Fue con sentimientos mezclados que nosotros observamos al presidente Barack Obama pronunciar su extraordinario discurso a los mundos arabe y musulman en Cairo ayer.
Los criticos veran el discurso como increiblemente ingenuo. Aunque fue tambien el mas significativo y coherente intento por parte de un lider americano desde el 11/S para disociar a los 1,5 mil millones de musulmanes de las elites demagogicas predicando a traves del mundo la jihad y el odio a los no creyentes.
No es insignificante que Ayman al-Zawahiri y Osama bin Laden tomaron el poder del presidente para persuadir lo suficientemente seriamente para intentar evitarlo de emitir nuevos discursos. Debe haberlos enfadado ver a los imanes de linea dura y los hermanos musulmantes escuchando atentamente en el publico. Una encuesta de Gallup, tomada antes del discurso, mostro que el 25% de los egipcios aprobaban a los EEUU de Obama, comparado con el 6% de aprobacion por Bush.
En una ciudad donde la negacion del Holocausto es parte de la cultura popular, fue bueno escuchar a Obama decir a los musulmanes: "seis millones de judios fueron muertos", y decir lo contrario es "ignorante y odioso".
No para el aplauso, el proclamo: los vinculos de America con Israel son "inquebrantables".
Sin embargo, en otra parte, la equivalencia moral de Obama fue desconcertante. Innegablemente los palestinos han soportado la dislocacion pero hubiera sido valiente del presidente decir que mucho de ese dolor ha sido auto-infligido, gracias a 60 años de intransigencia.
El estuvo correcto en recordar a los estados arabes que su iniciativa de paz era solamente "un importante comienzo". Y nosotros fuimos gratificados cuando el insistio en que Hamas finalice con su violencia, reconozca los acuerdos de paz y acepte el derecho a existir de Israel. Pero nos avergonzamos cuando el asocio la lucha palestina con el movimiento de derechos civiles americano y con la campaña por el gobierno de la mayoria en Sudafrica- incluso si la linea de puntos de esta falsa analogia fue: el terrorismo es siempre injustificable.
Estuvimos preparados para su reiteracion de la posicion de larga data de la politica americana contra la empresa de los asentamientos. Pero el perdio una crucial oportunidad para preparar a los arabes para el compromiso territorial. Ningun gobierno israeli va a retirarse a las dificiles-de-defender Lineas del Armisticio de 1949.
Obama realmente no necesito decir a los israelies que reconocieran el derecho a existir de "Palestina" ya que cada gobierno desde Yitzhak Rabin ha sido explicito que el estado judios no quiere gobernar sobre otro pueblo. La cuestion real es si una violentamente fragmentada politica palestina es capaz de hacer los compromisos necesarios requeridos para cerrar un acuerdo.
Pero este discurso no fue en gran medida sobre el conflicto arabe-israeli. Fue un esfuerzo por buscar la diplomacia publica y disuasion- intentando disociar a las susceptibles masas musulmanas de los extremistas demagogicos que ahora sostienen tal dominio. Este es el porque el presidente fue prudente en viajar primero a Arabia Saudita, "donde el Islam comenzo", y solo antes de su discurso, para ser visto deferencialmente recorriendo una mezquita en Cairo- la ciudad desde donde la teologia de la jihad mundial primero extendio sus feroces tentaculos.
El discurso fue brillantemente proleptico: primero reconociendo las quejas musulmanas, luego estableciendo el caso americano. Para el oido israeli, el presidente sono halagador, prologando cada mencion del Koran con "santo". Pero fue exactamente la correcta puntada dada a la tarea en mano. De igual manera, mientras el presidente destacaba las epocas durante las cuales el Islam fue una fuerza para la educacion, nosotros no pudimos evitar sino recordar que incluso en aquella "edad dorada", los judios fueron tambien tratados como un pueblo dhimmi.
Y todavia, la vuelta atras del presidente a los periodos de relativa tolerancia reforzaron su llamado a los musulmanes de hoy dia para comportarse templadamente. Nosotros tambien apreciamos su defensa de la minoria cristiana de la region.
Nosotros tragamos saliva mientras el presidente entono que el "Islam no es parte del problema" del terrorismo mundial. Al mismo tiempo, nos recordamos a nosotros mismos que su meta era convencer a los musulmanes ordinarios a hacer de esta dudosa declaracion una realidad.
En democracia, empleando un toque mas liviano que su predecesor, Obama defendio el derecho de todos los ciudadanos donde sea a expresarse libremente y vivir bajo regimenes que respeten el estado de derecho.
El lider supremo de Iran Ayatollah Ali Khamenei no espero mucho a digerir el discurso de Obama antes de proclamar que America continuaba "profundamente odiada" en la region, algo que no iba a cambiar debido a "bellas y dulces" palabras. Quien sera el primer lider musulman en decir al ayatollah que esta equivocado?
Fuente: The Jerusalem Post
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