jueves, 1 de agosto de 2013
cultura
¿Bailamos?
Sus ojos, como un hechizo golpearon en los míos, la invité a bailar.
La tomé entre mis brazos ,su mano en mi mano .Su piel me transmitió
un calor que no conocía .Algo nuevo para mi.
Mi brazo en su cintura ,me arrimé a su cuerpo.
La música nos acompañaba.
No hablé, me faltaban palabras para conversar con alguien que no conocía .
La música siguió con sus compases y nuestros cuerpos más unidos.
La mire en los ojos y vi. en ellos que era difícil de describir su color.
Celestes ,por momentos, y grises, según la iluminación.
Sus labios rojos, con algo de brillo, me regaló una sonrisa, pero sin hablar.
La sonrisa me llegó al fondo del corazón.
No encontraba palabras para hilvanar una conversación
La música estaba llegando al final.
El tiempo urgía.
El final se aproximaba.
Sus ojos que encandilaban ,sus labios que sonreían, su cuerpo que
transmitía un calor de amor y pasión.
No encontraba las palabras, estaba ebrio de emoción.
La música terminó ,nos quedamos los dos solos en la pista.
*Bailas muy bien*le dije,*quiero volver a bailar contigo**Con mucho gusto **me contestó.**Pero debes saber que soy ciega, y
ahora debes acompañarme a la mesa y ahí te estaré esperando**
*Te iré a buscar ,me interesas tu ,no solamente tus ojos.*
*Quiero ser ,no solamente tus ojos, quiero ser tu amigo ,tu compañero,
tu fiel servidor ,tu novio, y porque no, tu amante también*
**Te esperaré en la mesa**
¡ Y así fue como la conocí, y de ella me enamoré ¡
Mario Beer-Sheva