viernes, 8 de febrero de 2013

DICE LA TORA

PENSEMOS, RAZONEMOS ANTES DE JUZGAR A LOS DEMAS Y HERIRLO.UNA VEZ COMETIDO LA ACCION PUEDE QUE SEA TARDE!!!!!! DICE LA TORA Juzgaras a toda persona favorablemente El orígen y motivo de cualquier riña entre dos personas, reside en que uno de ellos no ha entendido que el otro no tenía intención ni voluntad de herirle o causarle daño o molestias, sino que es él quien, con sus sospechas y sus ñoñerías, no lo ha juzgado favorablemente y no cumple con las palabras de los Sabios que penetran y descienden hasta lo mas profundo y sin presentarse a tergiversaciones: "...juzga a toda persona favorablemente". Para evitar hablar mal de la gente, es importante que nos acostumbremos a pensar antes de sacar nuestras palabras de la boca, y evaluemos si con ellas, no estaremos hiriendo o dañando a alguien. LEYES DE DIVULGACIÓN - LASHON HARÁ 1. Está prohibido hablar mal del prójimo, Lashon Hará - "palabras maliciosas" - aún si se dice la verdad. 2. Aún si uno le insiste mucho que cuente lo ocurrido con fulano y sabe que en el relato de los hechos, forzosamente hablará Lashon Hará de él, está prohibido ceder y contar, aún cuando el que inquiere es el padre o el maestro de la persona en cuestión. 3. Hay que rehusarse en tal caso, aunque por ello reciba reprimendas, desprecio o ironía por religión fanática o extremada 4. Está prohibido hablar Lashon Hará aún si a causa de ello tendrá perjuicio en su trabajo, o si perderá su empleo y permanecerá sin medios de mantener a su familia. 5. Se considera también Lashon Hará el criticar al prójimo, aún si al mismo tiempo se critica a sí mismo. 6. Se prohíbe hablar Lashon Hará aún en plan de broma, sin mala intención. 7. Aún si uno no menciona claramente a la persona criticada, pero da a entender de quién se trata, se considera Lashon Hará. 8. Al igual que se prohíbe hablar Lashon Hará, también se prohíbe aceptar como verídico el Lashon Hará que le cuentan. Incluso se prohíbe el escuchar Lashon Hará, y debe cuidarse mucho de no hallarse en un lugar en el que suelen hablar Lashon Hará. 9. Si ocurre que hablan Lashon Hará en su presencia, debe hacer todo lo posible por irse del lugar. Si le es imposible, actuará de la siguiente forma: decidirá en su interior no dar fe al Lashon Hará, demostrará signo de que no está de acuerdo con las críticas e incluso expresará su desaprobación por el pecado de hablar Lashon Hará. 10. Se prohibe escuchar no sólo de una persona sola, sino incluso de varias personas que hablan juntas Lashon Hará. 11. Si la persona que critica es versada en Torá, su delito es aún más grave. 12. Afirmaron nuestros Sabios: "Por tres delitos mayores la persona recibe castigo en este mundo y es descartada del mundo venidero: idolatría, adulterio y crimen; la gravedad de Lashon Hará es mayor que la de estos tres pecados". 13. No sólo se prohíbe criticar al prójimo por sus acciones sino también por su forma de vestirse. 14. Aquél que guarda su boca de hablar mal, libra su alma de mucho mal. 15. Aquél que causa mala fama a su prójimo, jamás obtiene perdón. 16. El hablar mal equivale a lanzar una flecha y matar a su victima. Por lo general, la víctima no sabe quién le disparó. 17. Aquél que habla Lashon Hará es considerado como si renegara del D-s de Israel. 18: Por el pecado de Lashon Hará fue quemado el Templo y fue destruida Jerusalén. 19. Está prohibido vivir en una vecindad donde mora gente que habla Lashon Hará y cuanto más sentarse en su compañía. 20. Huye de personas que buscan los defectos de los otros y hablan Lashon Hará, pues son pecadores y puedes estar seguro que ellas mismas poseen esos defectos. 21. Está también prohibido chismosear aún si no se habla mal del prójimo, sino que se va de uno a otro y cuenta lo que escuchó de fulano y lo que dijo mengano. Esto se considera como un grave pecado, Rejilut, como versa: "No vayas chismoseando en tu pueblo..." (Levítico 19-16) y causa matanzas en Israel, como continúa el mismo versículo: "...y no te detengas (inactivo) ante la sangre de tu prójimo". 22. El que desea hacer Teshuva por el pecado de Lashon Hará, debe arrepentirse sinceramente, confesar a D-ios su pecado, declarando: "Pequé hablando Lashon Hará y decido de todo corazón no volver a pecar". Si al hablar Lashon Hará, causó daño a su prójimo, debe confesarle su delito y pedirle perdón. MENOSPRECIO, HIPOCRESÍA, LENGUAJE VULGAR 2. Es un pecado muy grave hacer observaciones obscenas y es severamente castigado, como está dicho: "Aquel que utiliza lenguaje licencioso será arrojado al más profundo Gueinam..." y los 60 años de felicidad que le hubieran sido garantizados por decreto Divino se transformarán en un largo periodo de infortunios". También está prohibido escuchar vulgaridades. 3. Mostrar a la persona más afecto del que siente verdaderamente es hipocresía. Peor aún es elogiar a un Rashá (persona que transgrede los Mandamientos) por interés personal. El elogio a tal persona dispensa su conducta, y de esa manera se hace igualmente responsable por sus pecados. VERDAD Y FALSEDAD Nuestros Sabios dicen que la mentira es equivalente a la idolatría. La verdad debe ser el signo distintivo de Israel, como está escrito: "El remanente de Israel no cometerá injusticias y no mentirá. No habrá en sus bocas lenguaje engañoso”. "Ellos son Mi pueblo; Mis hijos nunca mienten'". La Torá nos enseña: "Aléjate de palabras falsas ". La Mentira es el único pecado del cual la Torá nos ordena "alejarnos", lo cual indica cuanto aborrece Di-s a la mentira, y cuanto debemos esforzarnos en evitarla. Este es el castigo del mentiroso: aún cuando dice la verdad nadie le cree. La mentira del comerciante, desafortunadamente tan difundida, es considerada una astucia del comerciante para obtener más ganancias. Uno no debe engañarse creyendo que tal comportamiento le hará prosperar. La ganancia derivada de la mentira son "riquezas acumuladas para el infortunio del que las gana". Dicen nuestros sabios que aquel que siempre dice la verdad goza de longevidad. El Talmud elogia una ciudad llamada Kushta donde nadie murió antes de tiempo por no haber mentido nunca. El sello de Di-s es la Verdad, el EMET, y la Torá es la expresión de Su verdad. Feliz es aquel que vive y se comporta de esa manera. “ Rabi Shimon ben Gamliel dijo: El mundo se sustenta en virtud de tres pilares: la justicia, la verdad, y la paz…". (Pirkei Avot 1-18)