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Yair Lapid podría ser el próximo ministro de Exteriores de Israel El líder de la segunda fuerza política tras las elecciones, Yair Lapid, podría ser el próximo ministro de Exteriores. "El Ministerio de Exteriores no está legalmente registrado a mi nombre", ironizó el ex ministro Avigdor Lieberman, que recordó su intención de recuperar el puesto del que dimitió hace un mes al ser imputado por fraude y abuso de confianza. Fuentes del Likud reconocieron que Lapid recibirá la cartera que prefiera de entre las de Exteriores y Finanzas a cambio del apoyo de sus 19 diputados, la gran sorpresa de los comicios. Lieberman, número dos de la candidatura Likud Beitenu del primer ministro Biniamín Netanyahu, había declarado sobre la cartera que obtendría Lapid a cambio de su previsible entrada en el Gobierno que lo "natural" era que fuese la de Finanzas. Lapid desactivó la propuesta de la líder laborista Shelly Yachimovich de cambiar al primer ministro aprovechando el empate a 60 diputados entre el bloque de derecha y partidos ultra ortodoxos y el que engloba a las formaciones de centro, izquierda y árabes, y dijo que no usaría su fuerza parlamentaria para sustituir a Netanyahu. Mientras se negocian las coaliciones, los analistas especulan con un Gobierno sin partidos ultra ortodoxos formado al menos por Likud Beitenu, el partido de Lapid (Yesh Atid) y el religioso nacionalista Habait Hayehudí, que sumarían 61 diputados. No obstante, un diputado de Likud señaló que la formación ultra ortodoxa sefardí Shas, con 11 escaños, "entrará a cualquier precio" en el próximo Ejecutivo de coalición. El cómputo definitivo del voto, que se conocerá hoy tras contarse los 240 mil de soldados, presos, diplomáticos y hospitalizados, apunta un cambio de escaño. Tras el recuento de un 70% de las denominadas "papeletas azules", la sionista religioso Habait Hayehudí obtendría un diputado más y llegaría a 12, mientras que el partido árabe Lista Árabe Unida-Taal perdería uno y se quedaría en cuatro. También mantendría sus dos diputados del Kadima, al superar por muy poco el 2% mínimo necesario para tener presencia parlamentaria. EFE