“Latinoamérica en general, y Argentina en particular, pueden oxigenar el proceso de paz entre israelíes y palestinos”
por: Maximiliano Borches (Desde Buenos Aires)
ENTREVISTA. En momentos donde los vientos de guerra en el Medio Oriente amenazan con convertirse en huracanes, “Horizonte, para una convivencia en Medio Oriente”, hace honor a su nombre y entrevistó al referente pacifista argentino-israelí Meir Margalit, quien junto a una delegación de líderes de la sociedad civil israelí y palestina, se entrevistó el pasado 9 de febrero con la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner en la Casa Rosada. “Latinoamérica funciona distinto a los países capitalistas centrales, no busca sacar provecho económico ni tiene intenciones colonialistas. Aquí actúan bajo parámetros humanistas, de corte moral y ético que no se ven en otros continentes.”; afirma el entrevistado.
A principios del pasado mes de febrero; Buenos Aires fue escenario de un importante encuentro entre cuatro representantes de las sociedades civiles israelí y palestina (el argentino-israelí Meir Margalit, concejal en Jerusalem por el partido Meretz; Ron Pundak, presidente de Peace en Israel; y los palestinos Saman Khoury, secretario general del foro, y Nancy Sadiq, presidenta de Peace en los territorios palestinos y directora de Panorama, un centro sobre democracia) y la presidente argentina, Cristina Fernández de Kirchner y su Canciller Héctor Timerman, entre otros representantes del gobierno argentino.
-¿Cual es la evaluación, que tanto usted como sus compañeros, realizaron tras el encuentro mantenido con la presidenta argentina Cristina Fernández, en la Casa Rosada (Casa de Gobierno)?
El encuentro con vuestra presidenta y autoridades ha sido para nosotros sumamente positivo. Si cuando fuimos para Buenos Aires, dejamos Israel con un sentimiento de frustración por la situación actual del proceso de paz, regresamos a nuestro país con la sensación de que no todo está perdido y que hay una buena posibilidad de revivir el estancado proceso. Latinoamérica en general y Argentina en particular son el único actor en el ámbito de la política internacional que puede oxigenar este proceso en vías de extinción, y es por ello que pedimos -incluso diría: rogamos!- a vuestro gobierno que se involucre en forma más activa en esta región.
-En unas declaraciones posteriores al encuentro con la presidenta argentina, usted afirmó que una de las metas políticas de las organizaciones que ustedes representan es lograr un mayor involucramiento de Latinoamérica en su conjunto para intentar reactivar el proceso de paz; ¿ustedes analizan que el proceso de integración que se viene desarrollando en esta región, tras la creación de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), convierte a los países de esta región en actores de relevancia que en un corto plazo podrían comenzar a mediar con mayor fuerza, en distintos litigios internacionales?
No cabe duda de que uno de los factores principales por los cuales hemos encontrado una recepción tan seria e incluso apasionada de parte de vuestra presidenta, es la profunda sensibilidad que existe en vuestro país por todo lo que sean Derechos Humanos. Latinoamérica funciona distinto a los países capitalistas centrales, no busca sacar provecho económico ni tiene intenciones colonialistas. Aquí actúan bajo parámetros humanistas, de corte moral y ético que no se ven en otros continentes. Es por ello que 'la química" entre nosotros y vuestro gobierno fue inmediata. Vuestro canciller (Lic. Héctor Timerman N.A) sabía exactamente de que estamos hablando y no tuvimos que hacer grandes esfuerzos en explicar nuestra preocupación ya que nuestra visión de paz y la suya era similar- ya no hablemos de la sensibilidad humana de vuestra presidenta, quien se identifico plenamente con nuestra lucha y nos ofreció todo el apoyo que Argentina puede ofrecer en este esfuerzo mancomunado de israelíes y palestinos por acabar con la ocupación y vivir en paz. .
-¿Se podría afirmar, por lo tanto, que las experiencias latinoamericanas –y de Argentina en particular- en materia de Derechos Humanos, son tenidas en cuenta como ejemplo a seguir en sectores de las sociedades civiles palestina e israelí?
