miércoles, 7 de marzo de 2012

El delicado juego de Obama frente a la encrucijada que plantean Irán, Siria e Israel

01/03/2012
El delicado juego de Obama frente a la encrucijada que plantean Irán, Siria e Israel

por: Ingrid E. Hecker Perry (Desde Nueva York)*

En los últimos meses, la región del Medio Oriente en su conjunto, vuelve a presentarse como un escenario altamente volátil y peligroso, donde intereses de diversos orígenes y finalidades juegan sus piezas de ajedrez contra un adversario tenaz e implacable: la muerte. La autora del siguiente artículo, analiza el rol de las principales potencias implicadas en este nuevo intento de reelaboración geopolítico.







“Un ataque israelí a Irán sería desestabilizador…” dijo el General de Ejército de los EEUU., Martin Dempsey quien es el director de la Junta de Jefes de las Fuerzas Armadas del país. “No es prudente en este momento…”, sostuvo en una entrevista al programa GPS de Fareed Zakaria en la CNN el pasado domingo 19 de febrero. Dijo también que el gobierno de los EEUU confiaba en que los israelíes “comprenderían nuestras inquietudes…”
En medio de las inquietudes que provocan la posibilidad de una acción militar de Israel contra las instalaciones nucleares de Irán, el Consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Tom Donilon visitó durante dos días Israel, para discutir dicha situación y otras que se viven en la región, como la grave crisis en Siria. Irán está bajo investigación por parte del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) desde el 2003 en relación a sospechas de desarrollar un programa de armas nucleares.


“Un ataque en estos momentos sería desestabilizador y no lograría los objetivos a largo plazo… no sugiero que los hemos persuadido de que nuestro punto de vista es el correcto y que están actuando de manera equivocada…”, declaró Dempsey en el mismo programa.

El precio del crudo

El denominado “oro negro”, Ha aumentado en un 4.8% durante febrero en razón de la inquietud que causan las tensiones entre Irán e Israel, y que podrían desencadenar un conflicto militar interrumpiendo el suministro de petróleo desde el Golfo Pérsico. Irán es el segundo productor mayoritario de la OPEP. Oficiales de la administración iraní han amenazado con cortar el paso por el Estrecho de Ormuz, a través del cual viaja cerca de un quinto del crudo exportado al mundo.

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha aprobado cuatro sanciones en contra de compañías nucleares en Irán.

Sobre la política iraní

El gobierno iraní informó que ha instalado 3000 centrífugas de “nueva generación” (confeccionadas domésticamente) en el reactor nuclear de Natanz en el centro del país, describiendo dicho evento como un “progreso” contundente.

Los EEUU le han bajado el perfil a dichas noticias; Victoria Nuland del Departamento de Estado manifestó que “…los iraníes exageraban lo logrado para exacerbar el nacionalismo…”

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. y su gobierno han responsabilizado a Irán por los ataques terroristas a carros diplomáticos israelíes en Nueva Deli y en Tiblisi, la ciudad capital de Georgia. Éstos ocurren después de la muerte de varios científicos nucleares iraníes, el más reciente de ellos el 11 de enero con un ataque de carro bomba en Teherán, el cual Irán alega haber sido ‘organizado’ por Israel.

A su vez, el general estadounidense Martín Dempsey sostuvo también, que las sanciones económicas impuestas sobre el régimen de los ayatolas en conjunto con la presión internacional, están comenzando a tener efecto, sin elaborar mayormente. La Unión Europea -por su parte- accedió el 23 de enero pasado, a prohibir cualquier importación del crudo desde Irán, y los EEUU negaron el acceso a su sistema financiero a cualquier banco extranjero que conduzca transacciones con el Banco Central de Irán.

Un “actor racional”

“Creemos que Irán es un actor racional…”, dijo Dempsey. “Sabemos… o creemos saber, que el régimen no se ha decidido a construir un arma nuclear…”.

Por su parte, a fines de febrero, el Ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, pidió sanciones “más estrictas y a prueba de filtraciones” para obligar a Irán a abandonar sus ambiciones nucleares. “Creo que existe un consenso en las mayorías de las capitales mundiales que no se le deberían permitir a Irán transformarse en un poder militar nuclear…”, sostuvo Barak en una conferencia de prensa en Tokio al final de una visita de cuatro días al país nipón.

Se refirió también a Corea del Norte, diciendo “… la acción militar en contra de las instalaciones nucleares iraníes deben considerarse antes de que el país logre la misma inmunidad que tuvo Kim Jong Il…” aludiendo al fallecido líder de ese país que desafió por décadas la presión estadounidense para abandonar su programa de armas nucleares.

Irán, por su parte, desea (ahora) conversaciones directas ‘lo más pronto posible”. Saeed Jalili, quien es su negociador nuclear más importante, escribió el 14 de febrero pasado a la jefa de relaciones exteriores de la Unión Europea, Catherine Ashton, una carta en la que le solicita dicho evento. Tanto ella como la Secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, quienes se vieron en Washington el 17 de febrero, favorecieron la iniciativa.

