lunes, 30 de septiembre de 2013
El papa Francisco y el rabino Abraham Skorka compartieron un Shabat en el Vaticano
Nunca antes en la historia de las relaciones judeocristianas el jefe de la Iglesia Católica había tenido tantos encuentros con un rabino, incluso en días festivos para el judaísmo como el Shabat. Además, el Papa y Skorka planean ir juntos a Tierra Santa el próximo año.Nuestra amistad es una señal de que se puede avanzar en el diálogo interreligioso", expresó Skorka.
Skorka viajó a Roma invitado por la Comunidad de San Egidio para participar de un encuentro internacional por la paz y se hospedó en la residencia de Santa Marta, el nuevo hogar del Papa, junto a quien quiere seguir avanzando las relaciones interreligiosas.
"Amén de la amistad, ahora tenemos un desafío espiritual: en qué medida podemos dar un mensaje de paz, en qué medida lo nuestro puede hacer esa marca en la historia que queremos hacer", señaló el Rabino de Benei Tikva.
Asimismo, el Papa y Skorka planean ir juntos a Tierra Santa el año próximo. Francisco fue invitado a esa tanto por Israel como por la Autoridad Palestina.
"Estamos soñando con el Papa ir juntos a Israel pronto, se está trabajando en el tema y yo lo acompañaría también a Belén, en los territorios palestinos. Su presencia ayudaría mucho, ya que en este momento se están retomando las conversaciones de paz", explicó el Rabino.
Skorka sostuvo que sueña con un abrazo con él “delante del kotel, el Muro de los Lamentos, y con ir juntos a Belén, donde nació Jesús. Yo no dejo de ser judío por ello y él va a seguir manteniendo su fe. Las dos espiritualidades tienen que tener un punto de encuentro”.
El Rabino destacó que Francisco se transformó en un referente espiritual no sólo para su propia iglesia, sino para el mundo. “Su llamado a la paz en Siria, su convocatoria a una jornada de ayuno y oración para detener una ofensiva militar estadounidense sobre ese país fueron hechos de gran impacto. Los actos calan más hondo que los juegos políticos y militares", explicó.
"Nosotros no estamos para la foto, sino que lo nuestro tiene que ser un disparador para repensar las cosas. Hay que avanzar para construir puentes de diálogo, pero un diálogo viviente, no de palabras, sino un diálogo de actos, que refleje nuestro compromiso", afirmó.