Pesaj y la Libetad
- Festividad de Pesaj, es el relato que conmemora la liberación del pueblo judio de la esclavitud de Egipto. Cada año cada hogar judio, en su casa celebra el hecho tal vez mas importante de este pueblo que recuerda con todo detalle, la salida desde Egito, el milagro de las aguas y la odisea del desierto para llegar hasta el dia de hoy, siendo una nación destacada en el mundo, con una herencia pletórica de valores, pero con una fuerza interior inquebrantable, producto de ese recorrido milenario que tenía un solo objetivo, la búsqueda de la libertad.
Cada 15 de Nisan -fecha del calendario hebreo-, todas las familias judias a lo largo y ancho del globo terraqueo dan comienzo a la celebración de esta Fiesta, considerada una de las tres fiestas de Peregrinaje hacia Jerusalen, la Capital eterna e indivisible del pueblo judio, donde eran llevadas las ofrendas, desde los tiempos en que el Gran Templo existía. Aún hoy a pesar de su desaparición, miles y miles de peregrinos viajan igual, para expresar así, su testimonio, de que no hemos olvidado la gesta de nuestro pueblo al tomar sus pocas pertenencias y luego de 40 años deambulando entre la desgracia y la esperanza, lograron llegar y vivir en nuestra tierra prometida.
Comemos Matzá o pan ácimo durante todo el período de celebración, igual que comió ese pueblo que tuvo que partir presurosamente y sin tiempo suficiente para leudar el pan. Por eso la prohibición de comer alimentos que derivan del trigo, avena, cebada, etc., porque somos concientes que solo el recuerdo y la enseñanza a nuestros hijos y a los hijos de ellos será la única esperanza de situarnos permanentente dentro de nuestra historia para no perderla, para heredarla y transmitirla.
Durante 7 dias en la tierra de Israel y 8 dias en la diáspora disfrutamos de Pesaj, o la Pascua judia - en la traducción al español-, cuyo primer o primeros dias y el último o últimos, son los dias mas sagrados; los intermedios, denominados en hebreo, Hol Hamoed, son dias hábiles dentro de la festividad, donde muchos realizan las mismas tareas habituales o son dedicados a paseos familiares.
Fiesta de origen bíblico, llamada fiesta de las Matzot, donde encontramos todas las regulaciones bíblicas que le otorgan una carácteristica especial a toda la celebración. La primera noche, es tal vez la mas recordada, ya que se celebra El Seder, es decir el encuentro familiar en la mesa llena de manjares preparados para la ocasión y donde se lee el relato fiel que se transmite desde la Hagada de Pesaj. Allí están todos los pasos que dió el pueblo hacia la libertad, la explicación de cada significado a traves de la comida, las canciones, las Brajot -benciones-, las preguntas de los hijos, las palabras de los abuelos y.... el aficoman, o trozo de Matzá escondido para que los niños lo encuentren y reciban premios y golosinas.
Cada generación debe recordarse a si mismas, como si ella misma hubiera salido de Egipto. Esta frase la recordamos y grabamos a fuego en nuestros corazones. Todos debemos recordar y sentirnos como aquellos antepasados, que ayudados por nuestro único Dios nos ayudaron y nos marcaron el camino para lograr lo que hoy somos; un pueblo libre.
Al final de cada relato, todos mencionamos la misma frase. El año que viene en Jerusalen. Seguramente porque ese es el sueño de todo judio en el mundo, regresar a casa. A esa tierra que nos fué legada y que aún hoy debemos defender, como a lo largo de toda la historia de la humanidad. Tal vez, en estos tiempos tan convulsos, otras preocupaciones nos distraen a todos, pero Pesaj y su trascendencia, nunca será olvidada, ya que a partir de ella, somos lo que somos. Un pueblo que seguirá viviendo eternamente en el concierto de las naciones, con una única meta que fué rebida hace milenios y que nunca deberá minimizar, la búsqueda y la transmisión del valor mas importante de cada ser humano: La libertad.
.* Raanana, Israel.
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