jueves, 19 de mayo de 2011

ANTISEMITISMO 101

By Alex Joffe
6/5/11

Una de las muchas cosas desconcertantes sobre el antisemitismo es su falta de originalidad. La retorica y lugar cambian, pero la esencia persiste. El antisemitismo en los campus americanos no es la excepcion; pero el mero hecho que exista, y que sea virulento, es suficiente para ameritar la alarma que ha causado. Suficiente material ha sido acumulado sobre este ejemplo particular del fenomeno general para formar un subgenero propio. Destacables entradas de la extension de libros incluyen "Academicos contra Israel y los Judios", una coleccion editada por Manfred Gerstenfeld; "Identidad Judia y Derechos Civiles en America" por Kenneth Marcus, la cual encara temas legales relacionados con judios como grupo etnico; y el anterior estudio de Jerome Karabel, "Los elegidos: la historia oculta de admision y exclusion en Harvard, Yale y Princeton", sobre la historia de las politicas de admision en instituciones de elite que discriminaban a los judios por cuenta de su "caracter."
A estos se les une ahora una nueva coleccion, "Antisemitismo en los campus: Pasado y Presente", editado por Eunice Pollack, el cual en forma apta y util extiende la discusion analitica. Los juicios respecto al "caracter" de los judios estan en el centro del nuevo antisemitismo en los campus tambien, pero hoy ellos se relacionan exclusivamente con Israel.
Para entender el fenomeno de hoy dia, ayuda conocer un poco de pre-historia. Un buen ejemplo es ofrecido por el College Wellesley solo para mujeres en Massachusetts, donde, como Jerrold Auerbach muestra aqui, estuvo en vigencia durante la decada de 1960 una estricta cuota en la cantidad de judias admitidas, y simples pedidos por parte de estudiantes judias para posponer los examenes en Yom Kippur fueron negados tan alegremente como los intentos por permanencia por parte de profesores judios religiosos observantes. Al mismo tiempo, en su departamento de estudios afro-americanos, Wellesley empleo a un profesor, Tony Martin, quien predicaba insensatez afrocentrica y cuyas asignaciones de clases mostraban "La secreta relacion entre negros y judios", un infame tramo acusando a los judios de estar detras del comercio de esclavos. Cuando fue criticado, Martin fue defendido por los administradores, incluido el presidente del colegio, sobre la base de la "libertad academica", el ultimo refugio de los canallas de hoy dia. Las estudiantes judias, cada vez mas marginalizadas, fueron forzadas a elegir entre expresarse y callarse; legalmente no reconocidas como una minoria, ellas no tenian derecho a las protecciones federales contra el acoso etnico y de otro tipo que era rutinariamente concedido a todos los otros grupos en los campus.
El caso de Martin es sintomatico en mas formas qeu una. Dice algo sobre las fuentes del nuevo antisemitismo en los campus, el cual emana exclusivamente de los precintos de la extrema Izquierda, incluida la Izquierda judia, y los aliados politicos de la Izquierda: estudiantes negros y musulmanes y sus organizaciones. Tambien dice algo sobre los instigadores. Los intolerantes pero gentiles administradores WASP (blancos, anglo-sajones y protestantes) se han ido, reemplazados por burocratas que por sobre todo quieren mantener la calma y quienes complaceran a los mas abiertos y abusivos antisemitas para hacerlo, especialmente si los ataques sobre los judios vienen de una clase designada como "victima."
Como Eunice Pollack muestra en su propia contribucion, los musulmanes y palestinos de hoy se basan en las experiencias anteriores de los estudiantes radicales negros. La Nacion del Islam, Malcolm X, Amiri Baraka, y Stokely Carmichael fueron los pioneros reales en demonizar a los judios e Israel en las universidades (y mas alla); en el proceso, ellos usaron rutinariamente los tropos antisemitas y antisionistas clasicos. Las hermanadas respuestas pavlovianas de los administradores universitarios—miedo y condescendencia—han establecido la barra de incitacion de los grupos protegidos de hoy tan alta que solo la violencia fisica esta fuera de los limites.
