DE THE WASHINGTON TIMES

 TEHERAN CONTIENE SU FUEGO

Israel ataca preventivamente los misiles y sitios de lanzamiento de Hezbola en Líbano.

Por Clifford D. May

Agosto 28, 2024

TRADUCIDO POR Marcela Lubczanski

Durante semanas, los israelíes han estado "preparándose"—como les gusta decirlo a los escritores de titulares—para una nueva ola de ataques de los gobernantes de Irán. Luego de la eliminación el 31 de julio del líder de Hamas, Ismail Haniyeh en una casa de invitados del gobierno bien vigilada en Teherán, los teocráticos habían amenazado con "seria" venganza.

Mientras escribo esto, ese perro no ha ladrado—o, más precisamente, no ha mordido. ¿Por qué no? Sólo podemos especular. Y tengo intención de hacerlo.

Primero, permítanme recordarles que la desaparición del Sr. Haniyeh no sucedió en un vacío (para acuñar una frase).

Fue una muerte prematura entre miles resultantes de una guerra que inició su organización terrorista con su invasión de Israel el 7 de octubre del 2023, y su pogrom bárbaro.

Los líderes de Hamas en Gaza entonces se retiraron dentro de la fortaleza subterránea que habían construido con fondos de la "comunidad donante internacional," dejando a los civiles gazatíes para servir como sus escudos humanos y peones de relaciones públicas en los vecindarios de encima.

En cuanto a los líderes multimillonarios de Hamas en Catar y Turquía, ellos siguieron cenando en restoranes elegantes.

Una explicación posible para la restricción de Teherán durante las semanas recientes es que la administración Biden, para su crédito, ha fortalecido la posición militar estadounidense en la región.

Las fuerzas estadounidenses están ahora a la mano para prevenir que los misiles y drones iraníes alcancen a sus víctimas pretendidas, como lo hicieron el 13 de abril cuando más de 300 fueron disparados a Israel.

Por supuesto, las fuerzas estadounidense podrían hacer más. Podrían responder a actos adicionales de agresión por parte de los gobernantes de Irán destruyendo las fábricas de misiles y drones iraníes, y los puertos desde los cuales estas armas están siendo enviadas a los huzíes y rusos, por no mencionar las plantas en las cuales los gobernantes de Irán están desarrollando armas nucleares.

Los tomadores de decisiones en Teherán probablemente ven tales respuestas como improbables. Pero pueden ser lo suficientemente posibles como para causar preocupación.

Cuando dijo tomadores de decisiones, realmente quiero decir el líder supremo Ali Khamenei. A él puede preocuparle también, que los israelíes tienen capacidades cinéticas, cibernéticas, encubiertas—que son reticentes a utilizar preventivamente pero podrían descargar en respuesta a un ataque.

Tengan en cuenta que el Sr. Khamenei sabe que sus amenazas de escalada impulsarán a los estadounidenses a poner presión adicional sobre Jerusalén para aceptar concesiones adicionales en las negociaciones indirectas y mediadas por Estados Unidos entre Israel y Hamas.

A los enviados del Sr. Biden hace poco se les ocurrió una "propuesta puente"—un​ compromiso bajo el cual Israel dejaría de disparar a los terroristas y Hamas liberaría a algunos de los rehenes que está manteniendo y torturando. Israel aceptó la propuesta. Hamas la rechazó.

Cuando digo Hamas, realmente quiero decir Yahya Sinwar, el arquitecto de los ataques del 7 de octubre. Luego del funeral del Sr. Haniyeh, él fue nombrado el líder supremo de la organización—comandante tanto de sus alas "política" como "militar."

¿Por qué el Sr. Sinwar dice no al acuerdo? Probablemente porque sus intereses estarían mejor servidos si el Sr. Khamenei fuera a ampliar la guerra de múltiples frentes y abiertamente genocida contra Israel.

Lo cual nos trae a lo que sucedió empezando alrededor de las 5 AM hora local el domingo. En respuesta a inteligencia indicando que Hezbola estaba preparándose de forma inminente para disparar desde Líbano tantos como 6,000 misiles de largo alcance a Tel Aviv y otros objetivos, 100 aviones de combate israelíes atacaron 40 sitios de lanzamiento de misiles de Hezbola.

Desde el día siguiente a la invasión de Hamas, Hezbola ha disparado cerca de 8,000 cohetes, misiles y drones a comunidades israelíes, matando soldados y civiles, quemando ciudades, granjas y bosques, y causando que más de 80,000 israelíes abandonen sus casas.

En represalia, Israel ha llevado a cabo ataques de precisión dentro de Líbano, incluido, el 30 de julio, la eliminación del alto comandante militar del grupo, Fuad Shukr.

El Sr. Shukr, ustedes deberían saber, ha sido buscado durante mucho tiempo por Estados Unidos por su rol en el asesinato de 241 soldados estadounidenses en el bombardeo en 1983 de un cuartel del Cuerpo de los Marines de Estados Unidos en Beirut. Nuestro Departamento de Estado publicó una recompensa de u$s5 millones a cambio de información sobre su localización.

A Hezbola todavía le quedan miles de cohetes, todos emplazados en el sur de Líbano en violación flagrante de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU que tenía la intención de llevar a un alto la guerra del 2006 del satélite iraní con Israel.

Otra guerra a gran escala entre Hezbola e Israel indudablemente causaría significativa muerte y daño en Israel. Pero casi con certeza diezmaría a Hezbola, y destruiría lo que queda de Líbano, una nación anteriormente vibrante que se ha vuelto un estado fallido desde que Hezbola capturó el poder.

El Sr. Khamenei entiende la importancia de la paciencia estratégica. El demostró eso en el 2015, cuando aceptó el Plan Integral de Acción Conjunto (JCPOA) del Presidente Obama porque le dió un camino paciente hacia el club de armas nucleares, junto con decenas de miles de millones de dólares.

Ese mismo año, el Sr. Khamenei habló del 2040 como la fecha en la cual Israel va a ser exterminada.

Para ese fin, él ha estado librando una guerra de agotamiento, muerte por medio de mil cortes, la mayoría de esos cortes hechos por medio de árabes a quienes él está demasiado feliz de martirizar en busca de sus ambiciones imperiales.

El Sr. Sinwar está bien con eso. El ha dicho que los civiles gazatíes son "sacrificios necesarios." ¿Pero a ustedes les sorprendería si él preferiría no estar entre ellos?

A fines de la semana pasada, un alto funcionario egipcio dijo a un periodista israelí que el Sr. Sinwar quiere una garantía que no será asesinado.

No creo que los líderes israelíes harán esa promesa. Pero puedo imaginarlos dando al Sr. Sinwar un paso seguro a otro país, digamos Turquía (de forma incongruente tanto un miembro de la OTAN como partidario de Hamas/Hermandad Musulmana), a cambio de la liberación de los rehenes que sean que no han sido aún asesinados brutalmente.

Esto puede llevar mucho tiempo, pero nada se perdería si los enviados del Sr. Biden fueran a sugerir tal acuerdo, transmitiendo al Sr. Sinwar que es la única forma en que él verá alguna vez la luz al final de su túnel.

Clifford D. May es fundador y presidente de la Fundación para la Defensa de las Democracias y columnista del Washington Times.