martes, 23 de julio de 2013

Científicos de la Universidad de Tel Aviv mejoran los transplantes con un "corazón de oro"

Las células del tejido del corazón no pueden multiplicarse o regenerarse y el músculo cardíaco contiene pocas células madres, lo que hace imposible que el tejido se repare por sí mismo. Como resultado, el corazón se convierte en fibrótico y no pude contraerse adecuadamente, lo que crea desafíos para los cardiólogos que intentan salvar vidas, y pesadillas para los pacientes y sus familias desesperadas. Un grupo de científicos parece haber encontrado un "parche" viable y transplantable para reemplazar el tejido cardíaco dañado, el cual está hecho de nanofibras de oro. El equipo liderado por el Dr. Tal Dvir y el estudiante de doctorado Michal Shevach del Departamento de Microbiología Molecular y Biotecnología y Centro de Nanociencia y Nanotecnología de la universidad usaron nanofibras integradas hechas de partículas de oro integradas con células cardíacas para formar tejidos funcionales. Su objetivo fue mejorar las señales eléctricas entre las células. El oro ha sido usado para aumentar la conectividad de biomateriales, explicó Dvir. Al agregar las partículas de oro al tejido cardíaco éstas se contraen más rápida y fuertemente, lo que hace que estén más disponibles para un transplante, dijo.