Efectivamente nosotros pretendemos trasladar a nuestra sufrida región el modelo latinoamericano- si quieren pueden denominarla "la tercera vía"- ni la del eje de Irán ni la del eje americano, sino una tercera vía de política humanista. Esto puede parecer un delirio utopista de soñadores, pero es importante remarcar que el futuro se llama Latinoamérica. El viejo mundo europeo/estadounidense está en declive. Nosotros que vivimos en la cuenca del Mediterráneo, vecinos a Europa lo vemos con más claridad. El futuro viene de la mano de Latinoamérica.
-En este sentido, ¿cómo fue recibido en la sociedad israelí, el contundente apoyo que prácticamente la totalidad de los países latinoamericanos le brindaron a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para que puedan ser reconocidos como Estado miembro –con plenos derechos- de las Naciones Unidas?
Obviamente Israel está sumamente enfadada con los países latinoamericanos que se pronunciaron abiertamente a favor de la ANP en las Naciones Unidas. La pregunta es "So what !!!!" Qué importancia tiene la postura del gobierno israelí. Aquí están en juego cosas más importantes que la reacción de un Bibi (apodo de Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel N.A) o un Liberman (Avigdor Lieberman, Canciller israelí. N.A) Está en juego la paz y la justicia, y Latinoamérica demostró que en momentos decisivos se encuentra del lado de la justicia, no importa que opine tal o cual gobierno. Por otro lado, si vamos a depender de lo que el gobierno israelí sostenga o pretenda, el Medio Oriente acabará en un precipicio, Ha llegado la hora de hacer lo que corresponde sin brindar mayor atención a lo que Israel piense al respecto.
-Ahora bien, tomando en cuenta el congelamiento de las relaciones entre los gobiernos de Israel y la ANP, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que mientras Hamas forme parte de la institucionalidad palestina, no habrá diálogo, ¿qué opina al respecto?
La postura israelí de que si Hamas forma parte del gobierno palestino no habrán negociaciones, es una clara excusa israelí para zafarse de las negociaciones de paz. Debemos comprender que el actual gobierno israelí es el más derechista que ha tenido Israel en su historia, con un canciller de perfil cuasi-fascista, y que no tiene ninguna intención de devolver los territorios palestinos ocupados tras la guerra de 1967. Es por ello que el gobierno israelí no deja de buscar pretextos para evitar toda negociación que los podría poner en aprietos. El acuerdo del Fatah con el Hamas le viene a Bibi como anillo al dedo. Fue muy gracioso escuchar a Bibi decir hace unos días atrás que se Abu Mazen (Presidente de la ANP. N.A) continua sus negociaciones con Hamas, se congelaran las conversaciones de paz con Israel- fue muy gracioso porque la gente en las calles se preguntaba: ¿de qué negociaciones de paz con Israel está este señor hablando ?...
Fue muy gracioso aunque en realidad era más para llorar que para reir.
-¿Y considera, a su vez, que por el lado palestino existen fuertes señales para retomar el diálogo?
En el lado palestino, la situación es compleja. Por un lado existe una necesidad imperiosa de llegar a un acuerdo de paz basado en los límites de la tierra palestina conquistada en 1967, con algunos pequeños "arreglos territoriales cosméticos". No cabe duda que para ellos ésta es una cuestión de vida o muerte. Por otro lado, la autoridad palestina está cansada de "negociar", o mejor dicho, de entrar en negociaciones largas y agobiadoras que no llevan a nada. Para Israel, la negociación es una táctica destinada a estirar el proceso hasta que los palestinos se rindan y desaparezcan. Más que negociación es una trampa. Es por eso que los palestinos dicen "basta de negociaciones" vayamos directo al grano, ya todo ha sido negociado, ya sabemos cuáles son las posturas de cada cual e incluso sabemos cuál será la solución del conflicto; ya es hora de dejar de negociar y empezar a implementar. Por otro lado, los palestinos dicen con justa razón que si Israel quiere sinceramente negociar, que por lo menos congelen la construcción de asentamientos en tierra palestina, ya que esos asentamientos son el mayor obstáculo a la paz. Por cierto, no se puede entablar una negociación mientras en la tierra se producen hechos que están cambiando dramáticamente la realidad geopolítica y minan la posibilidad de dividir la tierra entre las dos naciones.
