domingo, 1 de diciembre de 2013

DIJO EL PRESIDENTE PERES:

“Perdí las elecciones (a primer ministro en 1996, a manos de Biniamín Netaniahu) porque confié en los palestinos y el terrorismo continuó, pero nunca perdí la esperanza y creo que al igual que hicimos la paz con los egipcios en un momento en que no parecía posible y hemos hecho la paz con los jordanos vamos a hacer la paz con los palestinos”, expresó el presidente israelí, Shimon Peres, en un diálogo con su ex colega español Felipe González (ambos en la foto) anoche, tras la inauguración del pabellón de su país, invitado de honor en la 27ª Feria Internacional del Libro de Guadalajara.. En su interinato tras el magnicidio de Itzjak Rabin, el premio Nobel de la Paz había cedido gran cantidad de ciudades y pueblos al control palestino para que pudieran ser autónomos, lo cual lo había hecho popular entre ellos, pero eso no evitó que prosiguieran los atentados y crímenes como los perpetrados en Ierushalaim y Tel Aviv le valieron imputaciones de traición y le costaron la confirmación en el cargo. El presidente israelí sugirió que los europeos y los estadounidenses vayan a la Franja de Gaza y les digan que dejen de disparar contra Israel: “Díganles que dejen de aterrorizar; ellos matan a su propio pueblo y a nuestra gente, éste es el mayor obstáculo para la paz”. “Tenés que defenderte cuando alguien está tratando de matarte; el problema es detener la matanza, no detener la defensa”, aseguró. Peres enfatizó que Israel fue el primero en reconocer a los palestinos, ya que no lo habían hecho Jordania y Egipto cuando controlaban Iehudá y Shomrón y Gaza, respectivamente. Respecto del histórico líder de la Organización de Liberación Palestina, el presidente israelí subrayó que si bien “sin (Iáser) Arafat, el proceso de paz no podría haber empezado, con Arafat no pudo completarse”. El diálogo también incluyó temas como la desaparición o irrelevancia de las ideologías, el racismo, la revolución tecnológica, la ciencia y las nuevas definiciones de conceptos antiguos. “Tenemos que cambiar los prejuicios y dejar que nuestros niños construyan un mundo nuevo”, recomendó Peres.