lunes, 24 de diciembre de 2012
La Organización Sionista Mundial asegura haberse posicionado como una de las entidades centrales de la comunidad judía argentina
La Organización Sionista Mundial asegura haberse posicionado como una de las entidades centrales de la comunidad judía argenti
Lázaro (Lalo) Slepoy, representante para América Latina de la Organización Sionista Mundial (OSM), realizó un balance de su gestión a nueve meses de haber asumido el cargo y anunció los proyectos previstos para 2013.
En una entrevista exclusiva con la Agencia Judía de Noticias, Slepoy aseguró que la OSM logró “un posicionamiento como una de las entidades centrales dentro de la comunidad”.
“Hoy en día soy miembro de Maté, que se reúne mensualmente para coordinar todas las actividades de la comunidad judía; participo y soy invitado en todos los actos principales de la comunidad judía; tomamos parte en la mayoría de ellos como ente organizador y/o patrocinador”, argumentó.
La designación de representantes de la OSM, hasta el presente son cuatro, es una decisión tomada por la actual conducción que preside Avraham Duvdevani, a partir de la división de tareas que surge como consecuencia del nombramiento de presidentes distintos para la Agencia Judía para Israel, la Sojnut, y la Organización Sionista Mundial, que durante décadas estuvieron unificadas en el mismo dirigente.
A continuación la entrevista:
Lalo, ¿qué puede decirnos sobre el comienzo de su misión en América Latina?
Cuando llegué, hace 9 meses, fue una sorpresa para todo el mundo. En primer lugar tuve que dedicarme a explicar por un lado qué es la Organización Sionista Mundial y por otro lado ponerla en un lugar central que hasta ese momento no existía. Hay que tener en cuenta que yo fui el primer representante que designó la OSM, o sea no había cultura de tener un representante de la OSM en la comunidad. En segundo lugar las instituciones centrales de la comunidad no sabían de mi llegada y cuando me vieron -incluso se sorprendieron- pensaron que yo seguía trabajando en Naale, un programa del Ministerio de Educación de Israel; asumo que no hubo una buena información sobre mi designación y mi llegada a Buenos Aires, por lo que tuve que explicar, hasta el cansancio, a qué venía.
Pero también se produjo un tercer factor que ha influido en mi labor, que está relacionado a temas de infraestructura; situaciones difíciles que ocuparon una parte importante de mí tiempo porque durante más de cuatro meses no tenía un lugar fijo donde trabajar y andaba con mi computadora bajo el brazo buscando una mesa libre en el piso de la Sojnut. Existe un acuerdo entre la OSM y la Sojnut por el que la tesorería de la Agencia Judía le brinda sus servicios a la Organización Sionista Mundial, y ellos nos hacen toda la contabilidad a nosotros y ocurrió que los responsables de la Agencia decidieron cambiar a la persona que estaba a cargo de la tesorería en Argentina y quien era el tesorero para América Latina, Isaac Percal, se retiró luego de casi 30 años, por lo que se designó a un nuevo tesorero, Ariel Lifac, que de a poco empieza a encarar la labor, y se introduce un nuevo programa de registración contable… Todos estos cambios, tanto de personas como de modalidad de trabajo, obligan a invertir más tiempo que el deseado en cuestiones de forma y no de fondo.
Además llegue aquí en un momento de transición total, donde todas las entidades centrales de la comunidad se estaban cambiando directivas: en estos 9 meses hubo así: elecciones en la OSA, con cambio de dirección; elecciones en COSLA con cambio de dirección; elecciones en DAIA con cambio de dirección y ya hay una ebullición por las próximas elecciones para la AMIA.
A pesar de esa situación, que son cosas que pasan y no dependían de nosotros, creo que hemos logrado un posicionamiento como una de las entidades centrales dentro de la comunidad. Hoy en día soy miembro de Maté, que se reúne mensualmente para coordinar todas las actividades de la comunidad judía; participo y soy invitado en todos los actos principales de la comunidad judía; tomamos parte en la mayoría de ellos como ente organizador y/o patrocinador. A nivel de posicionamiento, hoy en día, sí se le pregunta a la gente que es la Organización Sionista Mundial, ya lo saben.
