Actualización: A cinco días de las elecciones, la competencia esta más cerrada que nunca
Con el Likud por lo menos tres asientos detrás de la Unión Sionista, el primer ministro Benjamin Netanyahu expresó su preocupación el miércoles sobre la posibilidad de un gobierno de izquierda que podría formarse después de las elecciones de la próxima semana.
Hablando en una reunión del partido Likud en la ciudad costera de Netanya, el primer ministro dijo que si la brecha entre el partido gobernante y su rival de centro-izquierda no es cerrada en los seis días restantes antes de que el país vaya a las urnas ” hay una posibilidad real de que [los líderes de la Unión Sionista] Tzipi Livni y [Isaac] Bouji Herzog sean los próximos primeros ministros del Estado de Israel, con el apoyo de la Lista Común [árabe] “.
Las declaraciones de Netanyahu en el Park Hotel, lugar de un atentado suicida mortal que mató a 30 y dejó 140 heridos en 2002, se produjeron un día después de que tres encuestas independientes dieron a su partido, Likud, 21 escaños. El rival Unión Sionista fue visto ganando hasta 25 escaños.
Netanyahu dijo a los potenciales votantes de partidos de derecha de Israel que ellos “no tienen el privilegio” de votar por cualquiera de las partes, solo el Likud, afirmando que los votantes indecisos que den sus votos para otros partidos como Hogar Judío (HaBait HaYehudi), Yisrael Beytenu o Kulanu aumentan las probabilidades de un gobierno de izquierda.
Netanyahu también dijo al periódico Makor Rishon este miércoles que “existe la posibilidad de una revolución política” en las elecciones de la próxima semana, y coloca la culpa de la decadencia de su partido en las urnas a un “esfuerzo organizado por una inyección de efectivo masivo y por una salvaje y sin precedentes campaña en diversos medios de comunicación “.
Netanyahu, quien inició las elecciones dos años antes al despedir a Livni como ministra de Justicia y a Yair Lapid (Yesh Atid) como ministro de Finanzas hace tres meses, le dijo a los partidarios el lunes que había “un enorme esfuerzo, en todo el mundo, para derrocar al gobierno del Likud”.
Sus comentarios el Miércoles fueron en parte respuesta a las declaraciones de un grupo de ex funcionarios de seguridad hablaran en contra de Netanyahu por segunda vez en dos semanas, acusando al primer ministro de arruinar las relaciones con los EE.UU., del mal manejo de la guerra del verano contra Hamas, y de entorpecer el rol del país en las negociaciones internacionales con Irán sobre su programa nuclear.
De acuerdo a una encuesta realizada por la Radio del Ejército el miércoles, la lista de Herzog podría ganar 24 asientos y el Likud de 21, lo que indica una erosión en el apoyo a la facción de Netanyahu.
La encuesta encontró que el partido de centro-izquierda y sus potenciales aliados tomarían 54 mandatos en comparación con los 58 de la derecha y los partidos religiosos dentro de los 120 mandatos de la Knesset, el parlamento israelí.
Kulanu un partido de centro-derecha, que no ha dicho si respaldaría Netanyahu o Herzog y que podría desempeñar el papel de “hacedor de reyes”, es visto ganado ocho asientos.
Una encuesta similar realizada por el Canal 2 de televisión lanzada el martes dio a la Unión Sionista 25 escaños y 21 para el Likud, con el centro-izquierda y aliados teniendo 55 escaños contra 57 para la derecha. Esta encuesta también predice ocho mandatos para Kulanu.
Aliados potenciales de la Unión Sionista incluyen la Lista Común Árabe, el centrista Yesh Atid y el izquierdista Meretz.
Mientras que algunos analistas dudan que la Unión Sionista tendrá suficiente apoyo de otros partidos para formar una coalición, el partido el miércoles pidió ayuda de la Lista Común [Árabe], compuesta de partidos que nunca se han unido a una coalición de ningún gobierno.
Herzog dijo a Maariv en una entrevista publicada el miércoles que él no niega la posibilidad de designar a Ahmad Tibi , candidato en el partido de la Lista Común, al Comité de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knesset.
El comentario provocó indignación por parte de los políticos de derecha, con la MK Ayelet Shaked de Hogar Judío comentando en Twitter que quizás Herzog también pondría a la controversial MK Árabe Hanin Zoabi en el consejo.
En declaraciones a la Radio del Ejército, Herzog insistió en que él es el único líder “capaz de sustituir a Netanyahu”, aunque esquivó una pregunta sobre si él estaría de acuerdo con formar un gobierno de unidad con Netanyahu.
“Dondequiera que voy, me dicen que no vaya con Bibi (Netanyahu), con los religiosos o con los partidos árabes”, dijo. “Pero tenemos que tener en cuenta el mapa político de Israel.”
Los líderes del partido Likud han hecho eco de la preocupación del primer ministro de una posible derrota del Likud en la recta final de las elecciones. Un funcionario de un partido no identificado dijo a Haaretz el miércoles que “algo no va como debería” en la campaña del partido de derecha.
“El discurso de Netanyahu ante el Congreso la semana pasada debería haber creado un punto de inflexión para nosotros y fortalecido al Likud en las encuestas. Está claro que no logramos el resultado deseado “, el miembro del partido fue citado diciendo.
“Llegamos a estas elecciones pensando que Netanyahu no tenía un verdadero rival. Ahora entendemos que la situación es mucho más compleja”, una segunda fuente del Likud dijo al periódico.
Tras la publicación de la encuesta de Canal 2 el martes, que colocó el partido de Netanyahu cuatro asientos detrás de la Unión Sionista, Miri Regev, Nº 5 en la lista del Likud, hizo un llamamiento en Facebook a los partidarios del partido para salir a votar.
“La encuesta publicada esta tarde por el Canal 2, que dio al Likud 21 escaños contra 25 para la Unión anti-Sionista exige que los miembros del Likud se despierten si no quieren encontrarse en la oposición con un gobierno de izquierda radical,” dijo la MK derechista.
El partido Meretz también puso en marcha una nueva campaña apelando a votantes potenciales para conseguir apoyo después de que cayó en las últimas encuestas a sólo cinco escaños.
“No debemos perder a Meretz,” el lema lee, jugando con el nombre del partido que significa vigor”, sólo depende de ti.” La líder del Partido Zahava Gal-On, dijo que quienes se oponen a Netanyahu deben votar Meretz, argumentando que un voto por la Unión Sionista de Livni no garantizaría el cambio de régimen.
En el suburbio de religioso de Tel Aviv, Bnei Brak, el miércoles, decenas de miles de personas participaron en una manifestación en apoyo del partido Unión Judaismo Torah.
El rabino Aharon Leib Schienman dijo a sus seguidores que era “su santo deber” votar por el partido.
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