LA SANCION A ASSAD

Cuán duro golpearán la línea final del régimen las sanciones impuestas ayer por el Presidente Obama sobre Bashar Assad de Siria y su círculo íntimo?
Probablemente no mucho. A diferencia de Moammar Gadhafi de Libia, quien tenía decenas de miles de millones en riquezas del petróleo escondidos en el extranjero hasta que fueron capturados por EEUU y nuestros aliados, el régimen más pobre de Assad fue quitado en gran medida fuera de instituciones financieras de EEUU por sanciones anteriores. Damasco puede estar más preocupado por el movimiento de ayer por parte del Gobierno suizo de congelar los activos de 13 altos funcionarios sirios.
Por otra parte, el beneficio de las sanciones es a menudo simbólico, y en este caso las sanciones significan que la Administración Obama puede finalmente superar su fijación con la idea que Assad es un reformador, o que puede ser destetado de su alianza con Irán, o que su régimen es un socio potencial en la solución de los diversos males de la región.
Hacemos hincapié en la palabra "puede", porque incluso ahora el gobierno está diciendo a los periodistas que el objetivo de las sanciones es poner a Assad sobre aviso que el puede "liderar esta transición a la democracia" o de lo contrario, dejar el cargo. En este momento, Assad afirma ahora que la incompetencia policial tiene la culpa de toda la matanza. Él también ha hecho ruido sobre la celebración de un "diálogo" con los disidentes, que es tan creíble como su decisión anterior de revocar las leyes de emergencia de décadas de antigüedad del régimen. Así que es posible que la Administración pudiera volver a la normalidad con Damasco después que los recuerdos de las detenciones masivas y los asesinatos se desvanezcan. Nosotros estaremos escuchando para ver cuán claramente Obama condena a Assad en su discurso de esta noche sobre el Medio Oriente.
Es lamentable que el Sr. Obama no impusiera estas sanciones previamente, cuando las manifestaciones tenían impulso y antes que el régimen haya consolidado su dominio. Al igual que con las sanciones contra Irán y la intervención en Libia, Obama parece llegar a la conclusión correcta sólo después del momento en que el liderazgo estadounidense podría haber hecho el mayor bien.
Fuente: The Wall Street Journal- Traducido especialmente para el blog de OSA Filial Córdoba