En cuanto a los judios que estan siendo forzados a elegir entre los peligros de protestar y la vergüenza de la aquiesencia, la eleccion superadora ente ellos esta enmarcada en terminos de su apoyo a Israel—una sociedad acusada con un pecado original tan malvado que sus cargadores deben ser rechazados o eliminados. Por su parte, los profesores, incluidos profesores judios, se ponen nudos a si mismos para estar del "lado correcto." En un capitulo discutiendo la situacion en Berkeley, Edward Alexander cita peticiones exigiendo que la universidad se desprenda de Israel. El ejercicio, como por diseño, pone a todos los otros judios sobre aviso: posicionate con la parte culpable—o sea, Israel—o con toda la gente bienpensante. Hablar en oposicion, señalar los dobles raseros explicitos y el antisemitismo explicito de los atacantes, es rutinariamente denunciado como "censura."
Por que algunos judios en los campus odian a Israel con tal pasion, ignorando los aspectos claramente retrogrados de la sociedad palestina, incluido su propio antisemitismo propagado oficialmente? Por que algunos judios se alinean con entidades como la Asociacion de Estudiantes Musulmanes, un receptor de fondos de Arabia Saudita y otras cleptocracias represivas, abusadores de mujeres y homosexuales, y enemigos de la libertad religiosa?
Al menos dos niveles de explicacion han sido sugeridos, incluidos por parte de Kenneth Lasson y Edward Alexander en este volumen. Uno tiene que ver con la creencia, y especificamente con el credo del cosmopolitanismo, el posmodernismo, y el posnacionalismo que opone a las certificadas elites de hoy contra lealtades "burguesas" tales como nacion y religion. Por supuesto, aquellos adherentes al credo cosmopolita cuyos dioses caseros llevan los nombres de "justicia social" y "derechos humanos", forman una clase particular en su mismos, y una con tabues y privilegios firmemente aplicados. Para los judios, la pertenencia a esta clase requiere poner su propia particularidad firmemente detras de ellos, asi como una vez fue para los judios deseosos de unirse a un club de campo.
El otro nivel relacionado es el del activismo. En el pasado, para los judios conversos al comunismo, socialismo y otras formas de izquierda radical, el particularismo judio, incluido en la forma del sionismo, violaba el ideal de los judios como la vanguardia revolucionaria que lideraria el mundo hacia la desaparicion de la diferencia nacional y etnica. Los avatares de hoy dia buscan aceptacion no en un club de campo sino en una fuerza de elite combatiente. Para algunos exponentes de este tipo, brillantemente pintados por el novelista Howard Jacobson en "La Pregunta de Finkler", la mas elevada forma de judeidad reside, precisamente, en el repudio publico de la judeidad.
Este ultimo sindrome alimenta dentro y fuera de un relativamente nuevo y ominoso fenomeno: la afirmacion cuasi-religiosa que, en esencia, la oposicion a Israel es un imperativo moral judio. Enumerando a los profetas biblicos en la causa de lo que Reinhold Niebuhr ridiculizo como "pacifismo perfeccionista", la afirmacion tambien representa algo de un retorno de los reprimidos: a saber, la oposicion de una vez al sionismo por parte de elementos del Judaismo Reformista clasico. Como en el pasado, los pronunciamientos eticos judios son selectivamente desplegados contra otros judios; a jovenes judios, especialmente en los campus, se les dice que la solidaridad con el estado judio es un obstaculo para su realizacion espiritual, la cual va a ser buscada en cambio en busquedas tan politicamente correctas como tikkun olam.
Las universidades americanas no estan aun tan envenenadas como sus contrapartes en Gran Bretaña y otras partes. El ejemplo de las universidades canadienses, no obstante, situadas justo en la puerta de al lado y desafortunadamente no discutidas en este libro, muestran como todo esto puede cambiar en un regimen explicitamente "multicultural." En cuanto al pueblo americano, ellos no estan en ninguna parte cerca de ser tan antisemitas o tan anti-Israel como los europeos y otros; tambien ayuda a mantener en mente que las universidades no son tan referentes de la sociedad mas grande como artefactos cuidadosamente fabricados y alimentados. Pero, las incursiones del antisemitismo dentro de estas islas de activismo son una advertencia de lo que podria aun ocurrir en el mundo de la opinion impactada por sus predicas.

Alex Joffe es un profesor investigador en el Instituto para Investigacion Judia y Comunitaria
Fuente: Jewish Ideas Daily- Traducido especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba

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