martes, 29 de octubre de 2013
UN ABOGADO PERDIDO EN UNA REGION DE MATONES
Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski especialmente para el blog de OSA Filial Cordoba
por Fouad Ajami
23/10/13
Los lamentos por lo que se ha hecho de la politica exterior americana en el Medio Oriente pierden el punto. Lo destacable sobre la diplomacia del Presidente Obama en la region es que ha completado el circulo—al inicio mismo de su presidencia. La "apertura" prometida a Iran, el pase dado a la tirania de Bashar Assad en Siria, la abdicacion de las victorias americanas en Irak y un malestar reflexivo con Israel—estos fueron caracteristicas del enfoque del nuevo presidente hacia la politica exterior.
Ahora estamos simplemente presenciando las alarmantes consecuencias de tan equivocado e ingenuo panorama.
Consideren este poco de euforia de un alto funcionario de la administracion Obama despues de las negociaciones del 16 y 17 de octubre en Ginebra con los iranies por su programa nuclear: "He estado haciendo esto ahora por unos dos años, y nunca antes he tenido conversaciones tan intensas, detalladas, directas y francas con la delegacion irani."
En Iran, especialmente, el Sr. Obama creyo que el haria funcionar su magia diplomatica unica. Si Teheran era hostil a los intereses americanos, si Iran habia hecho su mejor esfuerzo para frustrar la guerra en Irak, para proclamar una guerra ideologica feroz contra el lugar de Israel en la region y su misma legitimidad como estado, el Sr. Obama parecio creer que la culpa residia en las politicas de sus predecesores.
Cuando las protestas anti-regimen enturbiaron a Iran durante el primer verano del Sr. Obama como presidente, el se paro encerrado en el vacio de sus propias ideas. El permanecio al margen mientras el Movimiento Verde desafiaba pronosticos prohibitivos para desafiar a la teocracia. Los manifestantes no tuvieron un amigo en el Sr. Obama. El fue indiferente, esperando vanamente que los crueles gobernantes aceptaran la rama de olivo que el les habia extendido.
Nadie pidio al incipiente presidente americano que enviara fuerzas americanas a las calles de
Teheran, pero la indiferencia que el exhibio ante la causa de la libertad irani fue una falla estrategica y moral. Los teocratas de Iran no dieron nada a cambio de ese favor. Ellos siguieron adelante con su programa nuclear, mantuvieron la guerra indirecta contra las fuerzas americanas en Irak, empujaron mas profundamente en los asuntos arabes, posicionandose, a traves de sus representantes, como una potencia del Mediterraneo. Este debio haber sido el tutorial persa del Sr. Obama. El Lider Supremo de Iran, Ali Khamenei no tenia interes en un deshielo con el Gran Satan.
Pero el mes pasado en las Naciones Unidas el Sr. Obama elogio a Khamenei por emitir una "fatwa" contra el desarrollo de armas nucleares de su pais. Aun cuando no hay prueba que exista tal fatwa, la nocion que el regimen irani es gobernado a traves de edictos religiosos es ingenuo en extremo. Los musulmanes saben—a diferencia del presidente, aparentemente—que las fatwas pueden ser emitidas y abandonadas al capricho de quienes las pronuncian. En cualquier caso, Khamenei no es un estudioso religioso sentado en lo alto de la teocracia de Iran. El es parte del aparato. Como lo dijo el propio Ayatollah Ruhollah Khomeini en 1988, cuando su regimen estaba tambaleando a partir de una guerra interminable con Irak: "Nuestro gobierno tiene prioridad sobre todos los otros principios islamicos, incluso sobre el rezo, ayuno y el peregrinaje a Mecca."
No debemos subestimar la tenacidad de este regimen y su voluntad de gobernar. Debemos ver a traves de los rosados mensajes en Twitter del Presidente Hasan Rouhani, y las presentaciones PowerPoint de su ministro del exterior, Mohammed Jawad Zarif. Estos hombres cargan el guion del lider supremo y pueden solo ir tan lejos como el limite trazado por la Guardia Revolucionaria.
En una forma legalista, la administracion Obama ha aislado el tema nuclear del contexto mas amplio del comportamiento de Iran en la region. Ha sido proclamado un nuevo amanecer en la historia de la teocracia, pero finalmente descubriremos que los gobernantes de Iran estan empeñados en seguir un probrama de armas nucleares mientras tratan de librarse de las sanciones economicas.
Cierto, las sanciones han tenido su propio poder, pero no han evitado que Iran ayude al regimen asesino de Assad en Siria, o subsidie a Hezbollah en Beirut. Y ellas no disuadiran a este regimen de su busqueda de armas nucleares. En regimenes dictatoriales, el dolor de las sanciones es pasado a los clases bajas y a los vulnerables.
Asi como ha hecho con Iran, el Presidente Obama ahora asume un enfoque legalista hacia Siria, aislando el uso de armas quimicas por parte de Assad de su matanza de su propio pueblo a traves de medios mas convencionales. La irresponsabilidad del presidente con respecto a Siria—la debilidad exhibida cuando el ignoro su propia "linea roja" con respecto al uso de armas quimicas por parte de Assad—fue un regalo para el regimen irani. Los mullahs ahora saben que su programa nuclear, un cuarto de siglo en preparativos, no tendra que ser entregado en ningun conjunto de negociaciones. Ninguna demanda americana sera respaldada por la fuerza o siquiera por la fuerza de voluntad.
La credulidad de la busqueda de una apertura con Iran por parte del Sr. Obama ha incomodado a los aliados de America en la region. En Jordania, Arabia Saudita y los Emiratos Arabes Unidos hay un sentimiento poderoso de abandono. En Israel esta la constatacion amarga que el aliado mas fuerte de America en la region es hecho parecer ahora como el ultimo bastion contra una era feliz de compromiso que calmara a una region turbulenta. Un curso diplomatico americano solido con Iran nunca tendria que llegar tan lejos adelante de los intereses de Israel y de la coalicion anti-irani arabe moderada de la region.
En Washington, en esta epoca de indebido optimismo, son olvidadas las amenazas representadas por los teocratas de Teheran, como lo es la continuada barbarie del regimen de Assad. Con el "acuerdo" mediado por los rusos con respecto a las armas quimicas de Siria, el Sr. Obama simplemente ha envuelto la abdicacion americana en el traje de la razon y prudencia.
Los que manejan a la Republica Islamica de Iran y su programa nuclear, como la mayoria de los otros en la region, han tomado la medida total de este presidente americano. Ellos sienten su desesperada necesidad de una victoria—o cualquier cosa que pueda pasar como una.
El Sr. Ajami es un alto miembro de la Institucion Hoover de Stanford y el autor muy recientemente de "La Rebelion Siria" (Imprenta de Hoover, 2012).