que tomaron el poblado el 7 de octubre. Los residentes dijeron que la ayuda no llegó hasta el atardecer. 

Shiri, entonces de 33 años de edad, se estaba ocultando con su esposo, Yarden, y sus dos hijos en un refugio en su casa cuando llegaron los terroristas el 7 de octubre. Cuando ellos se acercaron, Yarden dejó el refugio para tratar de protegerlos, pero él mismo fue capturado. Yarden, quien fue retenido separadamente de su familia, fue liberado en un intercambio anterior de rehenes en virtud del cese del fuego. 

“[El] corazón de la nación entera está devastado. Mi propio corazón está devastado. Así lo está el de ustedes. Y el corazón de todo el mundo debería estar devastado, porque esto demuestra con quién estamos lidiando, lo que estamos lidiando con tales monstruos," dijo Netanyahu tarde el miércoles.

“Estamos de duelo, estamos sufriendo, pero estamos también determinados a garantizar que tal cosa no suceda nunca más," dijo él.