jueves, 23 de mayo de 2013

Israel: Récord de jugadores israelíes árabes en sub-21 que disputará europeo

ISRAEL EN LINEA En pocos días más se llevará a cabo en Israel la rueda final del Europeo sub-21 de fútbol, el acontecimiento futbolístico de mayor importancia que se haya sido disputado en el Estado judío desde que la Asociación de Fútbol pertenece a la UEFA. Ocho selecciones divididas en dos series buscarán el título continental y las chances de la selección de Israel de llegar a pelear un lugar en el podio no son grandes frente a potencias como España, Alemania, Italia o Inglaterra. Pero lo que destaca a la selección hebrea es que en el plantel que dirige Guy Luzón hay no menos de seis jugadores de origen árabe, sin dudas un récord histórico para el combinado azul y blanco. Tuvieron que pasar 27 años desde la fundación del Estado hebreo para que en 1975 Rifaat Turk, volante de Hapoel Tel Aviv, se vista por primera vez la camiseta de la selección y rompa varios tabúes dentro de la comunidad árabe, que no veía con buenos ojos que un jugador de su colectividad lleve el uniforme nacional israelí. Turk incluso llegó a integrar el plantel seleccionado que participó en 1976 en los Juegos Olímpicos de Montreal. A Turk lo siguió el zaguero Ali Otman, jugador de Hapoel Jerusalén, nacido en la parte oriental de la ciudad, y más tarde Zahi Ármeli, goleador del Macabi Haifa campeón de finales de los '80, quién también dejó su sello con la selección convirtiendo 10 goles en los 42 partidos que disputó. En este último decenio, con el ascenso de equipos de la comunidad árabe como Bnei Sajnín, Ají Nazareth y Hapoel Taibe, fueron apareciendo más y más jugadores de dicha colectividad en primera división y hoy en día ellos forman parte, prácticamente, de casi todos los planteles. Por supuesto que los más destacados fueron convocados a las distintas selecciones en números crecientes. Wallid Badir, con 74 actuaciones y 12 goles, es el jugador récord de la comunidad árabe. Con 38 años cumplidos, Badir, quién también fue capitán en su equipo, Hapoel Tel Aviv, en las últimas temporadas, cuelga los botines en estos días y sin dudas es un ejemplo de perseverancia para los jóvenes árabes de que se puede llegar a la selección nacional israelí y ser titular indiscutido durante varias campañas de eliminatorias tanto europeas como mundiales. Las buenas actuaciones de los jugadores árabes israelies en sus clubes y en la selección les ha valido también el salto al plano internacional. El plantel nacional que dirige Eli Gutman, y que busca la clasificación para el Mundial de Brasil el próximo año, cuenta con Bibars Natkho, hoy titular del Rubin Kazán de la liga rusa, Biram Kayal, campeón con el Celtic de Glasgow, y Mahrán Rahdi, flamante campeón con Macabi Tel Aviv y candidato a emigrar a otra liga europea. En la selección sub-21 son figuras Taleb Tawatcha de Macabi Haifa, Munas Dabur de Macabi Tel Aviv, Ahmad Abed de Kiriat Shmoná, Muhammad Kalibat de Bnei Sajnín, Marwán Kabha de Macabi Petaj Tikva y Awad Azam de Ají Nazareth. En la selección sub-19, que jugó las eliminatorias, el número de jugadores de la comunidad árabe ya subió a siete y no hay dudas que la integración de jóvenes valores en las divisiones formativas de los equipos de primera división ayudará a incrementar su participación en futuras selecciones nacionales. La integración de los jóvenes futbolistas árabes israelíes a la selección demuestra una vez más que el fútbol pude servir como puente de relación entre los pueblos y pese a que antes de los comienzos de los partidos oficiales se puede percibir que ninguno de ellos entona las estrofas del himno nacional israelí, Hatikvá, en los momentos de alegría cuando convierten un gol o de tristeza en una derrota, no existen diferencias entre jugadores judíos o árabes. Amboos sentirán en ese momento las mismas sensaciones.