**Loco**
Si tu quieres puedes llamarme loco; soy un loco de amor, que
en
tus brazos, enloquecí hasta perder la razón. Y como loco
vivo feliz,
sin remordimiento, sin preocupación, sin mirarme en tus
ojos, sin
besar tu boca, sin tocar tu cuerpo, sin vigilar tus horas,
tus compañías,
tus trasnochadas y tu llegada al amanecer.
¡Llámame loco!
Me lo merezco, porque lo soy; es la forma más feliz que he
conocido
para vivir. Por nada lo dejaría, día a día estoy
consiguiendo que en el
laberinto de mi cerebro reine la risa y la alegría, que en
su momento me
quitaste y hoy recuperado estoy.
¡Llámame loco!
Te lo pido como un favor; es el título que merezco y gracias
a ti lo he
adquirido, con justicia merecida, por haberte amado de la
forma que te amé.
Hoy la locura es mi compañera, y aunque tu no lo creas, es
digna de toda mi
confianza, es el hombro en el cual me apoyo, en este
desvarío, que es la vida
que tu me has marcado sin ninguna piedad.
¡Llámame loco!
Representa, para mi, como un título bien ganado y sólo
necesito, ahora, que me
lo repitas para sentirme feliz.
Mario Beer-Sheva
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