lunes, 10 de marzo de 2008

CARTA DE UN OLE A OTRO...


Querido olé:

17 de febrero de 1988: el emisario de la Agencia Judía ya me entregó todo los papeles, mis valijas están listas, el container ya fue enviado con mis libros, un ventilador, un horno eléctrico, la máquina de escribir y miles de ilusiones.

En la Universidad Hebrea ya confirmaron que podré iniciar mi Master en Leyes y ser alumno como todo israelí.

El sheliaj me prometió que todo andaría bien y que no debo preocuparme.

La despedida de mis padres, en el Aeropuerto abrazos y lágrimas, y un vuelo que finalmente terminaría en Tel Aviv. Lluvia y frío.

En Ben Gurión el agente de turno del Ministerio del Interior me entregó la Teudat Olé, y desde el primer día tuve que aprender a entender esta difícil realidad israelí. Un nuevo idioma, una nueva cultura, y un mundo por descubrir.

Es verdad que en la casa de mis tíos José y Violeta podía leer Aurora en español, comer una buena milanesa y recordar encuentros familiares en la diáspora, más todo el mundo externo, la Universidad, las leyes, los amigos eran algo tremendamente nuevo.

En esta semana, exactamente el 17 de febrero del 2008, cumplí veinte años en Israel y quería compartirlo contigo.

Más de una vez pensé que todos aquellos que logramos en nuestras vidas poder hacer "aliá" somos privilegiados. Muchas personas planearon su aliá durante años y por diferentes situaciones de la vida no lograron concretarla. Algunos porque se casaron, otros porque emprendieron un gran negocio, otros porque se quedaron cerca de sus padres, etc. etc. Y así pasaron los años y nunca pudieron echar raíces en Israel.

En la actualidad, todos los judíos tenemos la suerte de poder vivir en este bendito país, con todo lo bueno y lo malo del mismo. Esto no existía antes de 1948.

Mal o bien, con burocracia y con problemas, logramos "probar" lo que significa ser parte de esta sociedad israelí. Un poco en español y un poco en hebreo logramos expresarnos ante el pueblo israelí y compartir las ideas que trajimos un día desde América Latina.

Yo sé lo difícil que es aprender el idioma, conseguir trabajo, comprar una vivienda e, incluso, hacer los deberes con los hijos y aprender junto a ellos temáticas que no estudiamos en América Latina.

Más de una vez lo dije y lo repito hoy: con todos los errores y aciertos quiero agradecer a la Agencia Judía por todo lo que hizo en pro de la aliá de América Latina desde hace más de 60 años.

A nivel personal me siento agradecido por lo que la Agencia Judía y el Estado de Israel hicieron por mí. Me refiero a las pequeñas cosas y a las más grandes. Lo poco que me explicaron me ayudó mucho y lo poco que me dieron me sirvió para sentir que no estoy sólo en este país. Esto me dio la fuerza a mí, como a cientos de voluntarios de la OLEI para ayudar a quienes nos necesitan.

En los últimos tiempos leemos en los diarios sólo críticas a la Agencia Judía y al aparato burocrático de la misma, más nadie dice nada sobre lo mucho que se hizo en 60 años de alia organizada. Muchos alaban el trabajo de nuevos entes como "Nefesh Le Nefesh", "AMI" y otras organizaciones, y yo me pregunto qué pasará cuando estos organismos dejen de funcionar?

La Agencia judía es el único ente que ayudó a la organizaciones de Olim desde la creación del Estado. Con poco dinero, es verdad, mas siempre con lo poco logramos existir.

Sin duda alguna tenemos que fortificar a la Agencia Judía y ayudarla en la continuación de todo lo realizado en estos 60 años, en lugar de buscar fórmulas mágicas para reemplazarla por entes privados carentes de historia y experiencia en este tema tan complicado. La Aliá forma parte del alma y la base de nuestra existencia como nación y por ello sólo la Agencia Judía puede cumplir con dicho cometido.

Cada olé tiene su historia, sus alegrías, sus tristezas, sus fracasos y sus éxitos. Lo importante es que todo ello nos sucede acá, en Israel, nuestra tierra y la tierra de nuestros hijos.

Para mí estos veinte años en Israel son algo emocionante y muy especial.

Comparto este momento con amigos israelíes y con mi esposa e hijos también nacidos en Israel. Ellos me entienden... mas estoy seguro que sólo ustedes, que también son o fueron Olim jadashim alguna vez, entienden en toda su dimensión lo que siento.


Presidente Organización Latinoamericana en Israel
Dr. Leon Amiras

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.