miércoles, 26 de julio de 2017

Respuesta del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel a declaraciones realizadas por el Presidente de Turquía:
Las declaraciones del Presidente turco Recep Tayyip Erdoğan a los activistas de su partido son absurdas, infundadas y distorsionadas. Sería mejor que se ocupase de los difíciles problemas a los que se enfrenta su propio país.
Los tiempos del Imperio Otomano terminaron. Jerusalén fue, es, y siempre será la capital del pueblo judío. A diferencia del pasado, el gobierno en Jerusalén está comprometido con la seguridad, la libertad, la libertad de culto y el respeto a los derechos de todas las minorías.
Los que viven en un palacio de cristal, mejor que no tiren piedras.

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