martes, 24 de junio de 2008

Hayle Satain: el sueño de la medalla olímpica no tiene límites de edad


El atleta israelí, quien llegó a Israel en la ola inmigratoria de Etiopia en 1991, no pensaba en competir oficialmente cuando vino al país y su preocupación estaba situada más que nada en mantener a su numerosa familia siendo padre de ocho hijos.
Para peor, el cambio de alimentación entre Etiopia e Israel le hizo engordar varios kilos que al principio le fueron difíciles de disminuir, hasta que empezó a entrenarse diariamente. Así alcanzó el título nacional de maratón e incluso rompió el record israelí ganando en el 2003 la Maratón Internacional de Venecia.
Ya a las 4:30 hs. de la mañana Satain comienza su entrenamiento diario, corriendo por lo menos 20 kms. desde su modesto apartamento en Hedera hasta las costas del Mediterráneo.
El Comité Olímpico Nacional lo ayuda con una beca, aunque para el veterano corredor es muy difícil arreglarse con el aporte gubernamental y mantener a su esposa e hijos sólo con ello. Fuera de los entrenamientos, Satain entrena a jóvenes atletas, en su mayoría de origen etiope para que sigan sus pasos y se alejen de la calle y sus males. Nobleza obliga decirlo, lo resultados en las competiciones juveniles ya pueden ser apreciados.
Satain viaja por estos días a Etiopia para finalizar su preparación para las olimpiadas en las montañas, junto a otros atletas del país africano. Previo a su partida, un canal de TV de Estados Unidos vino a entrevistarlo ya que su fama traspasa fronteras. En la entrevista Satain expresó su optimismo de mejorar lo hecho en Atenas 2004 y hasta sueña con subir al podio. No hay dudas que la ilusión de la medalla no conoce el límite de edad.
Por Deportes.co.il Rubén Friedmann

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