DEL WSJ

 ISRAEL ENVIA A NASRALLAH A SU JUSTA RECOMPENSA

La campaña defensiva del estado judío contra Hezbola es una lección para el Occidente.

Por la Junta Editorial

Septiembre 28, 2024

TRADUCIDA POR Marcela Lubczanski

La prensa está describiendo como es predecible el ataque de Israel contra el líder de Hezbola, Hassan Nasrallah como "escalatorio." No lo es. La escalada empezó contra Israel el 7 de octubre pasado con la masacre de Hamas, seguida un día después por cohetes disparados por Hezbola que no han dejado de llegar y han hecho inhabitable el norte de Israel. El ataque del sábado fue una defensa justificada contra el líder de un representante terrorista respaldado por Irán librando la guerra contra Israel.

Israel ha exhibido destacable restricción durante cerca de un año en respuesta a los ataques con cohetes y misiles de Hezbola, unos 9,000 en total. Esa restricción terminó este mes, como lo haría en Estados Unidos si un representante terrorista radicado en México estuviera disparando cohetes a San Antonio.

Israel ha cambiado su estrategia de respuestas de represalia a una campaña preventiva para degradar los almacenes de misiles, lanzadores y liderazgo militar de Hezbola. Estos son todos objetivos justificados en la guerra. Es trágico cuando los civies resultan también muertos, pero eso es más culpa de Hezbola. Nasrallah, quien sabía que era un hombre marcado, localizó su escondite bajo edificios residenciales.

La campaña de Israel ha sido una exhibición destacable de inteligencia, habilidad tecnológica, y por sobre todo voluntad política. El sabotaje de los buscapersonas y walkie-talkies de Hezbola hirió o mató a decenas de combatientes. Sus bombardeos selectivos contra los amos terroristas de Hezbola mostró cuanto han penetrado sus comunicaciones los servicios de inteligencia israelíes.

Israel ha hecho esto a pesar del consejo en contrario de sus aliados en EE.UU. y Europa. "El Occidente quedó sin poder mientras Israel afirma su mayor victoria a la fecha contra Hezbola," declaró la BBC en una alerta noticiosa el sábado. ¿No es Israel parte del Occidente? Eliminó a un terrorista cuyos asesinos son responsables por las muertes de miles de estadounidenses y europeos.

El gobierno de Israel ignoró destacablemente el llamado del Presidente Biden, del presidente francés Emmanuel Macron y otros por un alto el fuego de 21 días. Israel habría adorado un cese del fuego que permitiera a sus 60,000 ciudadanos desplazados regresar a sus casas en el norte. Pero Hezbola no tenía tales intenciones.

La declaración estadounidense-francesa mencionaba a Líbano e Israel. Pero Líbano no tiene gobierno en funcionamiento del que hablar, y ciertamente no uno que podría dar órdenes a Nasrallah. La declaración no mencionaba a Hezbola o a sus guardianes en Teherán. Israel no está obligada a seguir los dictados de políticos y expertos occidentales que aconsejan la desintensificación desde la seguridad de Bethesda.

El Sr. Biden tuvo el buen sentido político el sábado de llamar a la muerte de Nasrallah una "medida de justicia." Pero él no pudo resistir otra súplica para su diplomacia, a través de las Naciones Unidas de entre todos los lugares antisemitas, para negociar un cese del fuego. Un cese del fuego es mucho más probable con Hezbola e Irán a la defensiva que lo que era antes de este mes.

Ninguna victoria es permanente en el Medio Oriente, y la red de satélites de Irán contraatacará. Los huzíes dispararon un misil a Israel desde Yemen el sábado. Pero degradando al satélite de la línea del frente de Irán en Líbano, Israel ha debilitado sustancialmente a sus enemigos.

El ayatola de Irán, Ali Khamenei, prometió venganza. Pero eso es lo que dijo también después de la eliminación del líder de Hamas, Ismail Haniyeh, en julio. El ataque con misiles de abril por parte de Irán contra Israel fracasó con ayuda estadounidense. Tal vez el ayatola teme lo que Israel haría en respuesta. El no puede sentirse personalmente seguro, ni siquiera en Teherán, después de la demostración por parte de Israel de destreza militar y de inteligencia en el último mes.

Cerniéndose sobre todo esto está el programa nuclear de Irán. Un régimen armado con misiles nucleares cambiaría el cálculo de edisuasión de Israel y el Occidente. Esta es aun más razón para impedir que Irán obtenga la bomba, incluso con un ataque militar preventivo contra sus plantas nucleares si es necesario.

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La experiencia de Israel en el último año es una lección para el Occidente acerca del costo de la disuasión fallida y lo que se requiere para restaurarla. Israel bajó la guardia contra Hamas hace un año y pagó un precio terrible. Parece determinada a no repetir ese error con Hezbola.

El Sr. Biden ha debilitado la capacidad de EE.UU. de disuadir a los adversarios porque teme a cualquier escalada, cediendo la ventaja a Irán, Rusia y China. Israel no puede permitirse tal indulgencia. Su supervivencia está en juego.