Segundo, hemos logrado implementar nuevos programas. Hay dos programas, que a mi criterio son revolucionarios. Uno de ellos es el examen psicométrico. Hay ya 16 colegios en la Argentina, Chile, Uruguay y Brasil que adhirieron a este programa, qué consiste en que esos colegios judíos puedan preparar y tomar el examen psicométrico para que los alumnos tengan el ingreso a cualquier universidad de Israel, como ocurre con los colegios estadounidenses para lograr la entrada a cualquier universidad de Estados Unidos, o como el Liceo Francés lo hace con Francia. Por supuesto que el objetivo nuestro no es sólo prestigiar la educación judía sino también facilitar la aliá a los jóvenes que quieran y vean a Israel de una manera mucho más atractiva.
- Usted habló de programas revolucionarios, pero ¿por qué adquieren tal característica?
-Este programa le brinda al alumno certidumbre, frente a la incertidumbre que había hasta ahora. O sea el alumno cuando viaja a Israel ya sabe el puntaje que tiene, en qué materia lo recibieron y en qué universidad va a estudiar. Y dentro de la misma tónica es el segundo programa, que llamamos programa de aliá laboral. En este programa el que llega a Israel lo hace sabiendo dónde va a trabajar, dónde va a vivir, cuánto va a ganar, de qué se va a ocupar, dónde van a estudiar los chicos, cosa que cambia cien por ciento el paradigma de la aliá.
En primer lugar lo estamos implementando con médicos que tienen más de 14 años de antigüedad y de experiencia en su especialidad, a los que nosotros los conectamos con hospitales en Israel y son contratados aquí, antes de hacer aliá. Próximamente lo implementaremos para especializados en alta tecnología, que trabaje en computación, pero también para personas con otro tipo de profesiones, como conductores de grandes vehículos, carniceros, entre otras actividades.
Hasta ahora cuál era la situación, llegaban a Israel, iban a un Mercaz Klita, estudiaban hebreo. Si era mayor de edad, ya el hebreo sólo lo dominaría a medias, luego iba a trabajar dos años en un shooping abriendo carteras, porque no iba a conseguir otro trabajo y luego… Entonces dijimos no, de esa manera la aliá no es atractiva, vamos a tratar de solucionarle el problema principal que tiene el olé, que es su ocupación, su trabajo. Solucionando eso creemos que la aliá va a ser más accesible para todos. Por eso en un principio nos dedicamos a estos dos programas.
-En el plano de la educación ¿qué están haciendo?
-Estamos trabajando con BAMA en la confección de programas educativos para la enseñanza del hebreo en los colegios, que se presentarán en la próxima Javurá. Creo que ninguno de los programas existentes fue hecho en la Argentina. Son programas que fueron preparados en Israel o en el extranjero, que poco se adaptaban a las necesidades o a la idiosincrasia argentina. Lo que se está haciendo ahora son programas locales, que empiecen fundamentalmente como se empieza a estudiar cualquier otro idioma: aprender hablar y después a escribir y leer, pero primero el idioma hablado. Creemos que eso va a ocasionar un cambio también.
Hoy en día la OSM trabaja junto a la dirección de BAMA en apoyar, fundamentalmente, programas de capacitación de maestros y de difusión del idioma hebreo como el idioma nuestro. Aquel que habla y pone en el mismo plano el inglés y el hebreo, y llama a ambos lengua extranjera, que me perdone pero no entiende nada o está en otra y no hablamos el mismo idioma. El inglés tal vez sea una lengua que le puede servir mucho a nivel comercial, ir por todo el mundo y que lo entiendan. El hebreo no es una lengua extranjera, es nuestra lengua, el idioma de comunicación del pueblo judío, es nuestra lengua de la comunicación, de la tradición, de la religión y de la cultura judía.
- ¿Qué comunidades visitó, además de Córdoba, Rosario y Paraná en estos 9 meses?
- Además de esas comunidades estuve también en Santa Fe; próximamente voy a visitar Salta, donde se abrió una nueva filial de la Organización Sionista Argentina. Por supuesto, viaje varias veces a Chile, Uruguay y Brasil, nuevamente promocionando todos estos temas y viendo en que se puede trabajar en conjunto. Por ejemplo, en Chile ayudamos a que la Federación Sionista, el Consejo Sionista de Chile, sea una institución reconocida, con personería jurídica.
También estuve una vez en México, en Ecuador y próximamente estaré llegando a Perú. No se viaja por protocolo, para presentarnos, sino cuando hay una necesidad real de nuestra presencia para ayudar en el trabajo que realizan.
- ¿Cómo se enfoca el año 2013?
