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El General iraní Soleimani viaja a Saná para organizar contraofensiva rebelde en Yemen para contrarrestar los ataques saudíes y egipcios.

Publicado: 28/03/2015 de Edwin en ARABIA SAUDITA, IRAK, IRAN, ISIS, MEDIO ORIENTE,PAKISTAN, SIRIA, TERRORISMO ISLAMICO, YEMÉN

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El general iraní Qassem Soleimani con reclutas afganos en Tikrit

A Teherán le tomó menos de 48 horas para tomar una decisión de devolver el golpe sorpresa por aire  y el ataque naval lanzado por Arabia Saudita y Egipto en el Golfo, el Jueves, 26 de marzo, para contener a los rebeldes Houthi respaldados por Irán que habían’barrido con las ciudades yemeníes. Fuentes militares de Debkafile informan que el máximo comandante de guerra de Irán, el jefe de las Brigadas Al Qods, el general Qassem Soleimani, aterrizó en la capital yemení, Saná, este Viernes, 27 de marzo para organizar una contraofensiva y abrir un tercer frente de guerra directo para Irán, en el Oriente Medio después de Siria (en apoyo de Bashar Assad) e Irak (con los EE.UU. contra ISIS).

La intervención saudí-GCC-egipcio encontraron a los rebeldes pro-iraní Houthi a las puertas del gran puerto de Adén, que domina el estrecho de Bab el Mandeb, la puerta de entrada fundamental para el transporte de petróleo entre el Océano Índico y el Golfo a través del Canal de Suez y el Mediterráneo. Algunas unidades del ejército de Yemen se han unido a los rebeldes. Están armados con armas avanzadas estadounidenses que fueron suministradas para la guerra contra Al Qaeda y ahora sirven a la revuelta contra el régimen yemení reconocido por Washington.

Esta fuerza rebelde ya se había apoderado de la mayor parte de las ciudades y los tramos de la costa del Mar Rojo de Yemen.
La llegada de Soleimani a Sanaa señaló la determinación de Teherán de no renunciar a una pulgada de la tierra adquirida por sus representantes, al tiempo que subraya su exigencia de dominio como líder de Oriente Medio, prometido por Washington a cambio de aceptar un acuerdo marco sobre su programa nuclear.

Funcionarios estadounidenses persisten en su pretensión pública de hacer creer que los diplomáticos y los militares no están conectados. Así que el acuerdo se presenta como punto a firmar en la fecha límite del 31 de marzo, mientras que las llamas de la violencia chiíta sunita pueden extenderse a otro rincón del Oriente Medio.

En las próximas horas, fuerzas navales y marinos egipcios y saudíes están planeando aterrizajes en Adén, según sus fuentes militares. Ellos lucharán para contener la marcha Houthi a través de Yemen y evitar la caída de su última ciudad importante, después de dos días de ataques aéreos saudíes y del Golfo contra posiciones rebeldes alrededor de Yemen.

Fuentes militares de Debkafile informan que las fuerzas aéreas de Arabia Saudita y del Golfo y unidades navales egipcias han gestionado durante las primeras 48 horas de su intervención , cortar el suministro por aire y mar de Irán a los rebeldes Houthi. El General Soleimeni tendrá que encontrar una manera de romper el bloqueo de Arabia y Egipto y restaurar las rutas de suministro. Por encima de todo, debe determinar si debe o no cooptar a las fuerzas aéreas y marítimas iraníes al frente de Yemen y por lo tanto conducir a la batalla cabeza a cabeza contra Arabia Saudita y sus diez aliados sunitas. Se informó que buques de guerra egipcios e iraníes de maniobra para el control en el estrecho de Bab el Mandeb, se han enfrentado este jueves, el primer día de la intervención en el conflicto suní de Yemen.   Desde fuera de la región, Pakistán está dispuesto a entrar en el conflicto, con la promesa este Viernes de “una fuerte respuesta” a cualquier amenaza a la “integridad de Arabia Saudita.” Esto abrió la puerta para que el ejército paquistaní se mezcle en las guerras de Arabia Saudita contra Irán junto con la mayoría de las naciones árabes sunitas.

Islamabad estaba respondiendo a un aviso de los rebeldes Houthi de invadir las provincias del sur de Arabia Saudita Asir, Najran y Jizan, para lo cual contaban con una bienvenida por parte de las poblaciones saudíes locales, la mayoría de los cuales pertenecen a la minoría secta ismaelita, que está más cerca del chiíta iraní y el Houthi zaidí que a la fe suní dominante del régimen real saudí.

El Viernes por la noche, el presidente Barack Obama habló con el rey saudí Salman y reafirmó el apoyo estadounidense a la acción militar en Yemen para Arabia Saudita y sus aliados del Golfo Pérsico, dijo la Casa Blanca en un comunicado.

Obama y el rey Salman coincidieron en que su objetivo es lograr una estabilidad duradera en Yemen a través de una solución política negociada, dijo el comunicado. Obama también subrayó su compromiso con la seguridad de Arabia Saudita.

Fuente: Debkafile