Un mensaje de esperanza de una musulmana sionista
Es hora de empezar a amar y dejar de odiar.
Una joven musulmana de Nueva York, Farhana Rahman, que trabaja para una startup israelí, ha provocado una “pequeña tormenta” en Facebook. Pero es una tormenta feliz, llena de amor y esperanza para el futuro.
Rahman actualizó su ‘estatus’ de Facebook durante su segunda visita a Israel y el hermoso mensaje de amor desbordante, gratitud y camaradería se hizo viral.
“Cuando yo, una joven musulmana, visité Israel en esta ocasión, el país y su gente realmente se robaron algo precioso de mí: se robaron mi corazón, mi alma, mi lealtad, mi dedicación, mi esencia … llegué hasta el corazón de Israel y exploté … con emociones. Porque todo el mundo me ofreció amor, todos hicieron todo lo posible para amarme. Nadie puede decir que mis amigos online de Israel no son “amigos de verdad”. Porque sí que lo son. Pero es incluso un insulto para mí referirme a ellos como “mis amigos”. Ellos son mi familia. Pero también es un insulto referirme a ellos como “mi familia”. Porque son más que familia, son una parte de mí. Mi sangre. Ellos en conjunto me transformaron en una versión mucho mejor de mí misma”, escribió ella.
En Israel todo el mundo me ofreció amor.
Ella también tenía algo que decir cerca de los medios de comunicación:
“En Israel, todo el mundo, personas de todas las edades, me ofrecieron un trato excepcional, un trato de clase mundial … ¿Por qué estoy diciendo todo esto? Para hacerte saber que, dentro del pueblo de Israel, las personas de todas las edades aman, y aman ser amadas. Y créanme, yo no sólo conocí a un pequeño puñado de personas en una sola ciudad … No crean a ciegas los titulares ridículos y los relatos de los medios de comunicación…. Tomen lo que oyen con un grano de sal, hagan su propia investigación y vayan directamente a la fuente. Presten atención al otro lado de la historia. Apliquen esto a cualquier tema que escuchen de boca de los medios tradicionales. Sus esfuerzos desenterrarán todo aquello que no está cubierto por los medios tradicionales. Y eso es mucho”.
Y acerca de la situación de las mujeres musulmanas en Israel y las acusaciones de apartheid:
“Es casi una locura la cantidad de mujeres que vi conducir, ir de compras de forma independiente, estudiar, trabajar y disfrutar de la vida en Israel. Pequeñas libertades que no podrían ni siquiera soñar en otros países del Medio Oriente. Y sí, muchas de ellas andaban con burkas de pies a cabeza. Además, es mucho más seguro caminar tarde por la noche en la mayor parte de Israel que en Nueva York, porque las personas son civiles y buenas. Si respondes con cualquier cosa contradictoria, simplemente voy a ignorarte porque no estoy dispuesta a perder mi tiempo”.
“Fui a empresas dirigidas por judíos y recibí un gran servicio al cliente. Fui a empresas dirigidas por musulmanes y también obtuve un gran servicio. Los clientes estaban mezclados en todas partes (judíos y musulmanes), y todos se llevaban muy bien. Curiosamente, en muchos casos, los propietarios de las tiendas no fueron capaces de distinguir si yo era musulmana o judía. Lo tomé como un cumplido. Yo no pensaba que sería posible para mí amar a Israel y su gente más aún que la vez anterior. Pero sí. En este viaje lo hice. ¿Eso me transforma en sionista? Probablemente. Te sorprenderías de cuántos otros musulmanes sionistas me encontré por allí. Así que ustedes pueden decir lo que quieran, adelante. Yo estaré en la primera línea para defender al pueblo judío. Y después de que el humo se disipe, nos abrazaremos y jugaremos juegos de mesa mientras disfrutamos de unas deliciosas bourekas y un vaso de limonada con menta”.
Más tarde, Farhana Rahman contó acerca de las reacciones a su post original. Ella describió cómo fue inundada con mensajes de apoyo en Facebook. Un dato interesante según ella fue que no recibió mensajes negativos. Pero esta parte fue probablemente la más interesante:
“Y la mejor parte. La mayoría de los que me enviaron mensajes de apoyo eran ¡sionistas musulmanes! ¡Montones! Ellos provenían de países árabes del Medio Oriente, países del sur de Asia y países europeos. Cada uno de ellos me contó acerca de sus esfuerzos para difundir la verdad en sus comunidades respectivas y en las redes sociales. Fue muy reconfortante saber que las generaciones más jóvenes de musulmanes educados están dando realmente un paso adelante. Nuestros esfuerzos no son más que una gota en un océano de locura, pero algo es algo, y con el tiempo, en unas cuantas generaciones, se creará un glorioso efecto dominó. Me siento muy bien por eso. Me encanta ver cómo ellos se unen para enfrentar a los antisemitas. El mensaje básico que ellos propagan es que no se pueden decir cosas en contra de Israel y su gente si no lo has experimentado personalmente. Y no puedes experimentar nada hasta que no vayas”, escribió Rahman.
La mayoría de los que me enviaron mensajes de apoyo eran ¡sionistas musulmanes! ¡Montones!
El mensaje de amor de Rahman es fuerte, alentador y reconfortante. Y también hay varias lecciones importantes en él.
En primer lugar, la importancia de que musulmanes interactúen directamente con israelíes, que vengan a conocer el país y se atrevan a decir la verdad sobre lo que han visto y aprendido con sus propias palabras. El hecho de trabajar para una startup israelí, haberse hecho amigos israelíes en Facebook y luego conocerlos en la vida real, jugó claramente un rol crucial en la experiencia de Rahman, y eso muestra la importancia del factor de “interacción humana” para revelarle al mundo la verdad sobre Israel. Casi no hay sustituto para el contacto directo y personal entre israelíes y musulmanes en la promoción de este tipo de relación y entendimiento. Esto a su vez demuestra que hay un aspecto muy beneficioso en las redes sociales como Facebook, a pesar de los muchos problemas que plantean.
En segundo lugar, el mensaje de Rahman demuestra que es posible superar el sesgo antiisraelí y antijudío que se promueve en la mayoría de los ambientes musulmanes y ese hecho en sí mismo ofrece gran esperanza, especialmente para las generaciones futuras. Sin embargo, para que la esperanza se materialice y se transforme en una realidad, muchos musulmanes más tendrán que venir a conocer la realidad con sus propios ojos y, por supuesto, muchos más musulmanes que simpatizan con Israel tendrán que encontrar el valor necesario para plantear sus opiniones abiertamente y hablar en favor de la verdad y la justicia. Cuando lo hagan —ojalá que sea más temprano que tarde— ellos deben saber que su valor será correspondido con amistad eterna por parte de sus amigos israelíes. Porque nosotros en Israel sí sabemos apreciar realmente a los verdaderos amigos.
Fuente: AishLatino
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