El domingo, la policía de Londres retiró una protesta antiisraelí de la sinagoga St. John's Wood después de que decenas de manifestantes se congregaran frente al edificio, tras haber sido instados a mostrarse "visiblemente judíos", informó JNS.
La Campaña Contra el Antisemitismo declaró que los manifestantes fueron reubicados mientras "su 'protesta' continuaba a la vuelta de la esquina. Una vez más, se ha cruzado una línea roja en Gran Bretaña".
El grupo señaló que estaban involucrados tanto activistas antiisraelíes judíos como no judíos. Anteriormente, la policía explicó: “No existe ningún mecanismo legal para prohibir la protesta; sin embargo, hemos recurrido a las condiciones de la Ley de Orden Público para evitar desórdenes y perturbaciones. Cualquier persona que participe en la protesta no debe ingresar” a la zona directamente afuera de la sinagoga.
La policía también prohibió que una contraprotesta organizada por Stop the Hate se acercara a la sinagoga. La intervención se produjo tras los llamados de grupos de la comunidad judía para que se restrinja el paso de los manifestantes tras revelarse su movilización.
La Campaña Contra el Antisemitismo advirtió: “Es profundamente alarmante que los grupos de ‘Palestina Libre’ hayan instado a sus seguidores a mostrarse ‘visiblemente judíos’ y protesten en una sinagoga llena de familias y niños que asistían a diversos eventos, incluido un concierto coral vespertino. De no haber sido por la actuación de la policía, la sinagoga habría sido escenario de una protesta agresiva a sus puertas”.
El grupo añadió: «Protestar en una sinagoga y animar a los manifestantes a parecer visiblemente judíos debe ser una línea roja. Esta intimidación performativa no tiene ningún impacto en los acontecimientos a miles de kilómetros de distancia, pero sí tiene un inmenso impacto en los judíos británicos en un momento en que aún nos estamos recuperando del asesinato de judíos en la sinagoga de Heaton Park en Manchester hace apenas unas semanas, durante Yom Kipur», publicó Israel National News.
La Junta de Representantes de Judíos Británicos condenó la protesta y escribió: «Hemos sido directos al afirmar que esto es absolutamente inaceptable».
La Junta añadió: «Tras las vergonzosas escenas ocurridas frente a una sinagoga en Nueva York la semana pasada y frente al centro comunitario judío JW3 en Londres el año pasado, es evidente que la cara repugnante, extremista y antisemita de sectores del movimiento global pro-Palestina, decididos a destruir la cohesión y sembrar el odio y el caos en nuestras calles, ha permanecido descontrolada durante demasiado tiempo». Gran Bretaña ha experimentado un fuerte aumento de incidentes de antisemitismo desde el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023 y la posterior guerra en Gaza.
El mes pasado, una conferencia del profesor israelí Michael Ben-Gad en City St. George's, Universidad de Londres, fue interrumpida cuando activistas antiisraelíes irrumpieron en su aula, profiriendo acusaciones y amenazas.
Un video que circula en línea muestra a manifestantes con el rostro cubierto interrumpiendo la conferencia de Ben-Gad, gritando que tenía "sangre en las manos" y acusándolo de servir en el ejército israelí. Se escucharon cánticos de "Palestina libre" y "Del río al mar" mientras el personal de seguridad expulsaba a los intrusos.
A principios de este mes, el University College London (UCL) denunció a la académica Samar Maqusi ante la policía tras una conferencia en la que repitió el centenario libelo de sangre contra los judíos y promovió teorías conspirativas sobre el control judío de las finanzas y la información.
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