- El año 2013 va a ser un año complicado para Medinat Israel porque es un año donde se empieza con un proceso electoral, porque van a haber cambios. Es un año en que el tema de Irán será más candente y relevante; en que las negociaciones con los palestinos van a estar siempre presente, y ante el nuevo nivel que le dieron en las Naciones Unidas, calculo que van a seguir ellos subiendo sus exigencias. Y en la comunidad judía tenemos un año con nuevas directivas que vienen con muchas ganas de hacer cosas nuevas, a las cuales vamos a sumar nuestro aporte y nuestro esfuerzo para poder colaborar en todos los programas conjuntos con la nueva dirección que va a asumir, si D’s quiere, en abril para la AMIA. Lo que hacemos nosotros es poner nuestro granito de arena para junto con ellos poder liderar todos los programas, siempre acercando a Israel, a que se posicione en el centro de la vida judía de la comunidad.
Pero qué va a pasar con Hagshama; con toda la actividad que queda en el aire al terminar el programa Tzorim Sionut, un presupuesto del Ministerio de Educación que canalizaba la OSM en los movimientos juveniles y en algunas instituciones como la OSA o la Filial Córdoba.
Estamos tratando en Israel de solucionarlo. No hay un día en que allá dejan de tratar de conseguir fondos que puedan suplir los del Ministerio de Educación y estamos tratando de que por lo menos la mitad de esos puestos no queden vacantes. Es difícil decir cuándo se van a conseguir los presupuestos, pero se están haciendo todos los esfuerzos para poder lograrlos.
Las actividades de Hagshama van a seguir, y no sólo van a seguir sino que se van a desarrollar aún más; ya hay una persona y estamos esperando que llegue el nombramiento oficial. Esa persona va a ser llevada a Israel para ser capacitada y luego va a venir a trabajar y se le van a dar los presupuestos y las condiciones necesarias para que el trabajo con los jóvenes, que fue tan bien hecho y tuvo tan buenos resultados, se siga profundizando.
Vamos a continuar con el programa de Mishpaja Israelít Bakehila (familia israelí en la comunidad), y queremos traer otras dos familias, una para el interior y otra para Buenos Aires, pues si bien el presupuesto pertenece al ministerio de Educación, el mismo está asegurado.
Por supuesto que vamos a seguir desarrollando los nuevos programas para facilitar la aliá y en el caso específico de gente que se dedica a alta tecnología, estamos en contacto con empresas israelíes para lograr lugares de trabajo para olím de Argentina capacitados.
La realidad es que Israel también está pasando por una meseta económica, entonces qué hace la OSM -dentro de Israel- para que la sociedad israelí siga aceptando a los olím y el sionismo.
En Israel pasa algo que es muy paradójico, tal vez es al revés de lo que pasa en la mayoría de los países. Cuando mayor es la inmigración mejora la situación económica. Cuando llegaron un millón de judíos en un pequeño lapso de tiempo a Israel, se pensó que iba a ser la gran debacle, porque estos judíos que llegaban necesitaban viviendas, escuelas, hospitales, carreteras, todo y se creía que el país no iba a poder brindárselos. Y todo lo que trajo fue un increíble gran crecimiento económico, ya que la gente que llegó estaba capacitada y también fue consumidora, o sea hizo reactivar el consumo interno. Hoy en día en Israel, y más que nada los olím latinos no son bien vistos, son súper bien aceptados. El latinoamericano es una persona abierta, que enseguida se involucra, que enseguida hace amigos, es una persona que es muy bien recibida y muy querida. Nosotros dentro de la OSM tenemos dos departamentos, uno de Actividades Sionista en la Diáspora y otro de Actividad Sionista en Israel, por qué aquel que piensa que por el sólo hecho de ser israelí ya son sionistas se equivoca. Hay que educar al israelí para que sea sionista. Tenemos un departamento entero en Israel que se dedica a eso; en el Centro Herzl, y haciendo actividades con colegios y con la juventud israelí para que ellos sepan recibir al nuevo inmigrante.
- Por último, ¿cuál sería el mensaje para el año 2013?
- Sí, en primer lugar que el número de olim está aumentando y va a continuar haciéndolo en 2013, y en segundo lugar agradecer a la Organización Sionista Mundial que me dio la oportunidad de estar en esta comunidad y aportar mi pequeño grano de arena para que esto siga adelante. También, al concluir este año civil, como decimos en Israel, agradecer a toda la comunidad por la ayuda que nos da en nuestra labor, y desearles a que tengan un excelente 2013, y que el año que viene Israel se encuentre más cerca de cada uno de nosotros, y que cada uno consiga avanzar un paso hacia ese Israel que todos queremos.