-Cambiando un poco el ángulo de la entrevista y pasando a temas más globales del Medio Oriente; ¿a qué intereses responde –según su parecer- la presión de las potencias occidentales sobre Irán?
No soy experto en siria ni en Irán, por lo cual prefiero no explayarme al respecto.
-¿Considera que el actual gobierno israelí ya tomó la decisión de llevar a cabo una acción militar contra Irán, o es un discurso de los sectores más conservadores de aquella sociedad, de cara a las próximas elecciones nacionales?
Respecto a la posible intervención militar israelí contra Irán, yo tengo la sensación de que todo esto es una cortina de humo destinada a postergar negociaciones con la autoridad palestina. Por cierto, en Israel hay más de uno que disfrutaría una contienda con Irán, pero creo que el gobierno israelí, si bien es bastante extremista, no es tan loco como para iniciar una contienda de esta envergadura con Irán. No diría con seguridad de que podemos dormir tranquilos, ya que en esta región no hay ni un minuto de tranquilidad y todo puede estallar en cualquier momento, pero veo remota la posibilidad de un ataque israelí a Irán. ¡Ojalá no me equivoque!
-¿Cuál es su análisis sobre los hechos de represión y muerte que se vienen desarrollando en Siria?, ¿se podría afirmar que estamos presenciando los últimos días de las más de cuatro décadas que lleva la dinastía Al-Asad en el poder?
La situación en Siria no es para nada clara y es muy diferente a la del resto de los países árabes vecinos. En Siria el grueso de las fuerzas armadas pertenecen a la minoría Alawita y apoyan al presidente Assad, a sabiendas que tienen mucho que perder si la mayoría Sunita toma el poder. Los cristianos sirios también están muy preocupados por lo que podría llegar a suceder si la hermandad musulmana toma el gobierno. Es difícil predecir lo que podría suceder en Siria, pero un cambio interesante ya ha ocurrido en la región: la dirigencia del Hamas en Damasco se vio forzada a abandonar el país y a mudarse a los Emiratos del Golfo, en particular a Qatar, donde el clima político es más moderado. Alejándose físicamente de Siria, se han alejado también del eje sirio-iraní. Esto ha sido uno de los incentivos del acuerdo entre Hamas y Fatah que facilitaría la reunión de estos dos grupos palestinos, y desde mi punto de vista, esta unificación será para bien pues dará más legitimización a Abu Mazen y mayor peso al pedido palestino de reconocimiento en las Naciones Unidas.
-Por último Meir, ¿qué opina acerca de los procesos políticos que se vienen desarrollando en los países árabes?
Es muy prematuro aún para tratar de hacer un balance de los procesos políticos que se vienen desarrollando en los países árabes vecinos. Las elecciones realizadas hasta ahora en países como Túnez y Egipto las han ganado fuerzas islámicas; cuestión que es un tanto preocupante, de la misma forma en que me preocupan las fuerzas ultra-religiosas que están levantando cabeza en Israel o grupos fundamentalistas en cualquier otro país. Obviamente apoyo todo proceso democrático, pero creo que entramos en un proceso de transición, en el cual el péndulo ha pasado al otro lado y los pueblos elijen las fuerzas opositoras al régimen pasado (que en realidad son las únicas que mantenían una estructura organizada), pero que estas no incluyen una agenda en la que figure el respecto a los Derechos Humanos, como yo quisiera. Tal vez este es un paso inevitable en el proceso de cambio y los beneficios de esta primavera los veamos mucho mas adelante.
Perfil del entrevistado
Meir Margalit, nació en Buenos Aires, Argentina, en el año1952. A partir del año 1972 se instaló en Israel. Es doctor en Historia y especialista en la historia de la comunidad judía en Palestina durante el Mandato Británico. Ha sido uno de los fundadores del Comité Israelí contra la Demolición de Viviendas (ICAHD). Concejal por el partido Meretz en Jerusalem (entre 1998 y 2002, y de nuevo desde 2008 hasta la fecha) Es autor del libro Seizing Control of Space in East Jerusalem (2010)Horizonte Web
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