La puerta de enlace jihadista a Africa

Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba Mientras Francia se estanca en Mali, extremistas mucho mas peligrosos se han atrincherado en Libia oriental. 21/1/13 por Daniel Nisman Mapear los ataques con zanganos durante el año pasado seria una forma de entender la politica americana hacia al Qaeda y la guerra contra el terror. Implacables ataques con misiles en Yemen y Pakistan, comparados con la casi inaccion contra celulas de al Qaeda en el norte de Africa y el Sahel, sugieren que Washington no perseguira en forma agresiva a los jihadistas si ellos no presentan una amenaza directa a los intereses americanos en el exterior o en el continente norteamericano. El conflicto en el norte de Mali es un ejemplo elocuente. En tanto las redes jihadistas controlando el norte de Mali no extiendan sus tentaculos fuera de la region, Estados Unidos puede excusarse de tomar la iniciativa. Pero mientras Estados Unidos observa cautamente desde los costados como Francia se estanca en las arenas de Mali, extremistas islamicos mucho mas peligrosos se han atrincherado en Libia oriental y tienen toda intencion de hacer un impacto global. Cuatro meses despues del asesinato del Embajador Chris Stevens y otros tres americanos en el consulado de Bengazi, extremistas islamicos en esta parte de Libia son mas fuertes que nunca. Luego de los ataques del 11 de septiembre del 2012, el pueblo de Bengazi gano elogios de politicos americanos que cautivaron la atencion mediatica mundial despues que ellos expulsaron a militantes islamistas de sus bastiones urbanos y comenzaron a retomar el control del destino de su ciudad. Su victoria tuvo corta vida. Ahora los residentes locales de Bengazi informan que las mismas milicias que fueron expulsadas de sus bastiones han reinfiltrado calladamente la ciudad. Algunos incluso han retornado a sus viejos complejos en zonas centricas, pero se han reprimido de izar la bandera negra jihadista. El retorno de las milicias islamistas a Bengazi ha coincidido con un agudo aumento en los choques entre milicias laicas rivales y fuerzas de seguridad en la zona, forzando al gobierno central a tomar medidas drasticas. Luego de actuales asesinatos de funcionarios de gobierno, el gobierno de Ali Zidan reemplazo al jefe de seguridad de la ciudad por un conocido general revolucionario anti-islamista, quien prontamente dijo que el estaba considerando toque de queda nocturno para combatir a los militantes. El resurgente problema islamista de Bengazi solo araña la superficie. El vasto desierto que se expande al oriente de la ciudad se ha vuelto un refugio jihadista lleno de trafico de armas y campamentos de entrenamiento, administrados por veteranos de al Qaeda endurecidos en batalla de toda la region. Entre estas figuras esta Sufian Qumu, un nativo libio y ex asistente de Osama bin Laden, quien paso tiempo en las prisiones de Bahia Guantanamo y libia antes de retornar a su ciudad natal de Derna. Qumu es a menudo menospreciado por algunos locales como incompetente pero no obstante ha tenido exito en establecer Derna como el corazon latente de las operaciones de al Qaeda en el continente africano. Situada a 260 kilometros al oriente de Bengazi en la ruta costera internacional, Derna ha servido historicamente como un centro de comercio internacional pero ahora actua como una puerta de enlace jihadista para Africa. En el año pasado, aspirantes a jihadistas de tan lejos como Pakistan han llegado al area para entrenamiento, antes de ser transferidos a zonas de combate en Mali. La mano de obra islamista no es lo unico pasando a traves de Derna. Muchas de las armas avanzadas y misiles anti-aereos que son proliferados a la Peninsula del Sinai de Egipto y otras partes en la region fueron transferidas de los bunkers de Moammar Gadhafi por parte de contrabandistas islamistas en Libia oriental. Estos contrabandistas parecen controlar en forma efectiva la vecindad del cruce fronterizo egipcio cerca de la ciudad portuaria libia de Tobruk. Sus sentimientos hacia la presencia del gobierno libio en la zona fueron muy recientemente destacados por un intento de asesinato contra el Ministro de Defensa Mohammed al-Bargati durante una visita el 20 de enero. Derna y sus alrededores son solo uno de muchos bastiones jihadistas surgiendo en Libia. otros incluyen los cercanos al pueblo sudoccidental de Sabha, cerca de las fronteras con Argelia y Niger. La creciente cooperacion de estas redes ha facilitado en gran medida la financiacion y equipamiento para elementos de al Qaeda en Mali y a traves de Africa, y muy probablemente ofrecieron una plataforma de lanzamiento para los ataques contra la planta In Amenas de Argelia. Si esa crisis letal de rehenes la semana pasada probo una cosa, es que las consecuencias del extremismo islamico en Africa no pueden ser confinadas al vasto Desierto del Sahara. La lucha francesa por erradicar el extremismo en el norte de Mali se volvera rapidamente un juego agotador de golpea a la mole sin accion decisiva contra los propios cuasi estados de Libia. Como con la campaña americana en Yemen, o la operacion francesa en Mali, la cooperacion de los gobiernos locales es un componente clave en cualquier campaña de intervencion extranjera. El gobierno de Ali Zidan podria ser ese socio en Libia, habiendo declarado sus intenciones de evitar que Libia se convierta en un refugio jihadista. Desde el comienzo de la Primavera Arabe el primer ministro Zidan ha surgido como uno de los unicos lideres arabes en pedir abiertamente vinculos crecientes con Estados Unidos. Con los franceses persiguiendo a al Qaeda en Mali y el gobierno argelino endureciendo su postura contra los jihadistas, el problema jihadista de Libia ya no puede ser mas descartado como una molestia local. Es hora que Estados Unidos ataque.