La oposición siria

Con respecto a los criminales aconteciientos que copntinúan enlutando a la sociedad siria –también- el general estadounidense Dempsey, le dijo a la CNN que “… era muy prematuro (¡!) armar a la oposición siria, porque es muy difícil identificarla… creo que intervenir en Siria sería muy complicado porque es un escenario en el que muchos intereses deben despejarse. Y lo que quiero decir con eso, es que hay muchos poderes involucrados: Turquía tiene claramente un interés, muy importante… Rusia tiene intereses importantes, y claro… Irán también…”

Un destructor naval y un barco de abastecimientos iraníes llegaron al puerto sirio de Tartos el pasado 17 de febrero para hacer ejercicios de “entrenamiento” con la marina siria, después de navegar a través del Canal de Suez. La televisión estatal iraní informó sobre dicha concurrencia, como un gran acontecimiento ya que reportearon ésta era solamente la segunda vez, desde la revolución islámica de 1979, que barcos de ese país entraban al Mediterráneo. El apoyo al presidente sirio Bashar al-Assad, (que está siendo presionado por los EEUU y sus aliados a abandonar el poder) queda así en abierta evidencia. Assad ha reprimido brutalmente y asesinando a miles de inocentes que protestan en las calles de las ciudades del país en contra de su régimen.

Hasta el momento, China y Rusia se oponen a la resolución que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobara a comienzos del pasado mes de febrero, haciéndole un llamado a Assad a dejar el poder a favor de un gobierno interino. Las Naciones Unidas estiman que más de 7.400 ciudadanos sirios han muerto asesinados

¿Qué rol juegan Turquía y Arabia Saudita?

La tensión en el Medio Oriente es peor que nunca. El marco en el cual se inserta esta tragedia, son las fallidas, innecesarias y tormentosas guerras en Irak y Afganistán.

Hasta el momento, existe un incremento de los asesinatos sectarios en Irak (suníes, shiitas y kurdos) que es directamente proporcional al momento en que se realizó el retiro mayoritario de las tropas estadounidenses y aliados de ese país. La situación es precaria y peligrosa; peor a la que se vivía durante el mandato de Sadam Hussein.

La ofensiva quema de copias del Corán, por parte soldados estadounidenses y las fotos que muestran a algunos de ellos orinando sobre los cuerpos inertes de combatientes del Talibán en Afganistán, se han traducido en un significativo aumento de los ataques suicidas contra instalaciones de los EEUU y sus aliados en medio de un creciente odio del pueblo afgano por la ocupación anglo/estadounidense/OTAN que el presidente Karzai intenta aplacar (aunque no mucho), según le convenga.

Obama, por ahora, intenta frenar una posible guerra

La administración del presidente estadounidense Barak Obama, intenta evitar –en este contexto- un enfrentamiento militar de cualquier tipo que lo sume a un nuevo desastre. Y se lo ha dejado más que claro al gobernante israelí, Benjamin Netanyahu.

Según Z. Brzezinski, ex Consejero de Seguridad Nacional para el presidente estadounidense Jimmy Carter “… no necesitamos ir a la guerra… debemos dejárselo en claro a nuestros amigos israelíes. ¡No iremos a la guerra! No irán a la guerra utilizando nuestro (sic) espacio aéreo sobre Irak. No los apoyaremos. Si lo hacen, tendrán que hacerlo solos. Las consecuencias serían desastrosas porque habrían de pagar el precio por comenzar una guerra masiva que los iraníes usarían en contra nuestra y ello sería desastroso para nosotros en Afganistán e Irak en términos de la estabilidad y las reservas de petróleo en el Medio Oriente…” (Declaraciones realizadas al programa GPS de Fareed Zakaria, el pasado domingo 26 de febrero de 2012)

Pero Obama no es ingenuo. Es pragmático y sabe que los israelíes son realistas y que la mayoría de ellos no desean ni apoyan la idea de una guerra/ataque militar. Gran parte de la sociedad, la oposición, el Mossad, Shinbet, y los militares están en contra de dicha opción y así lo han hecho saber. De hecho, la comunidad judía en los EEUU en su mayoría no apoya dicha acción. Sólo los niveles más altos del Likud, favorecen dicha medida.

Por otro lado, los turcos y saudíes están en silencio. Será importante lo que ellos piensen y decidan apoyar… son los aliados que tienen los EEUU en la región. También deben hacerse responsables de lo que ocurra en el área y tienen la capacidad de jugar un rol decisivo.

Conclusión

Un complicado juego de ajedrez geopolítico/religioso/económico en donde Israel también tiene parte, porque lo menos que les conviene es una Siria unida y reemergente, aunque ello parece imposible a la luz de lo que ocurre allí hoy en día.

A la luz de lo que ocurre en Irak, Afganistán y Paquistán, cualquier consideración de intervención militar en Siria e Irán sería simplemente un suicidio político (las elecciones presidenciales son en noviembre del 2012) y nacional por el enorme costo que estas confrontaciones implicarían. Afganistán sigue siendo la guerra más larga en la que EEUU ha estado involucrado, con un costo de más de 5 billones de dólares, casi 2.000 soldados estadounidenses muertos y más de 15.000 heridos, sin contar las decenas y decenas de miles de vidas afganas que se perdieron y se pierden todavía.



*La autora es Socióloga, Phd-HORIZONTE WEB

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.