El motivo de enterrar a Shiri, Ariel y Kfir Bibas en un solo ataúd.
Shiri Bibas y sus dos hijos pequeños, Ariel y el bebé Kfir, quienes fueron secuestrad@s por terrorist@s palestinos en la Franja de Gaza, y luego asesinad@s allí, fueron enterrados hoy, los tres en un solo ataúd, en el cementerio de Tsoher, cerca del que fue su hogar en el kibutz Nir Oz.
“Permanecerán juntos y unidos, tal como Shiri envolvió a los niños, siempre, incluso en ese maldito día”, dijo Carmit Palty Katzir, quien actuó como anfitriona en el funeral.
Se refería al video que dio vuelta al mundo donde se podía ver a Shiri traumatizada, agarrando a sus hijos contra su pecho, mientras una turba de terrorist@s palestinos los sacaba de su casa.
Las imágenes se convirtieron en un símbolo del horror del ataque y grabaron su destino en la conciencia nacional.
En ese momento Ariel tenía cuatro años y Kfir, apenas nueve meses.
El kibutz fue uno de los más afectados ese día: los terrorist@s irrumpieron en todas las casas de la comunidad, excepto seis.
Aunque el funeral se mantuvo como un evento privado (se pidió a los funcionarios estatales y al público que se mantuvieran alejados), se vio en vivo a través de un video que fue transmitido simultáneamente por todas las principales redes israelíes, reportó Enlace Judío.
La procesión fúnebre comenzó en la ciudad central de Rishon Lezion, donde se prepararon los cuerpos para el entierro.
Decenas de miles de personas se reunieron a lo largo de las carreteras y autopistas de la ruta de 60 kilómetros desde allí hasta el cementerio para presentar sus respetos.
Muchos sostenían globos anaranjados, o vestían de color naranja, en homenaje al cabello de colores brillantes de Ariel y Kfir que se convirtió en un ícono de su difícil situación.
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